Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Pedro Villagra

CUENTO Pedro Villagra

Ilustración de Florencio Molina Campos “Estaba en la más baja de las funciones de la estancia, pero también la más requerida, era el manual del patrón” El hombre barbudo llegó a la finca una noche, pero nadie sabía bien en cual. Fue apareciendo de a poquito en la casa del patrón, en la sala, que le decíamos. El único que sabía quién era, por qué estaba ahí, era Jorge, el capataz, los demás lo sospechábamos, aunque no supiéramos los detalles. Al tiempo el hombre ya se animaba a aparecer fuera de la casa, se hacía ensillar un caballo y salía a la tardecita. A veces volvía esa misma noche y a veces, dos o tres días después. Se hacía llamar Pedro, Pedro Villagra. Nosotros le decíamos don Pedro, aunque también sabíamos que no se llamaba así. Habrá sido por el treinta, el treinta y dos, pongalé, cuando pasan tantos años las fechas dejan de importar. Era alto, un poco rubión, estaba barbudo y, en ese entonces estaban de moda, usaba bombachas. Se notaba que era leido, ¿ingeniero?, abogado quiz