Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Cruz

30 ALMANAQUE MUNDIAL Jesucristo

La crucifixión de Jesucristo El 7 de abril del año 30 es crucificado y muere Nuestro Señor Jesucristo: en esta nota, breve explicación de cómo se llega a esa fecha El 7 de abril del año 30 es el día que posiblemente murió Nuestro Señor Jesucristo. Para llegar a esta conclusión los teólogos consultaron —y lo siguen haciendo —buceando en los pocos documentos que han llegado de aquellos tiempos. ¿De dónde surge la noción arraigada de que murió a la edad de 33 años? En los evangelios no se establece explícitamente tal afirmación, aunque Lucas, en el capítulo 3, menciona que la vida pública de Jesús comenzó cuando tenía alrededor de treinta años. Ramón Teja Casuso, catedrático de Historia Antigua en la Universidad de Cantabria y profesor "honoris causa" en la Universidad de Bolonia, argumentó que “históricamente no se puede sostener la idea de que Jesús murió a los 33 años”. Según Teja, cada cultura utiliza su hecho histórico más significativo para marcar el tiempo. Y señaló que D

PRONÓSTICO Posibilidades de que llueva

Pronósticos con escritura para tontos Si todas las tormentas que se anuncian para Santiago llegaran de verdad, viviríamos inundados, pero eso no sucede Los pronosticadores del tiempo debieran decir todos los días, mañana quizás llueva o quizás no llueva. Siempre es mitad y mitad o cincuenta y cincuenta. Eso de que hay un 30, un 40 o un 70 por ciento de posibilidades de lluvia, son macanas. Si las grandes tormentas que se anuncian para Santiago se cumplieran, viviríamos inundados, año redondo con el agua hasta el cogote. El tiempo es una moneda, sale cara o cruz. O llueve o no llueve. Para peor, siempre de noche, como si a las nubes les gustara jugar a las escondidas con los metereólogos. La temperatura máxima que anuncian nunca ocurre, siempre hace más calor que el anunciado. Pero nunca dicen: “Nos equivocamos, dijimos que harían 38 grados y nuestro propio termómetro marcaba 45 grados”. Quizás no lo hacen porque ellos están para comunicar el tiempo futuro, no para revisar sus yerros de

FIESTA Ojalá que llueva

Niño Dios Hoy es una muy buena ocasión para recordar el nacimiento de un chico en Belén, el 25 de diciembre del año 1 Que llueva en Navidad, carajo. Ojalá que no pare el agua, desde las 10 de la noche del 24 hasta las 10 de la mañana del 25 y que se hagan agua las fiestas, las jodas, los sánguches de miga, los encuentros, los turrones, los brindis, el muérdago de plástico que ponen en las puertas de las casas, las pizzas y el quipi, las visitas, el baile, la nieve de telgopor de los pesebres, la sidra o el champán, los paseos, los cohetes, los abrazos falsos como tornillo de yeso, el lechón, el cabrito o el pollo. Alguno aprovechará para putear a los mil dioses que siguen dando vueltas en el aire, porque planeaban quizás toparse con la novia, la amiga, la mina, ir a un boliche de la autopista, salir con los muchachos, visitar a los suegros. Otros, como usted, posiblemente, aprovecharán, ya que estarán sin hacer nada, dispuestos a quedarse despiertos hasta las mil quinientas, para medit

PELÍCULAS Instrucciones para hacerse el muerto

Peter O´Toole en Lawrence “Esa noche el tipo soñará en que quizás más adelante lo seleccionen para un papel más trascendente, ser el extra que camina por una calle de Nueva York detrás de Dustin Hoffman” Todos miran al muerto con algo de aprensión, esperan que no se mueva, no haga un gesto, no sonría ni frunza el ceño. Aguaitan solamente su quietud, con el rostro que finalmente aflojó tensiones y ya no sufre, no goza, no siente, no sabe. Obviamente, está muerto es el centro de una reunión a la que voluntariamente quizás no hubiera asistido. Pero, ahí está, frío, pálido, serio, elegante, vestido con traje y corbata, las yertas manos en cruz, como contaba Antonio Machado en “Llanto de las virtudes y coplas por la muerte de don Guido”, un señor, de mozo muy jaranero. El finado es observado con un espíritu parecido a la mirada que lanzan los televidentes o los que van al cine cuando alguien se muere en la pantalla, a ver cómo compone el personaje del baleado, el tipo que cayó de un ed