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Mostrando las entradas etiquetadas como Chipacos

CASOS Cuando no me importan los dramas ajenos

Si no hay chipaco en una parte, en otro lado habrá Nunca me interesa por qué en un negocio no tienen lo que busco, con mis problemas tengo suficiente Un caso: —Buenos días, necesito un tornillo de tal forma. —Uy, lamento informarle que el proveedor no ha traído este mes. Otro caso: —Hola, ando buscando chipaquitos como los de ayer. —Disculpe, pero faltó el panadero que los hace. Otro más: —Señor taxista, necesito que me lleve al barrio Industria. —Lo llevaría, pero ¿sabe qué?, no tengo cubiertas y nos vamos a quedar en el camino. La verdad es que tus problemas no me importan, tampoco quiero que me expliques el estado del país ni que me des una clase de economía. ¿Tienes los putos tornillos, vendes chipaquitos, me vas a llevar en auto? Decí sí o no. Si sí, sí, y si no, no y me voy a otro lado a buscar, porque gracias a Dios no sos el único ni  tienes el monopolio de la venta de pan. Pero no me vengas con que la importación está cerrada, por eso no entran los tornillos al país y si s

CUENTOS Y RELATOS de Santiago del Estero

Mirando la televisión Adelanto exclusivo del libro, próximo a presentarse, “Pretérito santiagueño” Por Carlos Enrique Bothamley El negocio de la tele A mediados de 1965 fue a Córdoba a trabajar en la fábrica Fiat Concord. Los cordobeses ya tenían televisión (en blanco y negro). Santiago no tenía tele aún, pero se esperaba que en poco tiempo más comenzaría la transmisión. Cuando cobré mi primer sueldo pagué la entrega de un televisor y lo traje a Santiago en el ómnibus para regalárselo a mis padres. Aún faltaban tres meses para comenzaran a transmitir. Por octubre de 1965 comenzó la transmisión de canal 7 (durante varios años fue el único canal). Parece que esto sorprendió a los comercios de Santiago que no tenían un gran stock de aparatos. No era fácil comprar un televisor. Cuando llegó la televisión en colores los negocios ya estaban preparados con miles de aparatos en stock. Pero volviendo al blanco y negro, eran pocos los que contaban con televisión, sobre todo en los barrios. Enton