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Mostrando las entradas etiquetadas como Caravana

SAFARI Qué hacer si lo rodean los leones

Observan la naturaleza ¿Qué puede salir mal en una excursión en Jeep, con guías, por la sabana africana, rodeado de turistas de varias nacionalidades? Sos el único que habla español en esa caravana de Jeeps que se adentró en la sabana africana, vas callado, mirando todo con mucha curiosidad a turistas de todas las nacionalidades, ávidos de fotografiar leones, hienas, jirafas, elefantes, hipopótamos. Crees reconocerlos por la manera de hablar, los alemanes, los norteamericanos, el italiano que va con su esposa, una morena que tiene lo suyo. Los guías y el chofer son morenos africanos, hablan inglés, por supuesto. Tienen la delicadeza de detenerse cada vez que un turista grita “stop”, ya sea porque le pareció ver un impala o quiere ir más despacio para observar mejor a los elefantes. De vez en cuando los dejan bajar a estirar un poco las piernas. Entonces los africanos bajan con un rifle, por las dudas se aparezca un león, una tropa de elefantes enfurecidos. No se han detenido en ninguna

CUENTO La lotería del viudo

Cementerio de La Guanaca, Jiménez, foto de archivo “Los otros andaban casa por casa, entropados, diciendo que harían caminos, puentes, un nuevo edificio para el hospital, pavimento para las calles, fábricas de esto y aquello” Cada vez que ganaban una elección hacían una caravana de autos por el pueblo, atronando con las bocinas. Adelante, la camioneta del comunal y por detrás, los vehículos de los compañeros. No importaba si en la provincia o en la Argentina habían perdido como en la guerra, tampoco si habían ganado raspando, por media docena de votos o habían sacado veinte cuerpos de ventaja. “Ganar es ganar”, decían. Fue así durante mucho tiempo. Acuerdesé de que cada dos años hay elecciones para diputados y senadores nacionales, cada cuatro para comisionado, gobernador y Presidente de la Nación. Festejaban todas con caravana, llueva o truene. La contra se quedaba, mascando bronca y los chicos bochincheros más algunos grandes salían a ver y a saludar desde la puerta de la casa. Cuan