Efectiva publicidad Es una de las más pegadizas de todas las que andan circulando, no hay con qué darle, pero por qué es un ejemplo de lo que no se debe hacer Una de las publicidades argentinas más efectivas tiene unos versitos medio mal hechitos y una música pegadiza y —vamos a decirlo —ultra pedorra: “Mate, café // harina y palmitos, // yerba, mermelada, // cacao, picadillo, // paté, caballa, // arroz y arvejas, // sardinas y atún, choclo y lentejas… // Marolio le da sabor a tu vida, // Marolio esta desde el comienzo del día” . Cuente bien, son 16 productos y el cantito dura algo más de medio minuto, nada más. Y no diga que nunca oyó la musiquita, porque nadie le va a creer. Oiga, dicen que es una verdadera tontería. En las escuelas y universidades de mercadeo (que en inglés es ´márketing´) circula como ejemplo de lo que no se debe hacer en una publicidad de comestibles. Sin embargo, es una de las más reconocidas por las amas de casa, los hijos, el marido, la abuela, el tío, el padri
Cuaderno de notas de Santiago del Estero