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Mostrando las entradas etiquetadas como Habla

PAGO Cuando vuelven los porteños

Las riñas entre los gauchos La vez que uno de ellos pegó un grito en una riña en la casa del Fiero Alfonso, siempre es recordada por los paisanos Les decíamos porteños, pero eran nacidos al lado del chiquero de las cabras y criados a mate cocido y tortilla, igual que nosotros. Se habían ido a Buenos Aires a trabajar y al cabo de un tiempito nomás, regresaban aporteñados, hablando de “acá”, decían “sha voy”, “vos qué te creés”. Aprovechábamos para exagerar: “Afuera shueve que te shueve, adentro que ni gotia, vistes”, “sho no iré, porque sho sha juí”. Nos burlábamos de esa chica que volvió después de un año y preguntó: “Má, ¿qué es esa frutita que chilla?”. “¿Cuál hija?”. “Esa que está ashá”. “Eh, chica, eso es un coyuyo”. “¿Me cortás uno?”. Volvían con sus enormes grabadores al hombro, pantalón colorado, camisa azul brillante, zapatillas que nunca se habían visto en el pago y anteojos oscuros, porque ahora, ¡mirá vos!, el sol les molestaba en los ojos. Algunas chicas estaban más lindas

HISTORIA Tutité

Micaela y Raúl Mis abuelos paternos decidieron hablar de “tú”, en vez de usar el “vos” que se estaba imponiendo en ese tiempo El cuento de la familia dice que cuando mis abuelos paternos estaban de novios o recién se habían casado, decidieron hablar de “tú”, en vez de hacerlo con el “vos”, que usamos todos ahora. No sé por qué lo hicieron, pero lo sospecho. Imagino que, en ese tiempo, mediados de la década del 20 del siglo pasado, estaba cambiando el idioma de los argentinos, entre otras razones, por la radio. Quizás de chicos hablaban de “tú” y de grandes quisieron conservarlo. De tal suerte que, mi tío Raúl, mis tías y mi padre, hablaban así, sin ningún problema, les salía natural, es lo que se acostumbraba en la casa, contra la manera en que hablaban todos. Algunas de mis primas siguen hablando de “tú”, pero no sé si sus hijos lo usan o se pasaron al “vos”. De chicos, alguna vez sentí a mi madre hablar de “tú” con mi padre, pero nosotros, los hijos, digo, voseamos desde siempre. Lo

TUCUMÁN Provincia que nos envidia

Postal de los ñañitas Todo lo que me molesta de los tucumanos y nunca antes me animé a decir. 1 Que vivan tan cerca. Pasas Las Termas y empiezan. ¿No podrían comenzar un poco más zllá, después de Catamarca, aunque sea? 2 Da mucha rabia que nos enviden a) la manera de hablar, b) la chacarera, c) la guaracha, d) el estadio Madre de Ciudades y e), la estatua del 10ego, en bronce, obvio, o se creen que la íbamos a hacer de mármol pedorro como la que tienen en la plaza Independencia. 3 Oiga, en serio le pregunto, ¿por qué hablan tan fierito? Ya no dicen Ramón, arriba, ropero sino Wamón, auiba, uopero. A veces les decimos ahá, ¿ah?, ¿sí?, mire usté, qué barbaridá, pero por cortesía nomás, porque no se les entiende un soto. 4 Son mala leche casi todos… bueno, no casi todos, pero muchos sí… muchísimos. Como los termeños, pero con el cuchillo más afilado. 5 Viven en Tucumán y parece que les gusta, ¡es increíble, en serio! 6 Creen que todos nosotros juntamos mistol y vivimos en ranchos a l

CALENDARIO NACIONAL Academia Porteña del Lunfardo

Milonga lunfarda, interpretada  por Edmundo Rivero En 1962 fue fundada la Academia Porteña del Lunfardo, idioma característico de los presos de principios del siglo pasado El 21 de diciembre de 1962 se fundó la Academia Porteña del Lunfardo. Fue una iniciativa de José Gobello, Nicolás Olivari y Amaro Villanueva. Gobello, junto a Luis Soler Cañas y León Benarós, convocó escritores y periodistas para crear un instituto de estudio del habla popular. Pero no es solamente para estudiar el habla que se fundó esta academia sino también para el estudio, valoración y difusión de otros aspectos de la cultura popular de Buenos Aires como la música, el canto, la literatura, la historia, la arquitectura y el arte. Durante sus primeros años, la Academia se reunió en un pequeño departamento de la calle Lavalle. Ahí se organizó la biblioteca, bajo la dirección de Enrique Ricardo Del Valle, que también ocupó un sillón académico. Al cumplir sus bodas de plata, en 1987, se inauguró una sede más amplia en