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Mostrando las entradas etiquetadas como Gordita

CUENTO Lo que sucedió cuando Gordita bajó de peso

Imagen de archivo “Endemientras, ella seguía despachando equipos, les ponía un sello y los anotaba en un cuaderno que iría a parar a manos de los de Estadísticas…” Bajó de peso Gordita, de las cien dietas por mes, con un método de mucha gimnasia y poca merienda y nada de cena. Dijo que era con vistas al futuro. Y no fue más Gordita sino la señorita Lidia. Uno de Expedición la avanzó, pero lo rechazó. Las de Mesa de Entradas repetían bien hecho, bien hecho, bien hecho, hace más de dos años que trabaja aquí y ahora, por un rollo menos ya la miran con ganas. Esos degenerados. A Gordita no le importaba lo que decían los de Expedición, los de Seguros de Embarque ni las chicas de Administración General, esas arpías que se rieron la vez que el Gerente la alabó por puntual, buena y trabajadora. Por ese tiempo había empezado a noviar con un muchacho que la pasaba a buscar a la salida. Nada del otro mundo. Supimos que trabajaba en Casa Rosa y que le faltaba un año para recibirse de Contador en l...

AMORES Bombón exquisito

“Ahora, que no tenemos un héroe vivo ni en la Argentina ni en el exilio, pienso que deberían regresar los tiempos del fin de la infancia” El año que murió el General andaba en segundo de la secundaria, platónicamente embelesado por una gordita a la que una amiga le avisó que estaba enamorado de ella. Complicaciones del lenguaje, no decíamos “tal chica me gusta” sino, porque ya éramos grandes y nos merecíamos un sentimiento supuestamente más profundo, largábamos: “Gusto de Fulanita de Tal”. En vez de mandarle a decir que quería salir con ella, que quizás podríamos ser novios si me daba una oportunidad, le indiqué a mi amiga que le informe que estaba perdidamente enamorado, que me llevaba el alma, que haría lo que fuera por una mirada, un gesto, un saludo, una sonrisa de ella y que cuando pasaba cerca me costaba respirar. No era verdad, pero había una cosa que me daba en el estómago cada vez que la veía. Bastó con que mi amiga la pusiera al corriente para que la chica, que luego adelgazó...