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Mostrando las entradas etiquetadas como Amontonamiento

LEYENDAS El ocaso de los espantos

Kakuy de la plaza de Loreto Fantasmas, aparecidos, espectros, espíritus, sombras, preocupados por una época que se acabó A veces suele venir la Mujer de Blanco, es una de las pocas que quedó con trabajo después de que tumbaran el bosque que antes sabía ser. La última vez contó que laburaba de llorona en la orilla de los pueblos. Espera que se acercaran dos o tres changos, si andan machados mejor. Y se larga a llorar a los alaridos. Con eso suficiente. La Telesita está vieja para venir a las reuniones, se le aparecía a la gente cuando salía de las fiestas, danzaba en medio del polvaderal y después desaparecía en medio de una chacarera antigua. Pero eso era cuando los bailarines volvían en sulky de los carnavales, ahora andan en moto, en auto, en cuanto quiere salir al cruce para hacer sus malabares ya le han pasado a toda velocidad y debe hacerse a un lado por miedo de que la choquen. Además, le duelen los huesos, poco ve y no tiene plata para los anteojos. Y está grande para seguir dán

HISTORIA Ni entorno ni contorno

La esposa del más nombrado de los innombrables Increíbles cuentos con que los abuelos sazonan la imaginación de los nietos Perdida en una nube de recuerdos difusos, quizás se le confunde entre la tarde que dijo “no tengo entorno ni contorno”, y el expatriado aquel, cuyo nombre estaba prohibido pronunciar en su país, y a quien las vueltas de la historia dejarían de nuevo en la Argentina, sólo para ver cómo se le iba de las manos la organización que había soñado perfecta 18 años atrás, pero hace cuarenta años ya era un amontonamiento de ideas desvencijadas.  Flotaba en el aire una pesadilla de entrar a la Casa Rosada, un día de esos, ametralladora en mano, rosa roja en la boca y habanos para festejar, a sentarse en el sillón de Iguiri—Iguiri, como llamaban en la televisión al general Cangallo. Dicen que sonríe cada vez que se acuerda del patán de patillas, oriundo de su misma provincia, que una vez cruzó el mar, desde su país, sólo para llevarle un enorme ramo de flores y tomarse una fot