Caja vidalera “El grupo de los cantores intenta agremiarse en un solo sentimiento de liberación y sólo presenta su propio drama, ajeno al drama de todos…” *Por Orestes Di Lullo La vidala es el único canto coral. Cuando el paria, después de la alegría del alcohol y de la danza, cae en la embocadura de su destino, que es el dolor, apela a la “vidala” para cantar en coro su íntima pena. Hacinamiento derrotado que se apuntala con la fuerza prestada de cada uno, restos carnavalescos conjurados en torno a la fiesta: esto es el coro. ¿Cómo se redime el hombre con la voz del hombre que está a su lado, frente a la inmensa pared de su mismo destino? En vano ensaya sostener su alegría en la vidala; el eco devuelto a la inmensidad del campo es un alarido multánime, una sola queja largamente plañida. Por eso en el canto coral, el santiagueño busca un socorro de humano sentimiento, una ayuda para llorar. Voz profunda de los que siente nivelados por la misma pena, estalla al unísono y ronda en la noc
Cuaderno de notas de Santiago del Estero