Ir al contenido principal

INSTITUCIÓN Sociedad Española de Socorros Mutuos

La Sociedad Española

La más progresista de las sociedades extranjeras fue fundada en 1889 por gente de esa nacionalidad

La Sociedad española es la más progresista y antigua de las sociedades extranjeras. Decimos extranjeras por razones técnicas, pues los españoles no son extranjeros en nuestra patria. Fue fundada el 16 de octubre de 1889 y el acta de fundación redactada en casa del Dr. Luis A, Palmeyro, da cuenta de la primera comisión directiva:
Presidente Norberto Muga, vicepresidente Demetrio Argibay; secretario Luis A. Palmeyro; tesorero Juan Álvarez, vocales titulares Primitivo Feijóo, Antonio Puosa, Leonardo Arzuaga y Benito Rodríguez, suplentes Ramón Pousa y Cipriano González.
Panteón social
El panteón social fue construido en el año 1900, siendo presidente el doctor Agustín J. Sánchez. La obra fue presupuestada en 9.000 pesos y como la sociedad contaba solamente con 4.000 pesos en efectivo, se emitieron acciones de 25 pesos cada una por la suma 6.000, las que fueron suscritas por los asociados.
Edificio social
La construcción del edificio social tuvo en los señores Luis Suárez y Pablo Berdaguer sus más entusiastas propulsores.
En la asamblea del30 de julio de 1916, el presidente don Luis Suárez comunicó a la asamblea la adquisición de un terreno en la plaza Libertad para construir en él el edificio social y en dicha asamblea se emitieron 200 acciones de 100 pesos cada una sin interés para allegar los fondos para la construcción del edificio. Y así fue que en la asamblea ordinaria realizada el 16 de setiembre de 1917, don Luis Suárez se dirigía a los socios en esta forma: “Felizmente todos los obstáculos han sido salvados y hoy por primera vez en la vida institucional de nuestra Sociedad constará en el acta respectiva que esta asamblea se efectuó en su local propio”.

Servicio social
La vida de la Sociedad Española se ha desenvuelto en forma eficaz y sus comisiones directivas se han distinguido por su dedicación y honradez en la atención de los intereses sociales. La Sociedad presta a sus asociados servicios médicos, farmacéuticos, funerarios, panteón y seguro social.

Presidentes
Han presidido la sociedad desde el año 1889 hasta la fecha, Norberto Muga, Luis A. Palmeyro, Félix Gallegos, Primitivo Feijóo.
Nota aparecida bajo el título "Las colectividades comparten fraternalmente el honroso destino de Santiago", en el número del cincuentenario del Liberal, del 3 de noviembre de 1948.
Ramírez de Velasco®

Comentarios

Entradas populares (últimos siete días)

EFEMÉRIDES SANTIAGUEÑAS Del 8 de julio

¿Mengele o Ascher? En 1985, el juez del crimen de La Banda empieza un expediente para dilucidar si un criminal nazi había vivido en esa ciudad El 8 de julio de 1985, el juez del crimen de La Banda Andrés Francisco Miotti inicia una investigación para saber si Gualterio o Walter Ascher era el criminal de guerra nazi José Mengele. Unos días antes, el diario El Liberal había publicado una sensacional historia, casi una confirmación de la leyenda urbana que sostenía que un criminal de guerra nazi, había vivido en La Banda con un nombre supuesto. Walter o Gualterio Ascher había vivido en La Banda entre fines de la década del 40 y principios del 50 y se sospechaba que podría haber sido un nazi prófugo de los tribunales de Núremberg. Para iniciar su investigación, el fotoperiodista Jesús del Carmen Martínez, conocido como “Chito”, amplió una fotografía de Mengele, tomada de un libro sobre la II Guerra Mundial y la mostró a quienes decían haber conocido a Ascher. Les preguntaba si sabían ...

FÁBULA Don León y el señor Corzuela (con vídeo de Jorge Llugdar)

Corzuela (captura de vídeo) Pasaron de ser íntimos amigos a enemigos, sólo porque el más poderoso se enojó en una fiesta: desde entonces uno es almuerzo del otro Aunque usté no crea, amigo, hubo un tiempo en que el león y la corzuela eran amigos. Se visitaban, mandaban a los hijos al mismo colegio, iban al mismo club, las mujeres salían de compras juntas e iban al mismo peluquero. Y sí, era raro, ¿no?, porque ya en ese tiempo se sabía que no había mejor almuerzo para un león que una buena corzuela. Pero, mire lo que son las cosas, en esa época era como que él no se daba cuenta de que ella podía ser comida para él y sus hijos. La corzuela entonces no era un animalito delicado como ahora, no andaba de salto en salto ni era movediza y rápida. Nada que ver: era un animal confianzudo, amistoso, sociable. Se daba con todos, conversaba con los demás padres en las reuniones de la escuela, iba a misa y se sentaba adelante, muy compuesta, con sus hijos y con el señor corzuela. Y nunca se aprovec...

FURIA Marcianos del micrófono y la banca

Comedor del Hotel de Inmigrantes, Buenos Aires, 1910 Creen saber lo que piensa el pueblo sólo porque lo nombran una y otra vez desde su atril, lejos del barro en que vive el resto Desde las olímpicas alturas de un micrófono hablan de “la gente”, como si fueran seres superiores, extraterrestres tal vez, reyes o princesas de sangre azul. Cualquier cosa que les pregunten, salen con que “la gente de aquí”, “la gente de allá”, “la gente esto”, “la gente estotro”. ¿Quiénes se creen para arrogarse la calidad de intérpretes de “la gente”? Periodistas y políticos, unos y otros, al parecer suponen que tienen una condición distinta, un estado tan sumo que, uf, quién osará tocarles el culo con una caña tacuara, si ni siquiera les alcanza. Usted, que está leyendo esto, es “la gente”. Su vecino es “la gente”. La señora de la otra cuadra es “la gente”. Y así podría nombrarse a todos y cada uno de los que forman parte de esa casta inferior a ellos, supuestamente abyecta y vil, hasta dar la vuelta al m...

SANTIAGO Un corazón hecho de cosas simples

El trencito Guara-Guara Repaso de lo que sostiene la vida cuando el ruido del mundo se apaga y solo queda la memoria de lo amado Me gustan las mujeres que hablan poco y miran lejos; las gambetas de Maradona; la nostalgia de los domingos a la tarde; el mercado Armonía los repletos sábados a la mañana; las madrugadas en el campo; la música de Atahualpa; el barrio Jorge Ñúbery; el río si viene crecido; el olor a tierra mojada cuando la lluvia es una esperanza de enero; los caballos criollos; las motos importadas y bien grandes; la poesía de Hamlet Lima Quintana; la dulce y patalca algarroba; la Cumparsita; la fiesta de San Gil; un recuerdo de Urundel y la imposible y redonda levedad de tus besos. También me encantan los besos de mis hijos; el ruido que hacen los autos con el pavimento mojado; el canto del quetuví a la mañana; el mate en bombilla sin azúcar; las cartas en sobre que traía el cartero, hasta que un día nunca más volvieron; pasear en bicicleta por los barrios del sur de la ciu...

CONTEXTO La inteligencia del mal negada por comodidad

Hitler hace el saludo romano Presentar a Hitler como enfermo es una fácil excusa que impide comprender cómo una visión organizada del mundo movió a millones hacia un proyecto criminal De vez en cuando aparecen noticias, cada una más estrafalaria que la anterior, que intentan explicar los horrores cometidos por Adolfo Hitler mediante alguna enfermedad, una supuesta adicción a drogas o un trastorno psicológico o psiquiátrico. Sus autores suelen presentarse como bien intencionados: buscan razones biológicas o mentales para comprender el origen del mal. Sin embargo, esas razones funcionan, en cierta forma, como un mecanismo involuntario o voluntario quizás, de exculpación. Si hubiese actuado bajo el dominio de una enfermedad que alteraba su discernimiento, los crímenes quedarían desplazados hacia la patología y ya no hacia la voluntad que los decidió y la convicción que los sostuvo. En el fondo, ese gesto recuerda otros, cotidianos y comprensibles. Ocurre con algunas madres cuando descubre...