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2014 AGENDA PROVINCIAL Marozzi

Carlos Marozzi

El 6 de octubre del 2014 muere Carlos Marozzi, sacerdote conocido por su trayectoria eclesiástica y su controvertida participación en acontecimientos históricos

El 6 de octubre del 2014 murió Carlos Luis Marozzi en Santiago del Estero. Fue un sacerdote nacido en 1932 o 1933, conocido por su trayectoria eclesiástica y su controvertida participación en acontecimientos históricos.
Durante gran parte de su vida, ejerció su ministerio en diversas parroquias, destacándose por su labor pastoral en la región. En sus últimos años, se desempeñó como párroco de Nuestra Señora de la Consolación, en Sumampa de la avenida Colón.
Fue capellán auxiliar del Batallón de Ingenieros de Combate 141 de Santiago del Estero durante la última dictadura militar, período que marcó su vida al vincularlo a hechos posteriormente cuestionados. A lo largo de su carrera, mantuvo una figura pública que combinaba su compromiso religioso con un estilo de vida que, según algunos relatos, incluía ciertos privilegios materiales, como el uso frecuente de automóviles nuevos.
En los últimos años de su vida, enfrentó acusaciones relacionadas con su presunta participación en delitos de lesa humanidad durante la dictadura, específicamente por tormentos y asociación ilícita. Estas imputaciones surgieron por investigaciones judiciales sobre violaciones a los derechos humanos en Santiago del Estero, aunque no derivaron en una condena definitiva, en parte por su avanzada edad y deterioro físico, lo que le permitió permanecer en arresto domiciliario.
Murió a los 81 años, dejando un legado complejo, definido tanto por su dedicación al sacerdocio como por las controversias que lo acompañaron hasta el final.

Opinión personal
Fue un sacerdote que consagró como tal, su vida a Dios. En su tarea de pastor católico, formó en la fe a hombres y mujeres de todas las edades y condiciones sociales, en las parroquias que debió atender. Todavía hoy, muchos de quienes integraban esos grupos se reúnen y lo recuerdan con respeto y agradecimiento. Ha vivido circunstancias difíciles, como todos, en épocas cuestionables para el país. Y por haber desempeñado su tarea sacerdotal en el Ejército, fue perseguido y difamado. Ha muerto inocente, pues como derecho constitucional esencial así somos todos hasta que una sentencia diga lo contrario.
Los parroquianos de Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa despidieron a su pastor de más de treinta años con profundo dolor y también con esperanza.
Si los hombres públicos de los últimos 40 años de vida institucional de la Argentina levantan una piedra para arrojarle, ha de ser porque fueron los más maravillosos de la historia del país y porque forjaron una patria sin pobres, pujante, poderosa, respetada entre las demás naciones. ¡Ah!, ¿no es así? El camino está lleno de ripio útil a sus designios, a ver, anímense a castigar a alguien, desde el éxito clamoroso de sus gobiernos.
Juan Manuel Aragón
Ramírez de Velasco®

Comentarios

  1. Cristian Ramón Verduc6 de octubre de 2025 a las 8:25

    Comparto tu opinión personal, amigo Juan Manuel.

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  2. Excelente conclusión personal final, tuve el gusto de conocerlo

    ResponderEliminar
  3. “Acabas de cenar, y no importa lo escrupuloso que esté escondido el matadero con la agraciada distancia de las millas, hay complicidad.”

    ResponderEliminar
  4. “Una cosa es el respeto a las ideas ajenas y otra muy diferente la complicidad con criminales.”

    ResponderEliminar
  5. ¿CAPELLAN DE UN REGIMIENTO?
    NO SE PUEDE ESTAR EN EL CAMPANARIO,LA PROCESION LA MISA,Y EL INFIERNO AL MISMO TIEMPO....

    ResponderEliminar

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