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Mostrando las entradas etiquetadas como Telefonitos

HALLER Enfermedad jamás imaginada

Médicos de antes, operando Los médicos de un hospital se desesperaron pues no conocían el origen de los misteriosos vómitos de un paciente La historia ha sido contada otras veces, incluso alguien escribió un cuento y ganó un premio, por lo que, para muchos, lo que sigue no será una novedad. De todas maneras, siguiendo los consejos televisivos de la diva gastronómica Mirtha Legrand, el público se renueva, por lo que preciso narrarla una vez más. Se basa en un hecho real. Sucedió porque uno no aprobó debidamente su escuela primaria o, mejor dicho, pasó de grado si tener los conocimientos mínimos necesarios. El mundo antiguo no conocía los telefonitos de mano, qué va, ni siquiera los soñaba en sus pesadillas más locas, eran impensadamente modernos, de una ciencia ficción que ningún escritor hubiera imaginado ni siquiera de lejos. Ahora cualquiera larga un bolazo: “Estuve en la casa que habitó San Martín cuando estaba en Méjico”, como dijo un encumbrado político de la década del 70 y el 80

ESCLAVITUD El telefonito de Aristóteles

Aristóteles El sabio macedonio sigue teniendo valor en las cosas de todos los días, hasta hoy mismo: la justificación de la esclavitud es asunto vigente Alguna vez se debería escribir un tratado a favor de la antigua esclavitud, institución caritativa que salvaba de la muerte a los pueblos que habían perdido una guerra, a cambio de que trabajaran para los ganadores. Esta relación entre vencedores y vencidos establecía también que el esclavo debía ser fiel a su amo, pero a cambio recibía cama, comida, remedios y a veces hasta un estipendio periódico. Uno de los que hablaron a favor de esta institución del mundo antiguo es, amigos que siguen este folio, el gran Aristóteles, estagirita, sabio de la antigua Grecia nacido en Macedonia, alumno de Platón y maestro de Alejandro Magno. Hoy los pueblos vencidos sufren crueles castigos, aunque no hayan tenido nada que ver con las atrocidades que cometió su gobierno. La gente es obligada a consumir los productos que fabrican los vencedores, le gus

¡LLAME YA! El celular auspicia la llegada del fin del mundo

El móvil como adicción global Las profecías de una Parusía anunciada, podrían cumplirse en cualquier momento George Walker Bush fue un presidente relevante de los Estados Unidos, como todos los ocupantes de la Casa Blanca. En el despacho Oval, donde laburan los que llegan a ese puesto, le guste o no le guste, don, doña, se toman decisiones que repercuten en todo el redondo mundo. Un hombre poderoso, digamos, capaz que el más poderoso también. Durante uno de sus mandatos generó una noticia pequeñita, que quizás pasó desapercibida, la tomaron las agencias de casi todo el mundo y la reprodujeron pocos diarios. En medio de una conferencia de prensa, pidió a los periodistas que apagaran sus celulares, porque sonaban a cada rato y lo distraían. Imagine que usté va a entrevistar al hombre con más poder en el mundo o, pongamos, al que más admira, y que, en medio de la conversación, le diga: “Aguante un cachito, mi mujer me está reenviando un meme que le han mandado las amigas”. Si el president