Géneros reconocibles La sencillez de palabras y comportamientos antiguos frente al reto de ser políticamente correcto Dice el amigo Ramón que el mundo sabía ser más sencillo antes, cuando un hombre era un hombre, una mujer era una mujer y cualquier cosa, cualquier cosa. Sostiene que el universo se dio vuelta (“se davueltó del todamente”) cuando se decretó que no había palabras soeces sino solamente palabras, “porque algunas fueron creadas con la aviesa intención de escandalizar las almas de los humildes de corazón”, opina. Cuando era chico, los padres sabían más que los hijos y los maestros más que los alumnos. O por lo menos no se tenía la errada percepción de no se debe enseñar a los niños sino dejarlos ser, que hagan lo que sientan, porque quién es uno para imponerles la tabla del dos o avisarles que Cancha Rayada fue un tropezón, no una caída. Le preguntan: “¿El mundo era más duro que el actual?” y dice que no es esa la cuestión, sino que no estaba atado a los eufemismos que vinier
Cuaderno de notas de Santiago del Estero