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| Aulas sin celulares |
Solamente se usarán con supervisión educativa para reducir distracciones y favorecer una interacción auténtica
Por Ana Grinstein
de Comunidades Plus
El Ministerio de Educación de Israel anunció una decisión que marca un punto de inflexión en la vida escolar: a partir del 2 de febrero, coincidiendo con Tu Bishvat, se prohibirá el uso de teléfonos móviles a los niños en las escuelas primarias. La medida, impulsada por el ministro Yoav Kish, busca crear un entorno educativo más humano, atento y centrado en el aprendizaje real.
La política establece que solo podrán utilizarse en clases específicamente designadas y bajo supervisión educativa. El propósito es claro: reducir distracciones, favorecer la interacción social auténtica y permitir que la escuela vuelva a ser un espacio de encuentro, no de aislamiento.
Esta decisión llega en un momento en que muchas familias y comunidades observan con preocupación cómo la tecnología —indispensable pero avasallante— invade la vida emocional de los más pequeños. La prohibición no es un castigo, sino una oportunidad. Una invitación a repensar cuánto espacio dejamos para el silencio, la mirada directa, el juego compartido y la construcción de vínculos.
En Israel, donde la educación es motor identitario y social, la medida abre un debate profundo: ¿qué escuela queremos para nuestros hijos? ¿Una atravesada por pantallas, o una que recupere la experiencia humana, el aprendizaje significativo y el desarrollo emocional?
Las consecuencias serán diversas: desde resistencias iniciales hasta un posible alivio colectivo. Pero si la comunidad acompaña, si familias y docentes trabajan juntos, este cambio puede convertirse en una bocanada de aire fresco para las nuevas generaciones.
Un aula sin celulares no es un aula sin tecnología. Es, simplemente, un aula con más espacio para la infancia.
Ramírez de Velasco®

Muy buena medida. En nuestro país, se aplicaba (no sé si sigue) al menos en algunos colegios privados, con muy buenos resultados. Si los veían usando el celular en el ámbito escolar, les quitaban el aparatito y se lo entregaban únicamente a la madre o al padre.
ResponderEliminarEn USA también se está implementando en algunos estados. Quien más ha trabajado e investigado sobre el tema es el psicólogo Jonathan Haidt, autor del libro "La Generación Ansiosa" y "Teléfonos Inteligentes versus Niños Inteligentes".
ResponderEliminarSus trabajos, charlas y entrevistas han sido claves para por fin convencer a políticos y educadores.......y algunos padres, del efecto nocivo de las redes sociales en el desarrollo intelectual de los jóvenes.
Lamentablemente Haidt se ha enfocado en el desarrollo cognitivo juvenil solamente. Habrá que esperar a que alguien haga lo mismo para ver si se puede restablecer la capacidad de pensamiento crítico y razonamento lógico de muchos adultos. Algo más difícil de lograr.