Estatua ecuestre de Manuel Belgrano, en la plaza Libertad de Santiago del Estero |
El 6 de marzo es el día del escultor en la Argentina. La fecha recuerda el nacimiento de Michelangelo Buonarroti, más conocido como Miguel Ángel, en 1475.Es una manera de dar relevancia a quienes se dedican a crear belleza desde cero en tres dimensiones. Se trata de una tarea para la que se requieren grandes dotes de artista y, sobre todo, constancia.La fecha es recordada oficialmente por la Sociedad Argentina de Escultores, artistas requeridos por gobiernos y particulares, cada vez que quieren perpetuar un hecho, una persona, una idea, dejándola plasmada de tal forma que desde cualquier punto de vista se tendrá una idea acabada de que representa.
Miguel Ángel es el autor de la frase: “La perfección no es cosa pequeña, pero está hecha de pequeñas cosas”. Tuvo una vida incansable y, en cierto punto, fascinante.
Trabajó más de setenta años entre Florencia y Roma. En Roma vivían los mecenas que le permitieron hacer su trabajo. Entre ellos, se destacó la familia Médici.
Dejó al mundo pinturas, esculturas y obras de arquitectura extraordinarias. Quizás la más reconocida por el gran público -y su obra maestra- es la bóveda de la Capilla Sixtina en la ciudad del Vaticano.
Los escultores argentinos quisieron, con esta fecha, tomar referencia del máximo artista de esta disciplina en el orden mundial o, por lo menos, el más conocido, el más representativo. Los mármoles que adornan parques, plazas y jardines de la Argentina no son simples adornos, son verdaderos recordatorios de la historia o la voluntad de un gobernante honesto por mostrar las virtudes ciudadanas como una bandera a seguir.
Más evocaciones
Es el día internacional en recuerdo de los oficiales de policía caídos, día mundial de los cereales y día europeo de la Logopedia.
Los católicos recuerdan a los santos Marciano de Tortona, Victorino de Nicomedia, Quirico de Tréveris, Evagrio de Constantinopla, Julián de Toledo, Fridolino de Säckingen, Crodegango de Metz, los mártires de Siria, Olegario de Barcelona, Coleta Boylet y la beata Rosa de Viterbo.
©Juan Manuel Aragón
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