Dique Celestino Gelsi |
Un día como hoy comenzó la construcción de la obra hídrica más emblemática de los tucumanos
El 26 de enero de 1962 comenzó a construirse el dique del Cadillal, en Tucumán. Se trata de la obra hídrica más emblemática de la provincia.Los trabajos comenzaron durante el gobierno de Celestino Gelsi. El proyecto databa de 1889 cuando comenzaron los primeros estudios en el lugar. Luego de un proyecto iniciado en 1943, que quedó trunco, se cambió la ubicación de la presa.Fue inaugurado en 1977, diseñado y construido a partir de un esquema tradicional de gravedad: toma, aforador, conjunto floculador-decantador, filtros rápidos, reserva y salida de acueducto.Ese año se construyeron las primeras siete casas que serían las precursoras del pueblo, para los ingenieros a cargo de la construcción del dique.
Se trata de un embalse, 21 kilómetros aguas arriba de San Miguel de Tucumán y con1.283 hectáreas de superficie.
Se abastece del río Tala originario de Salta, junto a India Muerta, Acequiones, Choromoro, Tapia y Vipos. Su planta potabilizadora recibe el agua de la usina que la turbina para generar energía; es enviada a una pileta de aquietamiento y luego, a través de un canal de descarga que tiene un vertedero con una cañería de 540 metros de longitud, se alimenta el desarenador.
Se construyó con material suelto —un núcleo de arcilla y revestimiento de rocas— de planta curva, con presas laterales. La principal tiene 72 metros de ancho de coronación, con tres presas laterales y 385 metros adicionales.
El Gobierno de Tucumán anunció hace unos días, trabajos para solucionar problemas de funcionamiento del dique que lleva el nombre de Celestino Gelsi, con obras hidráulicas de reparación. El ministro de Desarrollo Productivo, Álvaro Simón Padrós, se refirió a los futuros trabajos que posibilitarán una solución momentánea a las filtraciones en la presa lateral número tres.
El gobierno de Tucumán dice que avanzará con una solución transitoria con financiamiento provincial. Se hará un recubrimiento aguas arriba de la presa con 50.000 metros cúbicos de limo arenoso, que se colará entre las filtraciones para disminuir su diámetro, actuando como un parche.
Al ser una obra prioritaria, dada la emergencia de cuidar el agua, no habrá licitación, se hará mediante una contratación directa.
La Provincia gestiona ante la Nación una obra definitiva, con plazos más largos y confía en la ejecución de los trabajos que implicarán una solución definitiva a través de la inyección de cemento en las grietas.
Pero, mientras continúe la atroz sequía que asola la Argentina, el agua de la canilla de los tucumanos corre serio peligro de secarse.
©Juan Manuel Aragón
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