Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Rudolf Nureyev

1938 ALMANAQUE MUNDIAL Nace Nureyev

Nureyev en lo alto El 17 de marzo de 1938 nació Rudolf Nureyev, bailarín de ballet, artista extravagante y celebridad carismática El 17 de marzo de 1938 nació Rudolf Hametovich Nureyev. Fue un bailarín de ballet nacido en la Unión Soviética, cuyos saltos suspendidos y giros rápidos a menudo se comparaban con los de Vaslav Nijinsky, hazañas legendarias. Fue un artista extravagante y una celebridad carismática que revivió la prominencia de los papeles de ballet masculinos y amplió significativamente la audiencia del baile. De ascendencia tártara, pasó su juventud en Ufa, capital de la República Socialista Soviética Autónoma de Bashkir (ahora república de Bashkortostán, Rusia). Comenzó sus estudios de ballet a los 11 años, dejó la escuela a los 15, para ganarse la vida bailando. A los 17 ingresó a la Escuela de Ballet de Leningrado, donde fue instruido por Aleksandr Pushkin. Fue un estudiante destacado pero rebelde, se negó a unirse al Komsomol (organización juvenil comunista), desobedeci

CRÓNICA Cuando Nureyev conoció a Carlos Saavedra

El santiagueño Saavedra y el soviético Nureyev Una concatenación de sucesos lleva al conocimiento de una noticia sensacional; por qué es la primera vez que se publica Algunas noticias llegan de manera azarosa al periodista, su recorrido es sinuoso y su destino como crónica consolidada quizás no llegue nunca. La que sigue bien podría llevar por título “Informe de un desengaño” o “Confidencia sin destino”. Como mi formación es periodística, preferí (y perdonen la primera persona), contar los hechos tal como sucedieron y dejar a los lectores que la califiquen como quieran. Ahí va. Pauline vive en París y, me contó que, en ciertos círculos de artistas, en una reunión, se comentó que Rudolf Nureyev quedó maravillado por un artista llegado del otro lado del mundo, a quien fue a ver una noche, recomendado por otros bailarines del ballet en que actuaba. Aquel bailarín era Carlos Saavedra. Estoy viendo su cara de estupor, ante la lectura de este texto. Si tiene cinco minutos le cuento todo y de