Pesebre navideño Gente grande, con pelos en partes que a los párvulos no les sale, llaman “chicos” a los amigos, avergonzados de la edad que tienen El mundo moderno abjura de la tradición, resume en ella todo lo malo del pasado, de la historia, lo imaginario, lo que le contaron, lo que creyó a pies juntillas y las conclusiones erróneas que sacó después. Cree que no sirve para nada y, entre otras cosas, la desprecia, sólo por hacerse la caca en lo antiguo, en lo establecido, porque eso es lo que le enseñan las prostitutas que mira en la televisión. Tanto les han martillado la cabeza con que lo viejo es malo, lo viejo es arcaico, lo viejo es pasado de moda, que hay gente grande, con pelos en esas partes en que a los párvulos no les sale, quizás usted también camarada, que pasó largamente de los 20 años, y ha vuelto a nombrar a sus amigos como “los chicos”, ¡ay, chuchi! Como si crecer, llegar a adulto y ser veterano, anciano, longevo, fuera un pecado de lesa existencia. Viejos canosos, co
Cuaderno de notas de Santiago del Estero