Avenida Mate de Luna, Tucumán |
El 29 de septiembre de 1585, Fernando Mate de Luna traslada la ciudad de Tucumán, de Ibatín hasta un lugar conocido como La Toma
El 29 de septiembre de 1585, Fernando Mate de Luna, antes de ser nombre de importante avenida, trasladó la ciudad de Tucumán, de Ibatín hasta un lugar conocido por los españoles como La Toma, porque había una toma de agua potable desde el río, en lo que hoy sería el centro de la ciudad.Diego de Villarroel la había fundado el fundó Tucumán, el 31 de mayo de 1565 en el sitio llamado Campos de Ibatín. Pero hubo de ser llevada a otra parte por los ataques de los indios, la mala calidad de sus aguas que provocaban una enfermedad, el "coto" y el hecho de que el Camino Real se había corrido hacia el este.El nombre completo del fundador era Diego González de Villarroel y Aguirre Meneses y nació en Villafranca del Puente del Arzobispo de Toledo, España, más o menos en 1520 y murió en Santiago del Estero, en 1580. Fue un hidalgo, militar, conquistador y colonizador, nombrado en 1554 como segundo alcalde de primer voto de Santiago del Estero y luego teniente general de la gobernación del Tucumán desde 1565, para fundar la nueva ciudad homónima que sería desde entonces, el centro administrativo de su jurisdicción territorial.Diego de Rojas había sido el primer español que llegó a la provincia, por los Valles Calchaquíes. La región estaba poblada entonces por diaguitas, tonocotés y lules. El segundo fue Juan Núñez de Prado, que fundó en 1550, en la actual provincia de Tucumán, la primera Ciudad del Barco, que luego se trasladó a Salta y posteriormente a lo que ahora es Santiago del Estero.
Ese Mate de Luna, en realidad se llamaba Fernando de Mendoza y Mate de Luna, nació en Cádiz, España, en 1620 y murió Santiago de Chile en 1692. Fue un militar español que antes de venir a estos pagos había sido gobernador y capitán general de la Isla de Margarita hasta 1654 y luego gobernador del Tucumán entre 1681 y 1686. Fundó San Fernando del Valle de Catamarca, el 5 de julio de 1683. Cuando murió era alcalde de Santiago de Chile.
Tucumán fue una de las puntas del eje demográfico, económico y comercial del Río de la Plata, además era ruta obligada hacia el Alto Perú. Cuando los santiagueños quisieron abrir el llamado “Camino del Palomar”, que sería la Ruta 34 al norte, los tucumanos se opusieron, pues sabían que eso perjudicaría su economía. Recién en tiempos del presidente Carlos Saúl Menem, se pavimentó este camino que deja de lado a Tucumán.
Tucumán es quizás la única provincia de la amplia región del norte argentino que, en general, rechaza su perfil provinciano y pretende erigirse como un faro de cultura cosmopolita, renegando de sus raíces, el origen de su gente, su propia geografía y hasta su economía. Pero—felizmente—hay muchos tucumanos que rechazan este perfil impuesto por la ´inteligentzia´ universitaria tucumana y hunden sus cantos, sus trabajos, sus esfuerzos, en lo más profundo de esa tierra.
©Juan Manuel Aragón
Es Salas y Valdez el que hace el traslado, era teniente de gobernador. Mate de Luna era el gobernador y ordena el traslado y se va a Salta. Cuando vuelve la ciudad ya estaba trasladada. Eufemiano.
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