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Mostrando las entradas etiquetadas como Parque Aguirre

SOCIEDAD Eucaliptos y eternidad

Parque Aguirre de día Oiga, con qué necesidad quienes se aman en el parque Aguirre escriben sus nombres en los pobres árboles que les dan cobijo Un muchacho ama a una chica, va al parque Aguirre, pela un cortaplumas, en un eucalipto escribe “Ramón y Mariela”, los enmarca con un corazón y quizás una flecha traspasándolo. Otro muchacho hace lo mismo. Tal vez una chica se anima a esa, digamos, “intervención urbana salvaje sobre naturaleza viva”, por llamarla de alguna manera. Se pregunta uno, que no sabe mucho del asunto, si no será una forma de dar a conocer al universo el amor que alguien profesa por otra persona. Y viceversa. O dejar constancia, quizás, de que en las cercanías y amparada en la cómplice oscuridad, en un momento de desesperado deseo, una pareja dio rienda suelta a sus ansias de desfogarse íntimamente. Los buenos escritores saben que sus textos vivirán después de que se mueran, estarán presentes en conversaciones, discusiones, ponencias, estudios, declaraciones, manuales,

1864 CALENDARIO NACIONAL Antenor Álvarez

Busto de Antenor Álvarez en el parque Aguirre El 2 de mayo de 1864, nace Antenor Álvarez, médico, científico, sanitarista, higienista, político, que fuera senador nacional, gobernador de la provincia y bajo sus premisas se creó el parque Aguirre El 2 de mayo de 1864 nació Antenor Álvarez en Santiago del Estero. Fue un médico, científico, sanitarista, higienista y político. Estudió la primaria y la secundaria en Santiago. Estudió en la facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, egresando en 1890. En 1892 regresó a la provincia, para dirigir el Hospital de Caridad. En 1895 lo designaron Presidente del Consejo de Higiene Pública de la provincia; ejerció la docencia dando clases de higiene profesional en la Escuela de Artes y Oficios y fue delegado a la Conferencia Nacional sobre Paludismo. Fue presidente del Consejo de Educación, participó en las reformas constitucionales de 1903 y 1911, en la segunda fue Presidente de la convención. Fue senador provincial, diputado provincia

PARQUE Del eucalipto al paraíso japonés

Tristes eucaliptos del parque Al otro día de cualquier tormenta, la Municipalidad casi siempre envía cuadrillas de obreros con motosierras, hachas, escaleras Cuando se hace viejo el eucalipto se vuelve peligroso, como lo comprueban los vecinos del parque Aguirre de Santiago, al ver cómo vuelan las ramas y los troncos cada vez que corre un poco de viento. Para qué si llega un vendaval de los que suele haber media docena por año en la ciudad. Son plantas viejas, fueron puestas hace cerca de 120 años para secar una parte de la ciudad que se inundaba y era criadero del mosquito que transmite el chucho, también llamado paludismo. Antes de continuar digamos que el nombre es eucalipto y su plural, eucaliptos. Pero tanto han insistido los supuestos cultos en nombrarlos como eucaliptus en singular y en plural, que la Real Academia se cansó y también acepta la segunda forma, como si este árbol fuera una pastilla de menta. Volvamos al parque, todos envejecieron, algunos se secaron, otros fuer

PREDESTINACIÓN Bienaventuranzas santiagueñas

Entrada al mercado Van algunos de los cientos de miles de motivos de dicha que tienen los nacidos en esta provincia Bienaventurados los santiagueños, porque de ellos es el parque Aguirre, los pajaritos trinando todo el día y el Cristo del sumbutrule. Bienaventurados los santiagueños porque en sus equinas hallan el sabor del chipaco con tropezones de chicharrón, los pastelitos de membrillo y el dulce y arisco moroncito. Bienaventurados los santiagueños porque en el centro suelen toparse con Paulino y el Guarachero, emergentes de una cultura con color propio. Bienaventurados los santiagueños porque son amigos de los bandeños, a quienes quieren y admiran a pesar del empaque de pequeños puebleros que por ahí les sale. Bienaventurados los santiagueños porque llevan en la sangre los últimos estertores del quichua, la imperial lengua de los peruanos. Bienaventurados los santiagueños porque en sus fiestas conviven el quipi, el sánguche de miga, la ensalada rusa, la pizza, la empanada, crisol g

EFEMÉRIDES SANTIAGUEÑAS Del 17 de septiembre

Andrés Figueroa En 1930 falleció Andrés Figueroa, primer intendente de Santiago del Estero El 17 de septiembre de 1930 falleció Andrés Figueroa, político, primer intendente de la Capital, historiador y director del archivo de la provincia. Como intendente desde 1904, fue apoyado por los vecinos por el comienzo del secado de los bañados el Dulce, antecedente de la plantación de eucaliptos en lo que luego sería el parque Aguirre. Santiago se modernizaba y tenía muchos problemas para alcanzar las comodidades de la modernidad. Estuvo al frente de la comuna tres veces consecutivas. Fundó el barrio Centenario y para eso donó terrenos a familias de pocos recursos, así levantaran sus casas. Reacondicionó la plaza liberta y le hizo instalar una fuente enviada por las autoridades nacionales. Alejó del centro, tintorerías, barracas, y curtiembres, saneó las aguas estancadas en tierras bajas, y comenzó a plantar eucaliptos en la ciudad. También expandió el empedrado, y bajo su mandato llegó el agu

EFEMÉRIDES SANTIAGUEÑAS Del 9 de agosto

El sanitarista santiagueño En 1903 comenzaron las obras de saneamiento del parque Aguirre para terminar con el chucho o paludismo El 9 de agosto de 1903 Antenor Álvarez comenzó el saneamiento del parque Aguirre. Era un médico sanitarista e higienista, político que llegó a ser gobernador de la provincia. Nació en Santiago, el 2 de mayo de 1864. Hizo sus estudios primarios y secundarios en esta provincia. En 1892, tras obtener el título de médico en Buenos Aires, regresó a su tierra natal. Tres años más tarde fue designado presidente del Consejo de Higiene. En 1898 resultó elegido senador provincial y cumplió ese mandato popular hasta 1902. Realizó profundos estudios del problema palúdico- sanitario que lo llevaron a elaborar un plan de defensa contra este mal, aprobado por el Congreso Nacional de Paludismo en 1902, bajo cuyas bases se formó el parque Aguirre con la plantación de eucaliptos, el 9 de agosto de 1903, fecha de esta efeméride, a cargo de mil niños de escuelas primarias en t

EFEMÉRIDES SANTIAGUEÑAS Del 1 de marzo

El  parque Aguirre, obra de la intendencia de Figueroa En 1910, Andrés Figueroa, intendente de Santiago, autoriza las corridas de toros El 1 de marzo de 1910, Andrés Figueroa autoriza las corridas de toros en Santiago del Estero. Había comenzado su vida política, como jefe general de la policía, cargo que asumía como suyas las funciones de intendencia de la ciudad. Empezó a secar los bañados del río Dulce, antes de la plantación de los primeros eucaliptos en lo que luego sería el Parque Aguirre. Santiago despertaba del dulce sueño de la colonia y empezaba a ser una ciudad pujante. En 1904 fue intendente de Santiago; dirigió la comuna tres veces en forma consecutiva y, como tal, fundó del barrio Centenario, donó terrenos a familias de pocos recursos para erigir sus casas. Durante su gobierno, la plaza Libertad fue embellecida con una fuente enviada por las autoridades nacionales. Alejó del centro de la ciudad, tintorerías, barracas, y curtiembres, saneó las aguas estancadas en tierras b

EFEMÉRIDES del 12 de enero

Monumento que recuerda el fallido salvamento El 12 de enero de 1932 falleció en el río Dulce, Federico de Gorostiza, mientras intentaba salvar a una niña ahogada El 12 de enero de 1932 fallece Federico de Gorostiza por salvar a una ahogada en el río Dulce. Un monolito en la platabanda de Diego de Rojas y Gumersindo Sayago, del parque Aguirre, recuerda el heroísmo de la jornada. Dos niñas que vivían cerca habían ido hasta ese lugar, para contemplar la crecida del río. En un momento el lugar de la costa en el que estaban paradas, se desbarrancó debido a la fuerte correntada. Las niñas cayeron al agua y fueron arrastradas. Cerca de ahí estaba un joven, Gorostiza, leyendo y tal vez aprovechando el día, como las niñas. Se lanzó Un joven que se encontraba cerca enfrascado en su lectura, de nombre Federico de Gorostiza, se tiró para socorrerlas, agarró a la que estaba más cercana, pero fueron llevados por la fuerza de la corriente y murieron ahogados. La otra chica se llamaba Lía Baremblitt y