Ir al contenido principal

GUISO Arroz amarillo con menudos (achuras) de pollo

Pollo trajeado

Una de las comidas más emblemáticas de la cocina criolla de la actualidad, tiene una preparación simple y compleja a la vez

El menudo de pollo es tan generoso que, si viniera sin el pollo a la vuelta, daría lo mismo. Consta de a), un higadito, b), la panza y c) el cogote. Si se juntan las bolsitas de varios pollos, se tendrá para hacer uno de las comidas más espectaculares del universo occidental y cristiano que es, dos puntos, el guiso arroz amarillo con menudos de pollo.
Ingredientes
Los ingredientes para cuatro personas podrían ser, además de tres o cuatro bolsitas con sus correspondientes achuras, una cebolla, medio pimiento verde o colorado, una zanahoria (o zanagoria, que también está bien dicho), dos tomates, pimentón, una cucharadita de azúcar, puré de tomate en conserva, dos vasos y medio de vino tinto y condimento para arroz, que viene a ser cúrcuma, porque ponerle azafrán está prohibido con el precio que tiene, cada gramo vale su peso en oro, no figurada sino literalmente, no mucho aceite, y sal y pimienta, a gusto. Y arroz, obviamente.
Preparación
Como primera medida deberá picar bien chiquita la cebolla, el pimiento y el tomate y rallar la zanahoria (o zanagoria). Echar a la olla, las verduras, las achuritas, el puré de tomate, la cucharadita de azúcar, el caldito y salpimentar a gusto, junto con un chorro de aceite de girasol, encender la hornalla, tapar bien y esperar que se empiece a freír todo junto, en su propio jugo. Por las dudas, tenga preparada agua caliente para agregar a esta preparación, si se estuviera o estuviese secando.

Espera
Endemientras, sírvase un vaso de vino tinto y agarre un buen libro, alguno de los tantos cuentos de Horacio Quiroga tiene muy buen maridaje con la espera, Jorge Wáshington Ábalos también, pero si no, cualquiera de los que guarda en su biblioteca le va muy bien. Si es de los que no tiene biblioteca o no le gusta leer, en dos Rosarios bien rezados estará lista la preparación. Pero, si no le agrada leer y tampoco reza porque no cree en Dios, abandone inmediatamente la lectura de esta receta, no es para usted. Si tiene una olla algo mañera, de esas que queman los guisos o con una tapa que no la cubre muy bien, deberá estar atento porque es posible que se le seque la preparación, antes que eso ocurra ya sabe qué hacer.

Preparación (segunda parte)
Con 45 minutos de hirvición o quizás un poco más, si agregó las letanías a los Rosarios, deberá poner en la preparación dos puñados o algo más de arroz por comensal, más la cúrcuma. Y vaya agregando agua a medida que se vaya secando (el agua que irá echando depende de la calidad del arroz, si es de los que jamás se pasan es una cantidad y si es de los masomenitos, como el arroz partido y otros baratos que venden en el almacén, tendrá que ser menos). Ahí se verá su muñeca, don, doña, para ir regulando el recurso hídrico a medida que el arroz va estando.

Terminación
Una vez que decide que ya está, agregue medio vaso de vino, espere que airee los éteres y ésteres del alcohol y tape la olla. Si se tomó todo el vino, ya está, no importa, no se haga problema, tampoco era fundamental. Aguarde cinco minutos y sirva la mesa. Si a último momento se agrega alguien más al almuerzo, es posible que le alcance, sirviendo porciones más chicas. Usted vea.

Corolario
Y eso es todo lo que hay para decir de este famoso, querido y nunca bien ponderado guiso. Más adelante es posible que se entregue otra receta. Pero también es posible que no.
Juan Manuel Aragón
A 1 de noviembre del 2024, en el barrio Las Catalinas. Esperando el Día de la Virgen.
Ramírez de Velasco®

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

HISTORIA La Casa de los Taboada

La Casa de los Taboada, recordada en El Liberal del cincuentenario Por qué pasó de manos de una familia de Santiago al gobierno de la provincia y los avatares que sucedieron en la vieja propiedad Los viejos santiagueños recuerdan que a principios de 1974 se inundó Santiago. El gobernador Carlos Arturo Juárez bautizó aquellas tormentas como “Meteoro”, nombre con el que todavía hoy algunos las recuerdan. Entre los destrozos que causó el agua, volteó una pared del inmueble de la calle Buenos Aires, que ya se conocía como “Casa de los Taboada”. Y una mujer que había trabajado toda la vida de señora culta, corrió a avisarle a Juárez que se estaba viniendo abajo el solar histórico que fuera de la familia más famosa en la provincia durante el siglo XIX. No era nada que no pudiera arreglarse, aunque ya era una casa vieja. Venía del tiempo de los Taboada, sí, pero había tenido algunas modernizaciones que la hacían habitable. Pero Juárez ordenó a la Cámara de Diputados que dictara una ley exprop

SEXO Los pronombres en Tribunales

Tribunales de Santiago Hallan a dos hombres teniendo relaciones carnales en un baño y al no consignar sus nombres, el resto de los trabajadores también son sospechosos En tercer grado de antes enseñaban los pronombres personales, repasen niños: yo, tú, el, nosotros, vosotros, ellos. El periodismo tiene esas cosas, ¿no?, muchas veces dice el pecado, pero no el pecador. El drama es cuando se termina comprometiendo a cientos o quizás miles de personas, sólo por no dar el nombre de dos. O, digámoslo también, sólo por publicar una noticia que no le importa a nadie, que sirve solamente para alimentar la morbosidad de los lectores. Ahí está el título de uno de los diarios de ayer, de Santiago del Estero: “Hallan a dos empleados judiciales teniendo sexo en un baño de Tribunales”. ¿Usted tiene un amigo que trabaja ahí?, bien puede haber sido uno de los encontrados en pleno comercio carnal, en un baño del honorable palacio desde el cual se imparte Justicia. Usted dirá que su amigo no es, porque

1945 AGENDA PROVINCIAL Hebe Luz

Hebe Luz Ávila El 15 de noviembre de 1945 nace Hebe Luz Ávila, destacada docente, doctora en letras, investigadora y escritora El 15 de noviembre de 1945 nació Hebe Luz Ávila, en Santiago del Estero. Es una destacada docente, doctora en letras, investigadora y escritora. Hija de Elvio Aroldo Ávila, perseguido militante peronista y autor del compendio “Cómo habla el santiagueño”, y de Hebe Luz Regazzoni, su vida ha estado marcada por su dedicación a la enseñanza, la investigación lingüística y la defensa de la identidad cultural de su provincia. Se formó como profesora Nacional de Castellano, Literatura y Latín, obtuvo su licenciatura en Letras en la Universidad Nacional de Santiago del Estero y compuso su doctorado en Letras, con orientación en Lingüística, en la Universidad Nacional de Tucumán. A lo largo de su carrera, ejerció la docencia en diversos niveles, incluyendo el medio, terciario y universitario, y llegó a ser directora de Nivel Terciario, desempeñando un papel clave en la