Estatua del misionero Cómo fue que el santo llegó a Santiago del Estero Por Contardo Miglioranza* El padre Francisco Solano se puso en marcha hacia Santiago del Estero. Pero, antes, le preguntó a nuestro conocido testigo, Pedro de Vildósola , a la sazón un joven de menos de 20 años, pero ya con ganas de trotamundos, si quería acompañarlo. El joven aceptó la invitación y, pensando en su formidable apetito, se preocupó de las provisiones. Pero el Padre desatendió sus afanes, diciendo que “no era necesario y que Dios proveería”. Después de dos o tres buenas jornadas de camino y de 16 leguas de recorrido, llegaron al río Hondo -a poca distancia de la actual “Termas de Río Hondo” - que iba muy caudaloso, y no pudieron pasar. “El acompañante se afligió mucho, tanto por no traer provisiones como porque el paraje estaba infestado por una insoportable plaga de mosquitos , tanto que, para que las cabalgaduras no se escaparan, hubo que manearlas”. Por el oro lado del río había unas cuarenta carre
Cuaderno de notas de Santiago del Estero