El vídeo censurado
El Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo prohibió que se vea felices a chicos con Síndrome de Down ¿Toda persona tiene derecho a ser feliz?, sí, por supuesto. Todos tienen derecho a estudiar, a caminar por donde quiera, a saltar, a jugar, a trabajar, a amar como se le dé la gana, a gritar de alegría y a callarse, a estar triste, a viajar, a comer todos los días. Es una obviedad, pero primero debe nacer. El derecho a la vida está antes que todo, primero en la lista. Algo anda mal si se lo niegan.Vean si no, lo que acaba de suceder en el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo, máximo órgano de justicia de Europa, cuando le presentaron un recurso, luego de la censura, en Francia, de un vídeo que mostraba la felicidad de gente con síndrome de Down.En el 2014, para recordar el Día Internacional del Síndrome de Down, el vídeo titulado “Querida futura mamá” mostraba la felicidad de esa gente, pero fue censurado por el Consejo Superior Audiovisual y en consecuencia no fue pasado en la televisión de Francia.El video tenía un claro objetivo, mostrar a las madres a quienes les habían avisado que sus chicos podrían tener Síndrome de Down, que sus hijos igualmente serían felices y podrían desarrollar muchas actividades en la vida. El vídeo dice: “Querida futura mamá, no te asustes, tu niño podrá hacer muchas cosas. Podrá abrazarte, podrá correr hacia ti, podrá hablar y decirte todo lo que te quiere, podrá ir al colegio, podrá aprender a escribir. Tu niño podrá ser feliz como lo soy yo”. Maravilloso, ¿no le parece?
Bueno, al parecer no lo entendieron de la misma manera en Francia y en Estrasburgo. Dijeron que “no puede no ser considerado como un mensaje de interés general, ya que, al dirigirse a una futura mamá, su propósito puede parecer ambiguo y no suscitar un apoyo espontáneo y consensuado” y muestra que era “inapropiado” porque esa felicidad “probablemente perturbaría la conciencia de las mujeres que habían tomado diferentes opciones legítimas de su vida personal”.
Para poner negro sobre blanco, lo que dijo el tribunal europeo es que las mujeres que, ante la opción de ser madres de un chico con Síndrome de Down, lo habían matado o estaban por hacerlo, podrían sentirse perturbadas al mirar el vídeo.
Es decir, para la más moderna concepción filosófica europea, el derecho a la vida existiría siempre que se sepa, desde el vientre materno, que los chicos no vendrán con un trastorno genético, porque en ese caso existe el derecho ´legítimo´a matarlos. Suena a película de los nazis, con las teorías de la superioridad de la raza aria y todas esas cosas que parecen salidas de la imaginación de Hollywood, ¿no?
Es a lo que nos ha llevado la más actual concepción de los derechos humanos. Dicen: “Si no vas a ser perfecto, nadie debe perturbar el derecho de tu madre a matarte antes de que nazcas”.
Ni en su mejor sueño asesino y despiadado, Adolfo Hitler se podría haber imaginado algo así.
¿Derechos humanos, dice? Hipocresía en polvo, para diluir.
©Juan Manuel Aragón
©Juan Manuel Aragón
Muy de acuerdo, Juan. En el mismo sentido me expresé en 2010. Cuando aún se debatía la legislación abortista. Como se puede constatar en esta nota que publiqué: http://tinkunaku.blogspot.com/2010/05/por-julio-carreras-la-vida-es-el-primer.html
ResponderEliminarExcelente Juan Manuel y totalmente de acuerdo. El primer derecho, es el derecho a la vida. Abrazo
ResponderEliminarExcelente artículo y muy acertado juicio, Juan Manuel.
ResponderEliminarExcelente, Juan! Coincido. El derecho a la vida es el primero de todos! 👏👏👏
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