Como su figura lo indica: coyuyo “El día que eligen los que salen de picnic los fines de semana, si es soleado es también una bendición de Dios” La lluvia es una pelea entre los gigantes de que habitan el cielo; se cascotean con hielo, se enojan, se insultan a los gritos y echan llamaradas para castigarse mutuamente. Cuando luchan hacia el sur son bravos, si la agarrada es en para el lado del norte, peor. Se tiran con todo y desatan un viento que arrasa la vida. El vendaval es una víbora que pasa apurada por entre los barrios de los pueblos tumbando árboles, tirando abajo techos, levantando tinglados, retorciendo fierros, agitando papeles en un remolino de furia. Al temporal lo pintan fiero, pero es la sumisa garúa de varios días: los gigantes discuten amables sobre asuntos quizás sin importancia, las banalidades de la vida quizás. Suele llegar de marzo a mayo, manso, sereno, se instala un día, sigue al siguiente y al otro y al otro, hasta que una noche cualquiera se manda a mudar deja
Cuaderno de notas de Santiago del Estero