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1897 CALENDARIO NACIONAL Mate Cosido

Prontuario del bandido

El 3 de marzo de 1897 nació el ladrón y bandolero Segundo David Peralta, en Tucumán: personaje famoso del norte


El 3 de marzo de 1897nació Segundo David Peralta, en Monteros, Tucumán. Más conocido como Mate Cosido, fue un bandolero y por eso para algunos fue un delincuente y para otros un benefactor o rebelde. Era un personaje famoso, parte del folklore del norte.
Llegó al Chaco cerca de 1926. Había llegado de Asunción y de Corrientes. Entre 1916 y 1924 figuraba en prontuarios policiales de Tucumán, Córdoba y Santiago del Estero, ya como "Mate Cosido”.
Hay quienes confunden su apodo con del mate cocido, infusión que se hace con yerba mate. Su apodo era "Mate Cosido", por una cicatriz que tenía en la cabeza, el marote, la huma o el mate en la jerga popular del norte.
Dicen que era un hombre culto, que se comportaba con humildad y educación, pagando generosamente hasta los más mínimos servicios recibidos, con lo que ganó popularidad entre la gente humilde. Organizaba sus robos con sumo cuidado. Las empresas que robaba (Bunge y Born, Dreyfus, La Forestal) daban dinero a las policías de las provincias para su captura.
La leyenda sostenía que robaba a las empresas ricas —casi todas extranjeras—para ayudar a los pobres. La leyenda sostenía que las atrocidades que cometía en sus atracos habían sido difundidas por las empresas que "robaban al pueblo chaqueño", decían.
Se llamaba a sí mismo bandido de los pobres, y escribía artículos en revistas en las que confesaba los motivos de sus depredaciones, afirmando jamás robaba a los pobres para dárselo a los ricos. De esa manera se cotizó entre grupos anarquistas.
En su carrera del bajo mundo a menudo usó documentos falsos que se conseguían fácilmente en Buenos Aires, con nombres como Julio del Prado, Manuel Bertolatti, José Amaya o Julio Blanco.
También se comentaba que evitaba la violencia cuando podía y nunca tenía enfrentamientos armados con la policía. No lo hacía por miedo, sino como una manera de proceder.
Con el anarquista y bandido pampeano Juan Bautista Bairoletto planearon asaltar una fábrica de tanino, pero Mate Cosido desistió por no estar de acuerdo con lo que suponía que sucedería: Bairoletto hizo el robo, dejando un empleado muerto en un tiroteo con la policía.
La gente de Presidencia Roque Sáenz Peña, de Gancedo, y de gran parte de los pueblos grandes, admiraron, como testigos, las acciones de Mate Cosido. Siempre vestía como peón rural o como viajante, para no levantar sospechas.
Su fama llegó a Buenos Aires. El 22 de diciembre de 1939, Mate Cosido y su banda secuestraron al estanciero Jacinto Berzón. Pidieron rescate por 50.000 pesos moneda nacional con precisas recomendaciones: el dinero sería arrojado, el 7 de enero de 1940, desde el tren en movimiento, antes de la estación de Ferrocarril de Villa Berthet, Chaco. Pero intervino la policía, hubo un tiroteo en el lugar pactado, y Mate Cosido fue herido en la cadera.
Luego de este tiroteo no se volvió a saber de él. Si murió no se hallaron sus restos.
Su leyenda siguió alimentando fogones durante largos años, a la par que su figura se elevaba entre el paisanaje de las provincias del norte. Varios aseguraron haberlo visto o tener un conocido que lo había frecuentado. Con el tiempo los cuentos fueron aminorando, su recuerdo fue cada vez más lejano y difuso y al final entre la televisión y la radio lo sepultaron para siempre.
©Juan Manuel Aragón

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