Ir al contenido principal

ALGODÓN Probablemente nublado

Barquito de papel de diarios

Qué anuncia el pronóstico del tiempo y qué se debe esperar que digan los del Servicio Meteorológico


Dice el pronóstico que hoy estará mayormente nublado, sin probabilidad de lluvias. Los vientos volarán a una velocidad que irá entre 7 y 22 kilómetros por hora, llegando del noreste, como casi todos los días de la vida. Y uno se queda pensando en ese idioma un tanto vago, impreciso, para anunciar —algoritmo mediante —algo tan simple como: “No sabemos si estará nublado o no, pero muy probablemente sí, como casi siempre, porque algún copo de algodón pasará por el cielo”.
Tampoco se jugarán para decir: “No espere lluvia, guarde ese paraguas, deje las galochas para otro día”. Y no se ilusione con que avisen que a la mañana hará calorcito “ma non troppo”, con un leve “in crescendo” hacia la tarde o noche, luego volviendo a un “andantino mosso” a la hora en que empiezan a tallar los grillos. La exactitud no es el fuerte de los amigos que dan el pronóstico del tiempo.
Por eso nada de extensos informes que no caben en las dos líneas que les piden a los muchachos del Servicio Meteorológico para completar los diarios. Hablando de todo un poco, es raro que no escriban “nubes”, que es fácil, comprensible y cortito, sino “nubosidad”, diferencia que ellos entenderán pero que, al resto del mundo, incluido usted, su vecino, al quiosquero de la otra cuadra o a mí, nos da exactamente lo mismo.
Algunas veces vaticinan lluvias aisladas. Y uno se pregunta qué será eso ¿que llueva aquí y no en Loreto? Y sí, papito, por ley todas son aisladas, en alguna parte se tienen que cortar: en realidad lo improbable es que llueva en todo el mundo al mismo tiempo, aquí y en el desierto del Kalahari y Beirut, en Pekín, en Vaca Huañuna. A menos que la segunda venida de Cristo sea en forma de Diluvio y haya un Noé pidiendo que de nuevo nos trepemos a su arca para zafar de las olas y el viento, sucundum, sucundum. Pero no lo anunciarían de esta manera, le darían una cobertura distinta, como más importante. Porque no todos los veranos llega la Parusía, che, mandá la noticia en página impar, arriba, con foto y le reservamos una ventana en la portada.
A veces pienso en estas cosas y me gustaría que me anuncies, amor de mi corazón, algo así como: “Probabilidad de sonrisas, que irán en aumento hacia la tarde o a la oración y mucho calor, pero mucho, mucho, mucho, esta noche, a la hora del silencio acompasado de los críos”. Entonces me prepararía.
En los diarios no quiero leer “inestable con precipitaciones”, que vaya uno a saber qué es. Aguaito un anuncio que diga: “A la hora de la lluvia, los truenos, los refucilos, vamos a sentarnos frente a la puerta de casa para ver cómo el agua va formando charquitos en el patio y luego pequeños arroyos que pasan entre el pasto y llegan a la calle, alimentando el río crecido que viene desde la otra cuadra”. Botaremos un barquito de papel con la esperanza de que salga de casa, navegue por la calle, se pierda en la otra esquina y de aquí a un tiempo llegue hasta la Mar Chiquita, previa navegación por el Dulce, con sus curvas y contracurvas, entre bagres, dorados y sapos cancioneros.

Leer más: “El Universo ha entrado desde un período de desaceleración de su expansión a uno de aceleración” o “qué hacer si nos pega un meteorito”

Este año, al revés de otros, Dios regaló a los santiagueños una primavera maravillosa, fresquita, sin ese viento norte, seco, rasposo y con tierra que suele azotar las siestas de desamparo provinciano, con las pupilas dilatadas de tanto caminar por sus polvorientos caminos. Hubo, como siempre dos o tres jornadas de calor de 40 grados, sacando la sensación térmica, que es engaña pichanga para el escandaloso uso de los diarios, que intentan hacer amarillismo hasta con el informe de la temperatura, esos maulas.
Está terminando el año, ayer empezó el verano, los días comienzan a ser más cortos. Y la sandía sigue sin bajar de precio. Bienhaiga los agricultores.
©Juan Manuel Aragón
A 22 de diciembre del 2023, en Toro Negro. Jugando a la pandorga

Comentarios

  1. Hay un 50% de probabilidades de lluvia (Este pronóstico no falla).

    ResponderEliminar
  2. Ay, me encanta la cultura musical del escritor. "Ma non troppo", "in crescendo", etc. Ñaaa

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares (últimos siete días)

EFEMÉRIDES SANTIAGUEÑAS Del 8 de julio

¿Mengele o Ascher? En 1985, el juez del crimen de La Banda empieza un expediente para dilucidar si un criminal nazi había vivido en esa ciudad El 8 de julio de 1985, el juez del crimen de La Banda Andrés Francisco Miotti inicia una investigación para saber si Gualterio o Walter Ascher era el criminal de guerra nazi José Mengele. Unos días antes, el diario El Liberal había publicado una sensacional historia, casi una confirmación de la leyenda urbana que sostenía que un criminal de guerra nazi, había vivido en La Banda con un nombre supuesto. Walter o Gualterio Ascher había vivido en La Banda entre fines de la década del 40 y principios del 50 y se sospechaba que podría haber sido un nazi prófugo de los tribunales de Núremberg. Para iniciar su investigación, el fotoperiodista Jesús del Carmen Martínez, conocido como “Chito”, amplió una fotografía de Mengele, tomada de un libro sobre la II Guerra Mundial y la mostró a quienes decían haber conocido a Ascher. Les preguntaba si sabían ...

TRENES Voces de madrugada

Johny Barrionuevo canta en el Urquiza Un cantor santiagueño recorre el Roca llevando canciones del alma, recuerdos del pago y la memoria de los amigos que quedaron atrás Todos los días salgo de mi casa, Pellegrini 1458, Burzaco, bien de madrugada. Trabajo en el tren Roca, pero no soy ferroviario. Soy el que ameniza el viaje de los pasajeros, cantando canciones que quizás les quedaron prendidas en el alma como abrojo en la tira de las zapatillas, y les recuerdo su infancia, su juventud, allá lejos, algún bosque norteño, con los parientes que se quedaron para siempre jóvenes en sus pensamientos. También voy a fiestas; me llaman para amenizar asados, celebraciones, esas cosas. Fue mucho mi penar andando lejos del pago Tanto correr pa' llegar a ningún lado Y estaba donde nací lo que buscaba por ahí. Me despierto a las cinco de la mañana y a las seis y media ya estoy en el tren, siempre cantando lo mismo. "La del Puente Carretero" y "Añoranzas" no pueden faltar; cuan...

ÉPOCA Viejos son los viejos

Un viejo Uno tiene solamente la edad que marca el almanaque: porque la juventud no es una cuestión de voluntad sino del reloj ¿De qué tiempo sos?, me preguntan a veces mis hijos. No sé, no tengo idea, respondo; de este, creo, y seguirá siendo mi tiempo hasta que me muera. Bueno, de qué tiempo vienes, aclaran, porque ahora son todos de la “generación X”, la “generación Y” o la “generación Z”. No, les digo. Vengo de una época en que a veces los hombres tomaban hasta emborracharse deltodamente y caer desmayados, pero una dama, una señorita, una mujer, a lo sumo sorbía una copita y se alegraba un poco, nada más. No como ahora, que los domingos a la mañana andan tiradas por las calles, y el lunes no sabrán qué hicieron, con quién o con cuántos ni dónde ni —peor todavía— cómo. En esos tiempos una mujer era más bella cuando más mujer era, no cuando se parecía a los hombres; a esas les decíamos “marimachos”, así, redondamente. Vengo del tiempo en que la gente se miraba cara a cara para hablar,...

BICHOS Me presento, soy la juanita

Hedionda juanita Breve historia de un molesto bicho que todos los veranos vuelve a los pueblos con su historia a cuestas Yo soy la juanita, así nomás, con minúsculas, porque soy nombre genérico, como león, torcaza, omeprazol. Nada de delicadezas ortográficas para mí. Las únicas que llevan mayúscula son Juanita Simón, Juanita Viale, Juanita Tinelli, Juanita Repetto, sor Juana Inés de la Cruz. A nosotras nadie nos invita a una foto ni a una alfombra roja; con suerte ligamos un chancletazo bien aplicado. En las tradiciones argentinas, al menos, no figuramos como protagonistas de ninguna leyenda, cuento, mito, fábula, novela o quimera. Ni siquiera se dignaron a inventarnos una superstición digna, de esas que asustan changuitos. Y eso que nuestra pestilente presencia, si algo tiene, es potencial narrativo. Sin embargo, apenas ocupamos un rincón mínimo del acervo pop-folklórico del país. En la Sociedad Argentina de Autores y Compositores hay contadas canciones que llevan mi nombre —con o sin...

1999 CALENDARIO NACIONAL Menem

Rubén Ale, "La Chancha" El 3 de diciembre de 1999, Carlos Saúl Menem visita Tucumán por última vez, como presidente de la Nación, lo custodian los Ale El 3 de diciembre de 1999, Carlos Saúl Menem realizó su última visita oficial a Tucumán como presidente de la Nación. Asistió a actos institucionales y partidarios en medio de un fuerte operativo de seguridad, en el que participó activamente el clan Ale, grupo con influencia en la provincia. El desplazamiento se produjo pocos días antes de dejar la Casa Rosada tras dos mandatos consecutivos. La presencia de figuras vinculadas al entorno criminal local quedó registrada en informes judiciales y periodísticos de la época. La visita tuvo como eje principal la inauguración de obras públicas y la participación en un acto político del Partido Justicialista. Menem llegó al aeropuerto Benjamín Matienzo en horas de la mañana y fue recibido por el gobernador Julio Miranda, junto a funcionarios provinciales y dirigentes partidarios. El via...