Ir al contenido principal

1982 ALMANAQUE MUNDIAL Belador

Indultado

El 19 de julio de 1982 el toro Belador, de la ganadería de Victorino Martín Andrés, fue indultado por el diestro José Ortega Cano

El 19 de julio de 1982 el toro Belador, perteneciente a la prestigiosa ganadería de don Victorino Martín Andrés, fue indultado por el diestro José Ortega Cano. Fue un hecho sin precedentes en la Plaza de Toros de Las Ventas, en Madrid. Y fue la primera y, hasta hoy, única vez que se concedió un indulto en la plaza más importante del mundo taurino, donde la exigencia del público y el reglamento hacen de esta gracia un acontecimiento extraordinario.
El toro, marcado con el número 37 y nacido en 1978, pertenecía a una camada que ya era seguida con atención por los aficionados. Procedía de una de las ganaderías más exigentes del campo bravo, conocida por la casta, el peligro y la bravura de sus ejemplares. El cartel de la corrida lo encabezaban los toreros José Ortega Cano, José Luis Palomar y Antonio Chenel “Antoñete”, en el marco de una corrida extraordinaria de verano.
Belador fue lidiado como sexto de la tarde, en un momento en que la faena parecía cerrada. Desde su salida, mostró una embestida noble, pero con carácter, acudiendo con fuerza y repitiendo en cada cite. En el tercio de varas se empleó con bravura y sin rajarse, recibiendo los dos puyazos reglamentarios. En banderillas se mantuvo encastado y fijo, cumpliendo en cada tercio con las condiciones que definen a un toro de indulto.
Durante la faena de muleta, Ortega Cano logró una conexión inmediata con el animal y el público. Construyó una labor templada, de series largas y por ambos pitones, donde la emoción fue creciendo a medida que el toro respondía con codicia y clase. La faena fue alargando su duración y la plaza, llena en sus tendidos, comenzó a agitar pañuelos blancos en señal de solicitud de indulto.
El presidente de la corrida, luego de una evaluación atenta del comportamiento del toro y de la presión del público, accedió a conceder el indulto. El anuncio fue recibido con una ovación unánime. El torero, en lugar de ejecutar la estocada, simuló la suerte final y condujo al animal de regreso a los corrales entre aplausos y vítores. Belador fue devuelto al campo bravo, donde vivió como semental durante varios años, dejando descendencia.
El ganadero Victorino Martín Andrés presenció el acontecimiento desde una barrera. El indulto fue considerado por muchos como un reconocimiento a su labor de décadas en defensa del toro encastado y bravo. La ganadería de Victorino, fundada en 1919 y adquirida por Martín Andrés en 1960, ya contaba con numerosos reconocimientos, pero Belador marcó un antes y un después en su historia.
José Ortega Cano, nacido en Cartagena en 1953, se consolidó a partir de esa tarde como uno de los toreros de referencia en la década de los ochenta. Su temple, su valor y su capacidad de conectar con el público fueron determinantes para lograr una de las faenas más recordadas en la historia reciente de Las Ventas. Aquel indulto fue también un hito en su carrera.
La plaza de Las Ventas, inaugurada en 1931, es considerada por toreros, ganaderos y aficionados como la más exigente del mundo. En ella, el indulto es una rareza absoluta. Desde su apertura, han sido cientos los toros lidiados, pero solo Belador ha recibido el perdón por su bravura ejemplar, según consta en los archivos oficiales de la Comunidad de Madrid.
El reglamento taurino permite el indulto en casos extraordinarios, cuando el toro exhibe una bravura excepcional, acometividad sostenida en todos los tercios y posibilidades genéticas valiosas para la reproducción. El indulto de Belador cumplió con cada una de esas condiciones, tal como quedó registrado en la crónica oficial de la corrida.
A más de cuatro décadas de aquella tarde, el nombre de Belador permanece como símbolo de la bravura reconocida en la plaza más emblemática del toreo. Su indulto representa una rareza estadística y un punto de referencia para ganaderos y toreros que buscan alcanzar la excelencia en una disciplina marcada por la tradición, el arte y la exigencia del público.
Juan Manuel Aragón
Ramírez de Velasco®

Comentarios

Entradas populares (últimos siete días)

EFEMÉRIDES SANTIAGUEÑAS Del 8 de julio

¿Mengele o Ascher? En 1985, el juez del crimen de La Banda empieza un expediente para dilucidar si un criminal nazi había vivido en esa ciudad El 8 de julio de 1985, el juez del crimen de La Banda Andrés Francisco Miotti inicia una investigación para saber si Gualterio o Walter Ascher era el criminal de guerra nazi José Mengele. Unos días antes, el diario El Liberal había publicado una sensacional historia, casi una confirmación de la leyenda urbana que sostenía que un criminal de guerra nazi, había vivido en La Banda con un nombre supuesto. Walter o Gualterio Ascher había vivido en La Banda entre fines de la década del 40 y principios del 50 y se sospechaba que podría haber sido un nazi prófugo de los tribunales de Núremberg. Para iniciar su investigación, el fotoperiodista Jesús del Carmen Martínez, conocido como “Chito”, amplió una fotografía de Mengele, tomada de un libro sobre la II Guerra Mundial y la mostró a quienes decían haber conocido a Ascher. Les preguntaba si sabían ...

TRENES Voces de madrugada

Johny Barrionuevo canta en el Urquiza Un cantor santiagueño recorre el Roca llevando canciones del alma, recuerdos del pago y la memoria de los amigos que quedaron atrás Todos los días salgo de mi casa, Pellegrini 1458, Burzaco, bien de madrugada. Trabajo en el tren Roca, pero no soy ferroviario. Soy el que ameniza el viaje de los pasajeros, cantando canciones que quizás les quedaron prendidas en el alma como abrojo en la tira de las zapatillas, y les recuerdo su infancia, su juventud, allá lejos, algún bosque norteño, con los parientes que se quedaron para siempre jóvenes en sus pensamientos. También voy a fiestas; me llaman para amenizar asados, celebraciones, esas cosas. Fue mucho mi penar andando lejos del pago Tanto correr pa' llegar a ningún lado Y estaba donde nací lo que buscaba por ahí. Me despierto a las cinco de la mañana y a las seis y media ya estoy en el tren, siempre cantando lo mismo. "La del Puente Carretero" y "Añoranzas" no pueden faltar; cuan...

ÉPOCA Viejos son los viejos

Un viejo Uno tiene solamente la edad que marca el almanaque: porque la juventud no es una cuestión de voluntad sino del reloj ¿De qué tiempo sos?, me preguntan a veces mis hijos. No sé, no tengo idea, respondo; de este, creo, y seguirá siendo mi tiempo hasta que me muera. Bueno, de qué tiempo vienes, aclaran, porque ahora son todos de la “generación X”, la “generación Y” o la “generación Z”. No, les digo. Vengo de una época en que a veces los hombres tomaban hasta emborracharse deltodamente y caer desmayados, pero una dama, una señorita, una mujer, a lo sumo sorbía una copita y se alegraba un poco, nada más. No como ahora, que los domingos a la mañana andan tiradas por las calles, y el lunes no sabrán qué hicieron, con quién o con cuántos ni dónde ni —peor todavía— cómo. En esos tiempos una mujer era más bella cuando más mujer era, no cuando se parecía a los hombres; a esas les decíamos “marimachos”, así, redondamente. Vengo del tiempo en que la gente se miraba cara a cara para hablar,...

BICHOS Me presento, soy la juanita

Hedionda juanita Breve historia de un molesto bicho que todos los veranos vuelve a los pueblos con su historia a cuestas Yo soy la juanita, así nomás, con minúsculas, porque soy nombre genérico, como león, torcaza, omeprazol. Nada de delicadezas ortográficas para mí. Las únicas que llevan mayúscula son Juanita Simón, Juanita Viale, Juanita Tinelli, Juanita Repetto, sor Juana Inés de la Cruz. A nosotras nadie nos invita a una foto ni a una alfombra roja; con suerte ligamos un chancletazo bien aplicado. En las tradiciones argentinas, al menos, no figuramos como protagonistas de ninguna leyenda, cuento, mito, fábula, novela o quimera. Ni siquiera se dignaron a inventarnos una superstición digna, de esas que asustan changuitos. Y eso que nuestra pestilente presencia, si algo tiene, es potencial narrativo. Sin embargo, apenas ocupamos un rincón mínimo del acervo pop-folklórico del país. En la Sociedad Argentina de Autores y Compositores hay contadas canciones que llevan mi nombre —con o sin...

1999 CALENDARIO NACIONAL Menem

Rubén Ale, "La Chancha" El 3 de diciembre de 1999, Carlos Saúl Menem visita Tucumán por última vez, como presidente de la Nación, lo custodian los Ale El 3 de diciembre de 1999, Carlos Saúl Menem realizó su última visita oficial a Tucumán como presidente de la Nación. Asistió a actos institucionales y partidarios en medio de un fuerte operativo de seguridad, en el que participó activamente el clan Ale, grupo con influencia en la provincia. El desplazamiento se produjo pocos días antes de dejar la Casa Rosada tras dos mandatos consecutivos. La presencia de figuras vinculadas al entorno criminal local quedó registrada en informes judiciales y periodísticos de la época. La visita tuvo como eje principal la inauguración de obras públicas y la participación en un acto político del Partido Justicialista. Menem llegó al aeropuerto Benjamín Matienzo en horas de la mañana y fue recibido por el gobernador Julio Miranda, junto a funcionarios provinciales y dirigentes partidarios. El via...