Ir al contenido principal

UCRONÍA Si ganaban los realistas

Hermosa Lima, capital del Perú

Un relato a pura bicicleta imagina otra patria, con Lima como capital y una Gran América que nunca existió, pero sigue tentando

Mirá si en Tucumán ganaban los realistas —dice Lucho, último compañero de pedaleos por el sur de la ciudad— hoy íbamos a ser parte de la gran nación peruana, quizás más extensa que el Brasil y más poderosa, por cierto. ¿Cómo iba a ser? Bueno, a los futuros argentinos les dejábamos Buenos Aires y la Patagonia y que se arreglaran como pudieran. Nos entusiasmamos con ese Manuel Belgrano que nos prometía una nación libre y no sé qué otras macanas, y nos jodimos solitos.
O al revés: calculá que, si en mayo de 1810 no se iniciaba la guerra civil que terminó en la Independencia, siempre conducida por los porteños, hoy al menos todo el antiguo Virreinato sería una sola Nación, desde el Polo Sur hasta más allá del lago Titicaca. Y si sumamos las dos equivocaciones, más otras que fuimos acumulando en el camino, quizás lo que hoy se conoce como Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Perú, y hasta Ecuador y partes de Venezuela y Colombia, habría sido la misma cosa. ¡Y el sur de Brasil, con los estados de Río grande del Sur, Santa Catalina, Paraná, San Pablo y los dos Mato Grosso!, ¡qué tal!
Camino a Maquito al pasar por la casa de los Banegas, Lucho siempre les pega un grito, aunque no lo oigan, como si se tratara de un ritual necesario para que la historia siga rodando junto con las ruedas de la bicicleta.
La capital iba a ser Lima, lógicamente, por su ubicación estratégica, sus riquezas naturales, la belleza de sus paisajes y su pujanza. También calcula, quizás con mucha razón, que aquí iban a venir tres veces más inmigrantes que los que recibieron otras naciones, pues los europeos habrían preferido venir a la Gran América, en vez del pequeño Estados Unidos de Norteamérica o el Canadá, esos ínfimos países.
Olvidate de la Guerra de la Triple Alianza, de la Guerra del Chaco, de las escaramuzas entre peruanos y ecuatorianos. Los peruanos se habrían evitado la guerra con los chilenos, porque serán todo lo taimados que usted quiera los trasandinos, pero no son tontos: no se hubieran animado a empezar una disputa con semejante potencia. Ellos no serían parte de la Gran América; ya se sabe, prefieren ser aliados de Gran Bretaña, parece que eso les da lustre o algo, semejantes weones.
En sus correrías en bicicleta, Lucho lleva inflador, parches y solución. Todo al cuete, porque nadie en el grupo sabe parchar una goma. Pero ahí lo ves, cargando la mochila como si se tratara de un deber histórico, listo para cuando la rueda se pinche, aunque ninguno se anime a meterle mano.
Al día de hoy, el puerto de Lima sería el más grandes y poderoso de Sudamérica. Y Buenos Aires, con sus aguas poco profundas, sería una ciudad de segundo orden, condenada a envidiar a la vecina Montevideo, beneficiada con sus aguas profundas, grande, pujante, hermosa, con su característico obelisco recortado en el horizonte.
Es posible que, en ese tiempo ucrónico, lo que hoy se conoce como el Norte Argentino hubiera sido una sola provincia, con capital en San Miguel de Tucumán o en San Fernando del Valle de Catamarca. Libres de los caudillos que atrasaron estas ciudades con sus peleas y caprichitos monárquicos de pago chico, la región habría sido una de las más ricas de esa Nación que no quisimos, no pudimos o no supimos ser.
A veces Lucho se entusiasma tanto que pedalea más rápido que el resto, todos viejos chotos que lo seguimos a duras penas, acezando por volver, tomar un poco de agua en la casa y no pensar en las macanas que habla. Pero él insiste, da otra vuelta de tuerca a su relato y recuerda que la historia, como una bicicleta, nunca se detiene del todo: si deja de moverse, se cae.
A veces se calla un rato, suele suceder cuando pasamos por lo del Flaco Álvarez, en Maquito, porque a partir de entonces ya nadie habla, es una parte tan linda del Camino de la Costa que pedaleamos en silencio, sintiendo quizás el perfume que viene de las hermosas fincas. En las casas la gente se levanta, cantan los últimos gallos de la mañana.
Juan Manuel Aragón
A 26 de septiembre del 2025, en la Independencia. Comprando una oferta de papas.
Ramírez de Velasco®

Comentarios

  1. Cristian Ramón Verduc26 de septiembre de 2025, 8:58

    Y si los españoles no traían gallinas, ustedes en vez del canto del gallo iban a escuchar únicamente a las charatas y los pájaros. ¡Bienhaiga con la ucronía!

    ResponderEliminar
  2. Varios de esos acontecimientos imaginarios seguramente no hubieran ocurrido, definitivamente. El primero es el de los europeos (anglosajones) que hubieran preferido venir a nuestra América en vez de "al pequeño" Estados Unidos. Esos colonos eran religiosos profesantes de fe, que buscaban establecerse en tierras en las que no dependieran de ningun reinado europeo. Y no les impórtó el tamaño de USA, simplemente porque no existía USA y solo se conformaron con fundar 13 aun más pequeñas colonias.
    Lo que pasó es que se mandaron una constitución y sistema de organización socio-política tan exitosa, que muchas otras regiones quisieron sumarse a la "unión", y eso fue tan beneficioso financieramente, que terminaron comprando los territorios que les faltaba para llenar el album.
    Otro tema dificil de darse es que el puerto de Peru fuera a ser el mas importante. El pacífico es tan vasto y todo en él queda tan lejos, que las principales rutas marítimas operan por el atlántico (razon por la que se construyeron los canales de Suez y de Panamá). Teniendo la hidrovía para sacar productos al atlántico, es muy poco lo que sale de nuestros países por el pacífico en comparación.
    Lo que sí hubiera sido probable, de no meterse los porteños, es que tanto la banda oriental como Bolivia hubieran continuado siendo las provincias unidas del río de la Plata y tendríamos salida al pacífico por lo que es hoy Atacama, que era parte del territorio. Pero como los porteños nunca entendieron a la américa y solo les importó su interés.....hasta el día de la fecha, tenemos lo que tenemos y estamos como estamos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares (últimos siete días)

BALCEDO Otro país crecía a su alrededor

Bobadal hoy, visto desde el satélite Brevísima historia de un hombre que forjó un pueblo lejano desde un almacén a trasmano del mundo El hombre se llamaba Balcedo Santillán. Era el dueño del almacén “El luchador”, en el lejanísimo Bobadal, pueblo que estuvo mucho tiempo a trasmano del tren, de las principales rutas y caminos, de los ríos y arroyos, con decir que ni los aviones surcaban su cielo. Nada pasaba por ahí, salvo camiones llevando leña, el ómnibus de la empresa Piedrabuena, carros cañeros, los sulkys en que se manejaban los vecinos y algún viajero que caía por ahí rumbo a otra parte. Alguien dijo alguna vez que los vecinos vivían tras los ancochis, protegiéndose de las inmensas nubes de tierra que dejaban los vehículos de cuatro ruedas. Que honraban su nombre muy bien puesto: “bobadal”, tierra suelta. Balcedo estaba ahí desde mucho antes de que el gobierno loteara el lugar y trazara las calles, algunas de forma arbitraria, pues cruzaban por el medio del patio de algunas casas....

LIBRO Magui Montero partió su alma

Magui Montero al centro, a la izquierda Manuel Rivas, a la derecha, Marcela Elías La presentación de un libro de poesías convocó a un nutrido grupo de amigos y admiradores Por Juan Gómez Fue el miércoles a la caída del sol. Café-Librería “Bellas alas”. Magui Montero presentó su libro “Hasta partir el alma”. De pronto las mesas se cubrieron de flores multicolores (mujeres) que ofrecieron alegría y ruido. Lluvias de ideas entrelazadas entre sí: “Interpela / herida social / mar de la vida / ternura extraviada / intento de reparar / la fuerza de la esperanza / la poesía una forma de escuchar que empieza con la palabra / el papel me reclama que escriba / habla una parte del alma”. La idea de la presentación de su obra literaria, Maqui quiso que tomáramos nota que está en contacto con su alma. Un refrán francés dice que “la gratitud es la memoria del corazón”. Tras sus palabras uno comprende que la vida apura y no tiene tiempo. Quiere encontrar lo extraordinario en lo cotidiano. Escogió es...

María Corina Machado obtiene el Nobel de la Paz

María Corina Machado Una luchadora incansable por la libertad y la justicia en un país bajo la opresión del socialismo En un mundo en que la oscuridad del autoritarismo se extiende como una sombra implacable, la noticia de que María Corina Machado ha sido galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2025 ilumina el horizonte con esperanza renovada. Anunciado hace un rato en Oslo por el Comité Noruego del Nobel, el galardón reconoce su incansable labor por promover los derechos democráticos del pueblo venezolano y su lucha por una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia. Nacida en Caracas en 1967, Machado, ingeniera industrial de formación, ha transformado su herencia de liderazgo en un faro de resistencia civil ante la opresión del socialismo. Desde sus inicios en la política, ha encarnado la valentía frente a la opresión. Fundadora del partido Vente Venezuela en 2012, unió fuerzas opositoras en la alianza Soy Venezuela, demostrando que la unidad es el arma más poderos...

ALTO EL FUEGO Cuando el odio es un negocio

El mundo civilizado apoya lo incivil A muchos no les gusta lo que está sucediendo en estos momentos en el Oriente Cercano, Israel y Gaza, vea por qué Por Natalio Steiner desde Raanana, Israel Se logró el acuerdo. El fuego se detuvo. Y de golpe, silencio. Ni marchas, ni carteles, ni lágrimas de alivio. La paz llegó… y a muchos parece que no les gustó. “Habría esperado que las calles de Europa y los campus del mundo estallaran de alegría por el fin de lo que durante meses llamaron ‘genocidio’”, dijo Naftali Bennett, ex ministro israelí. Pero no pasó. Porque su causa nunca fue la vida de los palestinos. Fue el odio a Israel. La oportunidad de sentirse moralmente superiores sin entender nada. Durante meses repitieron lo que les dictaban desde los bunkers ideológicos, sin una idea propia, sin un dato, sin contexto. Ahora que el fuego se apaga, se apaga también su utilidad. Ya no hay cámaras, ni trending topics, ni víctimas que mostrar. Y sin eso, no hay negocio. La paz los deja sin discurso...

VERANO El gustoso sufrimiento de una tradición

Perfil de Santiago a la siesta El santiagueño ama tanto el calor que es tema recurrente de todas sus conversaciones, cuando llega el tiempo La poliorcética es el arte y la técnica militar desarrollada en la Antigua Grecia para el asedio y la defensa de ciudades fortificadas. El término significa, justamente, "arte de atacar y defender plazas fuertes". Este conocimiento se derivaba de la estructura de las pólis (ciudades—estado griegas), que a menudo estaban amuralladas y requerían estrategias específicas para su protección o conquista, como el uso de máquinas de asedio, trincheras y tácticas de bloqueo. Los santiagueños se ven asediados todos los años, por un sordo rencor que los atormenta hasta límites insoportables, sobre todo cuando el tiempo regala días frescos de la noche a la mañana, y con mediodías de sol ma non tropo. Para no sufrir, se abrigan como si fueran al Polo Sur, y hasta se hacen los de tiritar en las paradas mientras esperan el colectivo. Desean con el alma ...