Ir al contenido principal

LIBRO La novela

Los novelistas
Bastó para cambiar el rumbo de la historia que cuatro tipos se pusieran de acuerdo para escribir una novela cada uno con el mismo argumento


Piense usted en cuatro tipos que hace dos mil años se ponen de acuerdo para escribir más o menos la misma historia, deciden darle un toque literario, idean una novela con una trama idéntica. Se trata de un tipo que nace en un hogar humilde, crece y a los 30 años, la flor de la edad, se lanza a predicar una doctrina extraña junto a doce personas que lo acompañan a todas partes. Luego, entre los ancianos de las viejas costumbres y una fuerza de ocupación de un gobierno lejano, se ponen de acuerdo y lo matan. Pero el tipo, que había prometido que al tercer día iba a resucitar, va y cumple su palabra.
Bien leído el texto, cualquiera se da cuenta de que, si quería salvarse el protagonista, podría haberlo hecho. Pero deja que lo trompeen, le peguen latigazos, le pongan como un casco de espinas en la cabeza y que lo obliguen a llevar los maderos en los que lo clavarán. Quien lea por primera vez el texto literario, hay un punto en que dirá: “Bueno, que se salve de una buena vez si tiene tanto poder”. Y contra la lógica de este momento y también de aquel, no lo hace, sino que acepta mansamente que los cuatro novelistas lo lleven hasta el mismo fin, clavado en una cruz, escupido, abandonado por los suyos, escarnecido, odiado.
El único problema, amigo querido, es que ese texto fue escrito antes de la invención de las novelas y antes, incluso, de que existiera la literatura como rama de estudio independiente de la filosofía.
Pero, oiga, no le falta nada a esa ficción escrita a cuatro manos: intriga, compañerismo, celos, ternura, adulaciones, curaciones maravillosas, enseñanzas, parábolas, traición, tortura, una muerte cruel, una asombrosa y casi increíble resurrección. Para completar el panorama, luego viene una redacción de lo que sucede después de aquella muerte, más cartas que algunos seguidores del protagonista escriben a sus seguidores y finalmente un texto de esperanza frente a todo lo que va venir después y que por comodidad se llama Apocalipsis. No importa que usted crea o no crea en lo que se dice en ese libro, pero no diga que no es todo muy redondito, perfecto. Y es la pura verdad.
Imagine todo eso redactado en un mundo de analfabetos y aún así, los que sabían leer no lo eran con un solo sistema de signos sino con alguno de los tantos que circulaban en ese rincón perdido del mundo. Quienes idean la novela no eran sabios, estudiosos, grandes lectores o eruditos expertos en las varias lenguas que se hablaban en ese tiempo, sino personas rústicas, simples, obreros, pescadores, gente más acostumbrada a trabajar con las manos, con el cuerpo, con los sentidos, que con la mente. No era fácil conseguir una pluma, tinta, papel, una mesa, una silla, luz suficiente para escribir, para peor, con manos callosas, no acostumbradas a esa gimnasia. Algunos terminaron sus escritos en medio de terribles persecuciones y no les temblaron los dedos para contar aquella historia. Dan a luz una novela que todavía hoy es la más leída, discutida, impugnada, alabada, investigada, refutada y tergiversada de toda la historia de la humanidad.
El libro sigue dando vueltas en las librerías, en ediciones de lujo o rústicas, en todos los idiomas que hay en el mundo, los que todavía rolan y siguen sirviendo para que se entiendan los hombres y en algunas otras lenguas que sólo unos pocos especialistas son capaces de leer.

Leer más: Qué son los órdenes angélicos, cuántos ángeles hay, quienes son Miguel, Rafael y Gabriel

Esas cuatro personas apenas alfabetizadas escriben hace dos mil años, un libro sin el cual es difícil de comprender el mundo actual. Todo lo que hay a su alrededor, su casa, su auto, su ropa, su teléfono celular, la pared que tiene a frente, todo, pero todo, todo, de alguna manera remite a esas letras. Desde la fecha de su cumpleaños hasta el idioma en que se comunica, pasando por lo que piensa de la vida, la muerte, el amor, la risa, el llanto, la alegría por el nacimiento, el luto por la muerte: todo está impregnado de las ideas plasmadas por esos cuatro campesinos, nacidos y criados en un orbe, en un orden, una civilización que, como tal, dejó de existir poco tiempo después de que terminaron su trabajo.

Aún si no cree, si niega todo este escrito de punta a punta, sus ideas, sus reacciones, su idioma, su sistema de creencias son parte del sistema filosófico que comenzó con esa novela. Esos pensamientos formaron este mundo tal como es y no de otra manera.
Si lo lee bien, verá que los defectos, las manchas que hay en la historia no son por haber hecho lo que decía sino por haber evitado sus consignas o haberse negado a sus enseñanzas, muchas de las cuales fueron adoptadas, mal que les pese, hasta por sus mismos enemigos.
Lo mejor de todo es que hay gente que cree que fue escrita para que se cumpla con el designio de un ser superior al que llaman Dios. Entregan a sus hijos a la creencia de las enseñanzas de especialistas para que les hagan aprender las conclusiones que se derivan de aquella historia. Y esperan que sigan creyendo para siempre en la existencia de una vida después de la muerte, que viene a justificar al protagonista de la novela que le decía, muerto en la cruz. Hay gente que quisiera para ella misma y para sus hijos un destino como el que marcó el protagonista de aquella obra. Y lo cree sinceramente y todos los días se arrodilla y repite fórmulas que vienen de muy antiguo y que a veces no entiende, para que se haga la voluntad del Resucitado.
©Juan Manuel Aragón
A 22 de noviembre del 2023, en Independencia y Balcarce. Pedaleando la mañana

Comentarios

  1. De no ser qué un emperador romano adoptó el Cristianismo allá por el año 303 DC por conveniencia a los efectos de mantener unido al imperio, el cristianismo no existiría. Los romanos no perseguían a los pueblos conquistados por sus creencias, siempre que respetaran al emperador como tal y como un Dios, el PONTÍFICE MÁXIMO, pero LOS JUDÍOS se negaron y no aceptaron lo propuesto, esperaban el Mesías qué los iba a liberar del yugo romano. Se rebelaron una y otra vez, lo que les costó sangrientas represiones, donde se CRUCIFICABA a los revoltosos y como en este caso y a los ladrones. Era lo usual, la diferencia con otros que se andaban auto definiendo como profetas, es que esta vez los seguidores del crucificado pusieron pie en polvareda y en esa dispersión fueron relatando los acontecimientos por diversos lugares, estos murieron pero quedaron comunidades que al cabo de 80 años después escribieron lo que se trasmitió de forma oral, y a esos escritos le pusieron el nombre de algunos apóstoles, Mateo, Juan, etc. Por eso es la diferencia en cada uno de los relatos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se ve que no sabía ni aca, dijo el tucumano, confundís fechas, lugares, circunstancias, pero es lo que ti han enseñado y lo repetįs como perico

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares (últimos siete días)

CARABAJAL Los hermanos no son unidos

La nota en El Liberal La historia al parecer no es como se quiso que apareciera en el diario El Liberal, hay un trasfondo que debe salir a la luz Por Alfredo Peláez, Fredy "Los hermanos sean unidos / porque ésa es la ley primera, / tengan unión verdadera, / en cualquier tiempo que sea, / porque si entre ellos se pelean / los devoran los de ajuera". Los célebres versos del Martín Fierro. Esta nota va a costar escribirla. Porque se trata de dos entrañables amigos. De dos hermanos de la vida. Kali y Musha. Musha y Kali Carabajal. No tenemos la misma sangre, pero es como si la tuviéramos. Amigos de años. Pasajeros del tiempo. Marcelo Jozami publicó hoy en El Libera “LosCarabajal inicia una etapa con nuevos integrantes”, además de la inclusión de instrumentos de percusión y de viento en el afán de volver a una sonoridad de raíz. El cambio más notorio se da en uno de sus tradicionales integrantes, Mario Rolando Carabajal, ”Musha”, quien atraviesa por una delicada situación de salu...

EXCLUSIVO Kali, el que faltaba hablar

Kali Carabajal La voz que faltaba para completar la historia de los Carabajal dijo su verdad en una entrevista que brindó al corresponsal en Mar del Plata Alfredo Peláez, Fredy En el periodismo aprendí a moverme con cautela. A no ir más allá de lo que la circunstancia merece, y no pasar jamás sobre los otros. Nobleza obliga. No podía darle voz al querido amigo Musha y silenciar al otro querido hermano de la vida, Kali, el eterno Carabajal, como alguna vez supe bautizarlo. es el más antiguo del grupo, de la época del mítico Agustín, el fundador. Ya estaba en el baile y no quedaba otra que bailar. Con más dudas que certezas lo llamé a Kali. Al teléfono me respondió: —Hola hermano querido. A vos no te puedo mentir. Musha, mi querido hermano, no se portó bien con el grupo. Mas que Mario, su esposa Miriam. Después de actuar en Cosquín, fuimos a Recreo, Musha ya estaba enfermo y no viajó. Al retornar le dimos su parte. Como correspondía. Como por su enfermedad no podía hablar, nos comunicamo...

1942 AGENDA PROVINCIAL Zurita

Carlos Zurita, y detrás Gilda Roldán y Francisco Santucho El 31 de marzo de 1942 nace Carlos Zurita, sociólogo, poeta, escritor y académico que combina las ciencias sociales con la creación literaria El 31 de marzo de 1942 nació Carlos Virgilio Zurita en Santiago del Estero. Sociólogo, poeta, escritor y académico, tiene una trayectoria que combina el rigor de las ciencias sociales con la sensibilidad de la creación literaria. En Santiago ha dejado una marca significativa en el ámbito intelectual como en el cultural. Su formación académica y su labor profesional lo han convertido en una figura destacada de la Universidad Nacional de Santiago del Estero, en la que ocupó papeles clave y ha contribuido a la institucionalización de las ciencias sociales en la región. Es licenciado en Sociología y obtuvo su doctorado en esta disciplina por la Pontificia Universidad Católica Argentina Santa María de los Buenos Aires. Completó su formación con estudios de posgrado en la Comisión Económica para...

LEYENDA El hornero

Hornero, por Jorge Llugdar Según cuentan, era el ave más bella del monte, pero un día eligió ser obrero de la construcción: por qué lo hizo El hornero no siempre tuvo esa pintita color tierra, de afiliado al gremio de los obreros de la construcción. En los tiempos de antes era la más bella ave del monte, más hermosa que un pavo real o que esos papagayos que aparecen en las láminas de los libros de lectura. Además, cantaba que era una maravilla. Con decirle que los animales cesaban en su mutua persecución cuando el hornero ofrecía un concierto. El puma dejaba de acosar a las cabras, el cuervo no revoloteaba las osamentas, la hormiga no comía las plantas de la gente, la abeja no libaba néctar de las flores. Todos estaban en paz cuando entonaba sus canciones, porque oírlo era una maravilla. Sin embargo, era un bichito sencillo. No se creía más que nadie porque Dios le hubiera dado ese don: unos nacen para ser abogados, otros para empleados públicos, maestras, martilleros, contadores, bomb...

COSTUMBRES ¿El mate?, amargo por supuesto

El Che, posiblemente con mate amargo Aunque es popular cebarlo dulce, sobre todo en el norte, el que se toma sin azúcar también tiene sus adeptos, sobre todo entre gente sedentaria Cebar mate amargo es otra cosa, amigos. El mate dulce tiene una serie de ritos, ceremonias, etiquetas y cordialidades de las que carece cuando no lleva azúcar ni edulcorante artificial ni miel ni ninguna otra cosa más que agua caliente, ya sea del termo o directamente de la pava, esa Negra con sarro que es la dueña de la cocina en los hogares más humildes de la Argentina. El mate amargo, generalmente bebido en solitario, es la bebida de los que trabajan con las manos, como escritores, mecánicos algunos artesanos. Cuando es dulce en cambio se presta para la charla, el acercamiento de amigos, la cordial invitación a sentarse en amable rueda, la conversación amena, la expansión entre conocidos. Quienquiera que haya visitado el norte de la Argentina, sabrá que en estos pagos es mucho más popular el mate dulce, a...