![]() |
Tarija |
El 18 de agosto de 1810, en Tarija, se convocó un cabildo abierto que eligió a José Julián Pérez de Echalar como diputado para representarlo en la Junta Grande de Buenos Aires
El 18 de agosto de 1810, en el territorio de Tarija, se convocó un cabildo abierto que eligió al joven abogado José Julián Pérez de Echalar como diputado para representar a la región en la Junta Grande de Buenos Aires, luego de la Revolución de Mayo. Presidido por Mariano Antonio de Echazú, se ratificó el apoyo tarijeño a la revolución y fue un hito en la integración del territorio a las Provincias Unidas del Río de la Plata.En 1810, el Virreinato del Río de la Plata vivía momentos de agitación tras la invasión napoleónica a España y la captura de Fernando VII. La Revolución de Mayo, iniciada el 25 de mayo en Buenos Aires, buscaba establecer un gobierno autónomo. La Primera Junta, presidida por Cornelio Saavedra, envió circulares a los cabildos del interior para sumarse a la causa y elegir representantes. Tarija, parte de la Intendencia de Salta, recibió esta circular el 23 de junio de 1810.El Cabildo de Tarija, liderado por Mariano Antonio de Echazú, se reunió el 25 de junio en sesión extraordinaria. Asistieron Juan Antonio Reguerín, Francisco de Ruiloba y Ambrosio Catoira, que expresaron su adhesión a la Junta de Buenos Aires. Se redactaron oficios firmados por los cabildantes, comunicando el apoyo a la revolución. La decisión reflejó el sentir del pueblo tarijeño, comprometido con la causa independentista frente al vacío de poder en la corona española.
Para cumplir con el segundo requerimiento de la Junta, se convocó un cabildo abierto el 18 de agosto de 1810. Organizado por Echazú, reunió a la “parte principal y más sana del vecindario” en la plaza frente al Cabildo. Se informó a los presentes sobre los sucesos de Buenos Aires y la necesidad de elegir un diputado. La votación, por sufragio censitario, tuvo 42 electores, de los cuales 38 apoyaron a José Julián Pérez de Echalar.
Pérez, nacido en Tarija en 1780, se había licenciado en derecho en la Universidad de Chuquisaca en 1796. Ejercía como abogado en Tarija y Jujuy, y era conocido por su amistad con Juan Ignacio Gorriti. Su elección como diputado, a los 30 años, reflejó la confianza en su capacidad para representar los intereses tarijeños. El 20 de agosto, el Cabildo envió un oficio a Buenos Aires confirmando su designación.
El cabildo abierto se desarrolló en el edificio del Cabildo, que albergaba el archivo y la cárcel. La fachada, con su campanario, fue testigo de la ovación que recibió Pérez tras la votación. Los capitulares, entre ellos José Antonio Reguerín y Juan Díaz Chávez, garantizaron que el proceso fuera transparente. La elección marcó un momento de unidad entre los tarijeños, fortaleciendo su vínculo con la revolución.
Pérez de Echalar partió hacia Buenos Aires y se incorporó a la Junta Grande en diciembre de 1810. Como diputado, se alineó con el grupo de Juan José Paso, opuesto a Cornelio Saavedra y Gregorio Funes. Su postura moderada lo destacó entre los representantes de las provincias, defendiendo los ideales revolucionarios sin adherirse plenamente a las facciones más radicales. Su papel en la Junta Grande fue breve pero significativo.
El contexto de Tarija en 1810 era complejo. Dependiente administrativamente de Salta, mantenía cierta autonomía. Su apoyo a la Revolución de Mayo hizo que fuera una de las primeras en respaldar a Buenos Aires, junto a Tucumán. La decisión del 25 de junio y la elección del 18 de agosto precedieron a los pronunciamientos de Cochabamba y Santa Cruz, destacando el papel protagónico de Tarija.
El Cabildo de Tarija tenía figuras como José Antonio de Larrea y Miguel Jerónimo de Tejerina, reflejó la estructura colonial aún vigente. Sin embargo, el cabildo abierto permitió una participación más amplia, limitada a los vecinos con derecho a voto. La elección de Pérez de Echalar simbolizó la voluntad de Tarija de integrarse al proceso revolucionario, aunque años después, en 1826, optaría por unirse a Bolivia. Por actos como el que tuvo en 1810, la seguimos extrañando.
Ramírez de Velasco®
Comentarios
Publicar un comentario