Ir al contenido principal

1897 ALMANAQUE MUNDIAL Goebbels

Goebbels

El 29 de octubre de 1897 nace Pablo José Goebbels, en Rheydt, Alemania. Fue ministro de propaganda del Tercer Reich alemán bajo Adolf Hitler, maestro, orador y propagandista


El viernes 29 de octubre de 1897 nació Pablo José Goebbels, en Rheydt, Alemania. Fue ministro de propaganda del Tercer Reich alemán bajo Adolf Hitler. Maestro orador y propagandista, es tenido como el responsable de presentar una imagen favorable del régimen nazi al pueblo alemán. Tras el suicidio de Hitler, Goebbels sirvió como canciller de Alemania durante un solo día antes de que él y su esposa, Magda, envenenaran a sus seis hijos y luego se quitaran la vida el 1 de mayo de 1945.
Era tercero de cinco hijos de Friedrich Goebbels, empleado de una fábrica católica, y Katharina Maria Odenhausen. Sus padres le brindaron una educación secundaria y también lo ayudaron a mantenerse durante los cinco años de sus estudios universitarios. Fue exento del servicio militar durante la Primera Guerra Mundial debido a su pie zambo (presumiblemente como resultado de haber contraído polio cuando era niño), lo que más tarde permitió a sus enemigos trazar un paralelo con la pezuña hendida y la cojera del Diablo.
Después de graduarse de la Universidad de Heidelberg en 1922 con un doctorado en filología alemana, se dedicó a esfuerzos literarios, dramáticos y periodísticos, escribiendo una novela expresionista en forma de diario en la década de 1920. Aunque no estaba involucrado en política, igual que la mayoría de sus contemporáneos, estaba imbuido de un fervor nacionalista que se hizo más intenso por el frustrante resultado de la guerra.
Durante su época universitaria, un amigo también le presentó las ideas socialistas y comunistas. Antiburgués desde su juventud, Goebbels siguió siéndolo a pesar de sus posteriores afectaciones de clase alta. Al principio no era antisemita. Los profesores de secundaria que más valoraba eran judíos, y en un momento estuvo comprometido con una chica medio judía. Cuando era joven, sus opciones seguían abiertas mientras contemplaba la participación política. De hecho, fue un accidente lo que determinó el partido al que se uniría.
En el otoño de 1924, Goebbels se hizo amigo de un grupo de nacionalsocialistas. Un orador talentoso, se convirtió en administrador de distrito del Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes en Elberfeld y editor de una revista nacionalsocialista quincenal. En noviembre de 1926, Hitler lo nombró líder de distrito en Berlín.
El Partido Nazi, había sido fundado y desarrollado en Baviera y, hasta ese momento no había habido organización partidaria en Berlín, la capital alemana. Goebbels debió su nuevo nombramiento a la prudente elección que hizo en un conflicto entre Gregor Strasser, representante de la facción anticapitalista “de izquierda” del partido, y el líder del partido “de derecha”, Hitler. En este conflicto, Goebbels hizo gala de oportunismo al ponerse del lado de Hitler en contra de sus propias convicciones internas.
Construyó la fuerza nazi en Berlín hasta el acceso de Hitler al poder en enero de 1933. En 1928, Hitler le dio a Goebbels, quien fundó “El Asalto” en 1927 y fue su editor y más tarde, de 1940 a 1945, sirvió como editor de Das Reich, el puesto adicional de director de propaganda del Partido Nacional Socialista para toda Alemania. Goebbels comenzó a crear el mito del Führer en torno a Hitler y a instituir el ritual de celebraciones y manifestaciones partidarias que desempeñaron un papel decisivo en la conversión de las masas al nazismo. Además, difundió propaganda continuando con su riguroso programa de discursos.
Después de que los nazis tomaron el poder, tomó el control de la maquinaria de propaganda nacional. Se creó para él un Ministerio Nacional de Ilustración Pública y Propaganda y se convirtió en presidente de la recién formada “Cámara de Cultura”. En esta capacidad controlaba, además de la propaganda como tal, la prensa, la radio, el teatro, el cine, la literatura, la música y las bellas artes. En mayo de 1933 contribuyó a la quema de libros "no alemanes" en la Ópera de Berlín. "La era del intelectualismo judío extremo ha llegado a su fin", dijo Goebbels triunfalmente a la multitud.
Un mes antes, Hitler le había ordenado organizar un boicot a las empresas judías. El control que Goebbels ejerció sobre la propaganda extranjera, la prensa, el teatro y la literatura era limitado (se ejerció sólo en amargas luchas jurisdiccionales con otros funcionarios) y mostró poco interés en regular la música y el arte. Sin embargo, no logró extender su poder a otras áreas, como las escuelas secundarias.
Muchas de sus políticas culturales fueron bastante liberales, pero tuvo que capitular ante las demandas de los extremistas nacionalistas. Incluso sus mensajes propagandísticos estaban limitados por el argumento de que la agitación incesante sólo embota los poderes receptivos del oyente. En lo que a le concernía, la eficiencia tenía prioridad sobre el dogmatismo, la conveniencia sobre los principios.
Su influencia disminuyó en los años 1937 y 1938. Durante este tiempo también se vio involucrado en una historia de amor con una estrella de cine checoslovaca que casi lo hizo renunciar a su carrera y a su familia. (En 1931 se había casado con Magda Ritschel, una mujer de la clase media alta que le dio seis hijos). Su papel sufrió pocos cambios con el estallido de la Segunda Guerra Mundial.
El dominio de la propaganda de Goebbels fue evidente después de las derrotas de Alemania en Stalingrado y África. Goebbels no falsificó los hechos de la situación imperante. Por el contrario, el objetivo principal de su propaganda –que llevó adelante personalmente y sin tregua en la prensa y la radio– era generar continuamente esperanzas citando paralelos históricos y haciendo otras comparaciones, evocando leyes supuestamente inmutables de la historia, o incluso, como último recurso, haciendo referencia a algunas armas milagrosas secretas.
Sus apariciones públicas, en contraste con las de otros nazis prominentes que se habían retirado a búnkeres y fortificaciones, contribuyeron a mejorar una imagen que hasta entonces había sido abrumadoramente negativa. Su obra fue eficaz a la hora de intensificar los esfuerzos del frente interno: se convirtió en el protagonista de la guerra total.
Después de varios comienzos en falso, el intento de asesinato de Hitler el 20 de julio de 1944 lo puso a la vista de su objetivo. El 25 de agosto se convirtió en “Plenipotenciario del Reich para la Guerra Total”, pero ya era, como se lamentó poco después, demasiado tarde.
Hitler se suicidó el 30 de abril de 1945 y ese día Goebbels se convirtió en canciller del Reich, según las instrucciones del testamento de Hitler. Sin embargo, el 1 de mayo, Goebbels, el único de los líderes nazis originales que permaneció en el búnker sitiado en Berlín, y su esposa envenenaron a sus seis hijos con cianuro, y luego la pareja se quitó la vida.
©Juan Manuel Aragón

Comentarios

Entradas populares de este blog

AÑORALGIAS Santiago querido

La Secco Somera lista (a completar), de lo que hay todavía en la ciudad mágica habitada por los santiagueños, sus sueños y saudades Algunas cosas que antes sabía haber en Santiago y no hay más, se perdieron para siempre, consignadas en este sitio para que al menos quede su recuerdo. Esta lista la publiqué hace algunos años en Feibu y los amigos la completaron. 1 Helados “Kay”, más ricos no hay. 2 El auto Unión, (con motor de dos tiempos, como la Zanella). 3 Las heladeras Vol-Suar. 4 Las prohibidas del Renzi (¡Coca!, cuánto amor). 5 La bilz de Secco (la de ahora no es lo mismo, qué va a ser). 6 El Santa Ana, El Águila, empresa Robert, el Manso llegando desde el fondo del saladillo. 7 Cheto´s bar. 8 El peinado batido de las mujeres. 9 El jopo (ha vuelto, pero como mariconada). 10 La nueva ola y los nuevaoleros. 11 El Tuco Bono. 12 El departamento Matará. 13 Panchito Ovejero vendiendo billetes de lotería. 14 La Porota Alonso. 15 La Gorda de Anelli. 16 Tala Pozo. 17 Mi tata. 18 Panadería L

LEYENDA El remís con chofer sin cabeza

Imagen de Facebook de David Bukret Un misterioso auto circula por las calles de Santiago y La Banda: un caso que está dando que hablar en todos lados Un hombre detiene su motocicleta en el parque Aguirre, lleva una mujer atrás, son las 3 de la mañana. Se apean debajo de un eucalipto, justo cuando empiezan a besarse aparece un auto, un remís que los encandila y se queda parado, como esperando algo. Ella pega un grito: “¡Mi marido!”, suben de nuevo a la moto y se van. Antes de irse, el hombre observa que en el remís no hay nadie, parece vacío, pero ya ha acelerado, a toda velocidad y no se va a detener. Ha pasado varias veces, según cuentan los parroquianos en el café con nombre y apellido, en una historia que va pasando de mesa en mesa, repitiéndose todos los días con más detalles. Las mentas hablan de un remís que aparece de manera impensada, no solamente cuando detecta traiciones amorosas, sino que asustó a varios muchachos que andaban trabajando de noche en casas que no eran las suya

EVOCACIÓN El triste final de la Dama de Hierro

Mercedes Marina Aragonés El recuerdo para quien el autor de esta nota llama Dama de Hierro, algunas anécdotas y la apreciación sobre una personalidad controvertida Por Alfredo Peláez No fue el final que posiblemente soñó en sus años de poder y esplendor. Cuando el nombre Nina paralizaba hasta el más taimao. Se fue en silencio, casi en puntas de pie, como vivió sus últimos años. Muy pocos lloraron a Marina Mercedes Aragonés de Juárez, la dama que supo ser de hierro, en tiempos idos. Seguramente coqueteó en esos años con un funeral al estilo Evita, con su féretro en el salón principal de la Casa de Gobierno, o en el Teatro 25 de Mayo, y largas colas de santiagueños para darle el último adiós. Pero solo fueron sueños de diva. Nada de eso ocurrió. Los diarios santiagueños apenas se hicieron eco de su fallecimiento. Al fin y al cabo, más importante eran los 470 años del pago que ella intento domesticar a rienda corta y chicote. Quedarán miles de anécdotas que la tuvieron como protagonista.