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1832 ALMANAQUE MUNDIAL Manet

Édouard Manet

El 23 de enero de 1832 nace Eduardo Manet, influyente pintor francés que desafía las convenciones artísticas de su tiempo


El 23 de enero de 1832 nació Eduardo Manet, en París. Murió el 30 de abril de 1883 y fue un influyente pintor francés que desafiaba las convenciones artísticas de su tiempo. Su obra más destacada, "Le Déjeuner sur l'herbe" (Almuerzo sobre la hierba), exhibida en 1863 en el Salon des Refusés, generó controversia y entusiasmo entre la crítica y los jóvenes pintores impresionistas.
Provenía de una familia acomodada, pero su interés por el arte chocaba con las expectativas de su padre, quien deseaba que estudiara derecho. Después de intentos fallidos en la escuela naval, finalmente obtuvo el permiso de sus padres para seguir su pasión por la pintura. En 1850, ingresó al estudio del pintor clásico Thomas Couture, para adquirir habilidades técnicas.
Durante sus viajes por Europa y su tiempo en el estudio, experimentó con diferentes estilos y temas. Su encuentro con el poeta Charles Baudelaire influyó en la creación de "Música en los jardines de las Tullerías" en 1862. En 1863, se casó con Suzanne Leenhoff y exhibió "Le Déjeuner sur l'herbe", marcando el comienzo de su notoriedad.
La pintura en cuestión, inspirada en obras clásicas, retrataba a una mujer desnuda en compañía de hombres vestidos contemporáneamente, generando críticas por su representación de la modernidad y la elección de la luz dura e impersonal. A pesar de las controversias, Manet continuó desafiando las normas artísticas de su tiempo y dejó un impacto duradero en la historia del arte. Su legado incluye obras notables como "Olimpia" y "Un bar en el Folies-Bergère".
En el Salón de 1865, la pintura "Olimpia" de Édouard Manet generó escándalo debido a su desnudo femenino directo bajo una luz intensa. Descontento con la crítica, Manet viajó a España, pero regresó rápidamente. En 1866, su obra "El pífano" fue rechazada por el jurado del Salón, y Manet la exhibió en su estudio. En 1867, ante el rechazo de sus obras para la Exposición Universal, instaló un puesto en París, sin obtener una recepción favorable. Su estilo durante este período mostraba preocupación por la iluminación y la atmósfera.
El novelista Émile Zola elogió valientemente a Manet en 1867, considerándolo un representante de artistas que desafían la opinión pública. En 1868 pintó un retrato de Zola. En 1869, expuso "El balcón", presentando a Berthe Morisot, quien se convirtió en una destacada impresionista.
Tras críticas positivas de Zola y otros, Manet recibió un homenaje en el Salón de 1870, representado en "Un estudio en Batignolles". Durante la guerra franco-alemana, combatió y presenció el asedio de París.
En 1872, influido por Frans Hals, pintó "Le Bon Bock". En 1873, tras la destrucción parcial de su estudio durante la Comuna de París, vendió obras a Paul Durand-Ruel. En 1874, forjó amistad con Claude Monet, pintando obras al aire libre. Aunque amigo de los impresionistas, continuó presentando obras al Salón oficial, exponiendo rechazos en su estudio en 1875.
En obras como "Nana", de 1877, se inspiró en personajes de la novela de Émile Zola, desafiando las convenciones de su tiempo. "Plum Brandy" y "La rubia de los pechos desnudos" destacan por la representación moderna de la figura femenina y el uso de la luz.
"Chez le Père Lathuille" aborda temas controvertidos, mostrando a una mujer mayor con su amante en un restaurante. Manet, afectado por una enfermedad mortal, continuó su producción artística, destacando su participación en una exposición en Londres en 1882 y la presentación de "A Bar at the Folies-Bergère" en el Salón. Esta última obra rompe las barreras entre el espectador y la escena, siendo una contribución significativa a la pintura moderna.
En 1883 enfrentó la amputación de su pierna izquierda debido a la gangrena y falleció poco después. Su legado fue reconocido en una exposición póstuma en 1884, con Émile Zola escribiendo el prefacio del catálogo.
Aunque inicialmente enfrentó críticas, el siglo XX vio un aumento en su reconocimiento. Su desafío a las convenciones académicas influyó en los impresionistas y postimpresionistas, y su enfoque audaz en temas urbanos modernos le aseguró un lugar fundamental en la historia del arte moderno. Su legado perdura a través de su impacto en la representación artística y su valiente ruptura con las normas establecidas.
©Juan Manuel Aragón

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