Ir al contenido principal

LOAN El estropicio de la prensa

Loan Peña

Quién sabe lo que le sucedió al niño desaparecido en el pueblo correntino de 9 de Julio y por qué será un milagro si lo hallan

A mediados de junio desapareció un chico, Loan Danilo Peña, que vivía en 9 de Julio, pueblo de Corrientes. Sin ninguna otra noticia en el horizonte, periodistas de todo el país corrieron a cubrir la noticia, quizás esperanzados en encontrarlo con vida. Luego de más de dos meses de búsqueda, casi todos los periodistas volvieron a sus redacciones, mayormente en Buenos Aires, ocupados en otras noticias, el dueño del estudio jurídico más famoso de la Argentina anunció que deja el caso y son cada vez más escasos los informes con que hasta hace un mes atormentaban a su audiencia.
Si no hay buenas nuevas en este caso, dentro de pocos días las nuevas revelaciones de los otros asuntos que han ido surgiendo y ahora están en el candelero, terminarán de tapar todo recuerdo del chico y no se sabrá nada más de esta desaparición. A menos que lo encuentren, claro.
El periodismo, precisamente no especializado en delicados pasos de baile de ballet, entró como un elefante enloquecido en el caso, hizo cambiar jueces y echar policías, condenados mucho antes de tener un juicio, pidió cárcel para unos, indagatorias para otros, testimonios para los de más allá, se inmiscuyó en el expediente, reclamó pidiendo estas o aquellas medidas, caminó por los lugares en los que presuntamente estuvo el chico antes de esfumarse, calculó cuánto demoraba un vehículo en salir y entrar del “lugar de los hechos”, entrevistó a todo el pueblo, puso en la picota nacional a gente que quizás no tenía nada que ver. Y es más que obvio y lícito suponer que permitió escapar a los culpables, si es que los había, entre tanta madeja que dejó más enredada todavía. Pero el chico, como el poncho del cuento, no aparece.
Fue el antepenúltimo caso que ocupó a la prensa nacional y a miles de televidentes, que se preguntaban dónde está Loan, quién se lo llevó, qué pozo lo tragó, qué animales lo comieron, cómo fue que los marcianos lo abdujeron, en qué dimensión se mueve en estos momentos.
Apenas se tocaba el tema, la gente común preguntaba: “Vos qué piensas”. “¿Qué pienso de qué?”. “Qué ha pasado con Loan”. “No sé, no tengo cómo saber”. “¿Será que Laudelina sabe?” “¿La quién?” “La tía del chico”. La televisión azuzaba con sus titulares a convertirse en investigador profesional, Sherlock Holmes, comisario de la Federal o, aunque sea, agente raso.
De repente en los cafés surgían los expertos en huellas de vehículos, en distancias recorridas, todos conocían el pueblito correntino, todos sabían detectar los gestos de verdad o mentira en el rostro de quienes iban presentando generosamente las cámaras de televisión, después del corte comercial, por supuesto.
Mientras unos sostenían que era necesaria la prensa para “darle visibilidad” a la desaparición, otros recordaban el viejo dicho español de las abuelas, muchas manos en un plato hacen mucho garabato. Pero al final los periodistas enredaron tanto el asunto, que hoy para entenderlo se debe hacer, aunque sea, un curso de detective por correspondencia, porque hasta el momento hay siete imputados, es decir, siete personas que se pusieron de acuerdo para algo, no se sabe muy bien qué y guardan celosamente su secreto, aunque tampoco se sabe cuál y hay tantas teorías como televidentes tuvieron los canales de Buenos Aires. Pero el chico sigue desaparecido.
Nadie lo volvió a ver a Loan, nadie dio una información segura que lleve a la solución del caso, nadie sabe ya dónde rebuscar, a quién echar la culpa por no haberlo hallado, a quién preguntar por una nueva pista. El periodismo que supuestamente era la única garantía de que el niño se hallaría vivo está desaparecido en acción, ocupado en otros menesteres que ocupan la morbosidad del público, que ahora espera por horas la salida de un vídeo pornográfico, como si fuera la última película de Indiana Jones. Y volverán las eternas tertulias de los programas de la tarde, hablando de otros asuntos, bajo otros cielos, en otras circunstancias.


Hablando de todo un poco, el 12 de abril de este año debía cumplir 95 años Marta Ofelia Stutz “Martita Ofelia”, desaparecida en 1938 y de la que, también gracias a la prensa de su tiempo, jamás se volvió a saber.
Ojalá que uno de estos días el niño Loan sea hallado, en un camino vecinal de su provincia o de cualquier otro lugar de la Argentina o el mundo, perdido, sin saber bien qué le pasó o señalando a sus captores, a los culpables. Sería un doble milagro, haberse salvado no solamente de sus captores sino también del estropicio que causó a su búsqueda la prensa y sus “periodistas especializados”, sus pesquisas, sus teorías, su palabrerío vacío de sustancia (sopa sin caracú ni verduras).
¿Qué pienso yo, pregunta? No pienso, amigo, sólo agrego una intención al Rosario de todos los días, a ver si un milagro divino permite hallarlo respirando todavía, como se dijo. Lejos de periodistas interesados en aumentar su audiencia apelando a los más bajos sentimientos de su clientela, perdón, su audiencia, que solamente quiere saber detalles de tinte patológico, sangre, sexo, furia. Y maldad.
Y después pasar al próximo.
Juan Manuel Aragón
A 30 de agosto del 2024, en la Belgrano y Sáenz Peña. Midiendo el aceite.
Ramírez de Velasco®

Comentarios

  1. Oro por Loan cada día. Es lo que podemos hacer desde nuestra humilde humanidad. Y seguimos observando lo injusto de este sistema dominante a costa de vidas inocentes, como en tiempos del Nazareno

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares (últimos siete días)

CARABAJAL Los hermanos no son unidos

La nota en El Liberal La historia al parecer no es como se quiso que apareciera en el diario El Liberal, hay un trasfondo que debe salir a la luz Por Alfredo Peláez, Fredy "Los hermanos sean unidos / porque ésa es la ley primera, / tengan unión verdadera, / en cualquier tiempo que sea, / porque si entre ellos se pelean / los devoran los de ajuera". Los célebres versos del Martín Fierro. Esta nota va a costar escribirla. Porque se trata de dos entrañables amigos. De dos hermanos de la vida. Kali y Musha. Musha y Kali Carabajal. No tenemos la misma sangre, pero es como si la tuviéramos. Amigos de años. Pasajeros del tiempo. Marcelo Jozami publicó hoy en El Libera “LosCarabajal inicia una etapa con nuevos integrantes”, además de la inclusión de instrumentos de percusión y de viento en el afán de volver a una sonoridad de raíz. El cambio más notorio se da en uno de sus tradicionales integrantes, Mario Rolando Carabajal, ”Musha”, quien atraviesa por una delicada situación de salu...

EXCLUSIVO Kali, el que faltaba hablar

Kali Carabajal La voz que faltaba para completar la historia de los Carabajal dijo su verdad en una entrevista que brindó al corresponsal en Mar del Plata Alfredo Peláez, Fredy En el periodismo aprendí a moverme con cautela. A no ir más allá de lo que la circunstancia merece, y no pasar jamás sobre los otros. Nobleza obliga. No podía darle voz al querido amigo Musha y silenciar al otro querido hermano de la vida, Kali, el eterno Carabajal, como alguna vez supe bautizarlo. es el más antiguo del grupo, de la época del mítico Agustín, el fundador. Ya estaba en el baile y no quedaba otra que bailar. Con más dudas que certezas lo llamé a Kali. Al teléfono me respondió: —Hola hermano querido. A vos no te puedo mentir. Musha, mi querido hermano, no se portó bien con el grupo. Mas que Mario, su esposa Miriam. Después de actuar en Cosquín, fuimos a Recreo, Musha ya estaba enfermo y no viajó. Al retornar le dimos su parte. Como correspondía. Como por su enfermedad no podía hablar, nos comunicamo...

1942 AGENDA PROVINCIAL Zurita

Carlos Zurita, y detrás Gilda Roldán y Francisco Santucho El 31 de marzo de 1942 nace Carlos Zurita, sociólogo, poeta, escritor y académico que combina las ciencias sociales con la creación literaria El 31 de marzo de 1942 nació Carlos Virgilio Zurita en Santiago del Estero. Sociólogo, poeta, escritor y académico, tiene una trayectoria que combina el rigor de las ciencias sociales con la sensibilidad de la creación literaria. En Santiago ha dejado una marca significativa en el ámbito intelectual como en el cultural. Su formación académica y su labor profesional lo han convertido en una figura destacada de la Universidad Nacional de Santiago del Estero, en la que ocupó papeles clave y ha contribuido a la institucionalización de las ciencias sociales en la región. Es licenciado en Sociología y obtuvo su doctorado en esta disciplina por la Pontificia Universidad Católica Argentina Santa María de los Buenos Aires. Completó su formación con estudios de posgrado en la Comisión Económica para...

¡SORPRESA! Los docentes de Santiago del Estero son los mejores pagos del país

Celebración del día del Maestro en Santiago Un especialista en educación y economía hizo un análisis de los sueldos de los maestros de todas las jurisdicciones De un informe de Data Clave En un hilo de tuits el economista Alejandro Morduchowicz, experto además en financiamiento educativo, desarrolló un análisis sobre los salarios de los maestros en cada distrito de la Argentina. Y dejó varios datos sorprendentes. El especialista explicó que, en la ciudad de Buenos Aires, el distrito más rico del país, los maestros “ganan un 36,4 por ciento menos que en Santiago, una de las provincias más pobres. Está en el lugar 14”. Del mismo modo, en la provincia de Santa Fe, otra de las más ricas, los maestros cobran 39,5 por ciento menos que sus colegas santiagueños, por lo que se ubican en el lugar 16. Y en otras provincias con suficientes recursos económicos, como Mendoza, los maestros perciban un 46,4 por ciento menos que los de Santiago, por lo que se encuentran en el lugar 20. Y en la provinci...

COSTUMBRES ¿El mate?, amargo por supuesto

El Che, posiblemente con mate amargo Aunque es popular cebarlo dulce, sobre todo en el norte, el que se toma sin azúcar también tiene sus adeptos, sobre todo entre gente sedentaria Cebar mate amargo es otra cosa, amigos. El mate dulce tiene una serie de ritos, ceremonias, etiquetas y cordialidades de las que carece cuando no lleva azúcar ni edulcorante artificial ni miel ni ninguna otra cosa más que agua caliente, ya sea del termo o directamente de la pava, esa Negra con sarro que es la dueña de la cocina en los hogares más humildes de la Argentina. El mate amargo, generalmente bebido en solitario, es la bebida de los que trabajan con las manos, como escritores, mecánicos algunos artesanos. Cuando es dulce en cambio se presta para la charla, el acercamiento de amigos, la cordial invitación a sentarse en amable rueda, la conversación amena, la expansión entre conocidos. Quienquiera que haya visitado el norte de la Argentina, sabrá que en estos pagos es mucho más popular el mate dulce, a...