Ir al contenido principal

1988 AGENDA PROVINCIAL Ávila

Eduardo Ávila, el hijo más conocido de Orlando

El 12 de julio de 1988 muere Orlando Ávila, folklorista y director del conjunto “Los Ávila”, que deja una huella imborrable en la música tradicional

El 12 de julio de 1988 murió Orlando Ávila, destacado folklorista santiagueño y director del conjunto “Los Ávila”, que dejó una huella imborrable en la música tradicional de la provincia.
Nacido en Santiago del Estero, dedicó su vida a la difusión de las tradiciones musicales de la provincia, particularmente la chacarera, género que llevó a diversos escenarios del país. Su liderazgo al frente del conjunto familiar consolidó un estilo auténtico, profundamente arraigado en la cultura santiagueña.
“Los Ávila” se formaron en el seno de una familia apasionada por el folklore. Orlando, como cabeza del grupo, guio a sus integrantes, entre ellos su hijo Eduardo Ávila, conocido como “El Santiagueño”. El conjunto se destacó por interpretar chacareras, zambas y vidalas, géneros que reflejaban la esencia del paisaje y la vida rural de Santiago del Estero. Sus presentaciones combinaban la destreza musical con la calidez de las tradiciones, ganándose el cariño del público.
Además de músico, fue un custodio de las raíces culturales de su tierra. Su trabajo no solo se limitó a la interpretación, sino que también la transmisión de las historias y leyendas santiagueñas a través de la música. Bajo su dirección, “Los Ávila” lograron captar la atención de audiencias más allá de su provincia, participando en festivales que promovían el folklore.
Eduardo Ávila, hijo de Orlando, se convirtió en una figura clave dentro del conjunto y más tarde en su carrera como solista. Conocido por su voz apasionada y su frase característica “meta, meta más”, Eduardo llevó el legado de su padre a nuevos públicos. Su participación en “Los Ávila” fue fundamental para el éxito del grupo, especialmente en piezas que resaltaban el sentir santiagueño.
El conjunto “Los Ávila” se presentó en diversos escenarios del país, en festivales de renombre como Cosquín, donde compartieron su música con otros grandes exponentes del folklore. Orlando, como director, se encargaba de seleccionar un repertorio que destacara las composiciones tradicionales y las creaciones propias, siempre manteniendo la autenticidad del género.
Su muerte marcó un momento de profunda tristeza para el folklore santiagueño. Su partida dejó un vacío en la escena musical, pero su legado perduró a través de las grabaciones de “Los Ávila” y del trabajo de su hijo Eduardo. El conjunto, aunque afectado por la pérdida, continuó siendo un referente del folklore santiagueño.
Eduardo Ávila, tras la muerte de su padre, asumió un papel protagónico en la preservación del legado familiar. Su trayectoria como “El Santiagueño” incluyó la grabación de discos emblemáticos como Santiagueño y Pasión y Misterio de la Telesita, este último en colaboración con Los Carabajal. Su música mantuvo viva la esencia de las enseñanzas de su padre.
La influencia de Orlando Ávila se extendió más allá de su familia, inspirando a otros músicos a explorar y valorar las raíces del folklore santiagueño. Su dedicación a la chacarera y a las tradiciones de su provincia lo convirtió en un símbolo de la identidad cultural del norte.
Las grabaciones de “Los Ávila” siguen siendo un testimonio de la riqueza musical de Santiago del Estero. Las chacareras y zambas interpretadas por el conjunto bajo la dirección de Orlando evocan la vida rural y las leyendas de la región, como “La Telesita”.
Juan Manuel Aragón
Ramírez de Velasco®

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares (últimos siete días)

PROTAGONISTA El abrupto silencio de la Fundación Cultural

Escultura en la plaza del Fórum Cerró sin previo aviso, dejando un legado imborrable y preguntas sin respuesta sobre su valioso patrimonio histórico y creativo Un buen día, sin que nadie lo anunciara previamente, casi diríase con sigilo y entre gallos y medianoche, cesó la Fundación Cultural Santiago del Estero. Es incierto qué sucedió, qué llevó a que esta institución, que tenía un bien ganado y merecido prestigio, terminara sus actividades de un portazo. Y chau, nunca más se la vio por los lugares que solía frecuentar. Según se sabe, era una institución dedicada a promover y preservar el patrimonio cultural, artístico e histórico de la región. Su gerente, desde que se creó en 1990, fue Guillermo Dárgoltz, gestor cultural que imprimió a la institución su propio carácter generoso, amable y atento. Según trascendió, en una provincia con muchas fuentes cerradas a cal y canto, el grupo Ick presidía la Fundación, lo que en cierta manera los redimía frente a una sociedad que es mala, envidi...

HISTORIA No es casita, es el “Caserón de Tucumán”

Mi abuelo empezando la demolición para la futura avenida Tiene una cuadra de largo, es el museo que alberga la sala de la jura de la independencia, única parte antigua que queda en pie Hierven de rabia los tucumanos cada vez que los porteños le dicen “Casita de Tucumán” al histórico lugar en que se declaró la independencia. Como si fuera la única que hay en la provincia, como si el resto fueran nomás montañas, ovejas y paisaje. Es verdad que en un tiempo quedó reducida a la sala de la jura de la independencia, la única parte original que quedó en pie, pero después la reconstruyeron más o menos, como suponen que fue, y la agrandaron bastante, y ahora va de calle a calle, de la Congreso a la 9 de Julio, partiendo en dos la manzana, como para que decirle “casita”, suene medio ridículo. Sería un caserón, más bien. Deberían decirle “Caserón de Tucumán”, porque en la provincia no debe haber otra más grande. Ya se ha contado infinidad de veces que a partir de una vieja fotografía se reconstru...

TUMBACABEZAS Los partidos de Patricia

Patricia Bullrich cuando era joven La ministra de Seguridad de la Nación militó en varios partidos políticos y organizaciones de izquierda, algunas que ejercían el terrorismo y nunca mostró arrepentimiento Patricia Bullrich, nacida el 11 de junio de 1956 en Buenos Aires, estuvo afiliada a diversos partidos y organizaciones. Su carrera comenzó en la década de 1970, cuando se involucró en la Juventud Peronista, específicamente en el grupo Columna Norte, vinculado a Montoneros, organización guerrillera (terrorista), peronista. Durante este período, participó en actividades políticas que la llevaron al exilio en 1977. Pero se distanció de Montoneros en 1979, marcando el inicio de su transición hacia la política institucional. Nunca mostró arrepentimiento por el sufrimiento infligido a las víctimas de su militancia terrorista, llegó a decir que había hecho una “profunda autocrítica” de la violencia como acción política, Pero jamás dijo estar arrepentida. Porque “arrepentimiento” es mala pal...

¡MANICOMIO! Rosarito no se achica

Chiste Mi sobrina, futura psicóloga, enfrentará clichés absurdos sobre su profesión, pero con estos chistes los hará trizas A mi sobrina Rosarito le faltan pocas materias para recibirse de psicóloga y, aunque ya debe saberlos, aquí van algunos prejuicios sobre los psicólogos que quizás deba enfrentar durante toda su vida, si ya no los está experimentando Al final también van unos cuantos chistes. “Sólo tratan a los locos”, dicen por ahí, como si la locura fuera una categoría mensurable, como si se preparan durante largos y duros años, solamente para trabajar en los manicomios. Muchos hombres quizás le huirán a mi sobrina, eso que es muy linda como todas las hijas de mis hermanos, porque “siempre están analizando a todo el mundo”. Y no amigo, el futbolista no almuerza haciendo gambetas, el abogado no está viendo qué leyes infringen sus amigos y el matemático no va por la vida haciendo multiplicaciones, pero, en fin, son creencias comunes, ¿no? “Son charlatanes pseudocientíficos”, ah, si...