Ir al contenido principal

CUENTO Yo, o sea yo

Buenos Aires, imagen de JMAragón

Qué pasa si algún día alguien se topa con quien toda su vida creyó que podría haber sido y no fue, o algo así

Nací el día de san Antonio de Padua, mis padres, que ya tenían decidido ponerme Juan, dudaron un poco, Antonio el paduano siempre fue un santo poderoso. Al final, me pusieron el que tengo, común y corriente, el más extendido, hasta hace un tiempo al menos, entre los que hablan en español.
De todas maneras, mi otro yo es Antonio, siempre fui Antonio, mi seudónimo es Antonio. Yo soy Antonio, vivo en Buenos Aires, estoy casado con Milena y tengo tres hijos: Antonito, Zoraida y Gustavo. Antonio empezó la carrera de dirección de cine y se fue a vivir solo, al centro, con la notiva, Zeta, así le dijimos siempre en casa a Zoraida, es mi regalona y Gustavo es un vago como no hay dos, este ciclo lectivo tampoco pasará a tercer año de la secundaria y no lo llevaremos a Mar del Plata: se quedará estudiando, aquí en Buenos Aires, si no aprueba en marzo, le cortaré los víveres.
Con Milena nos llevamos todo lo bien que se puede llevar una pareja en Buenos Aires, ciudad de pobres corazones solitarios y de locos de atar. A veces sospecho que alguna vez me ha metido los cuernos, no tengo pruebas, pero sí una certeza imbatible, aunque ya nunca lo averiguaré. Sé que no diría nada, aunque la traten de obligar con un fierro caliente, pero no me importa.
Además, estoy casi seguro de que sabe de mis escapadas con Leticia, así que estaríamos a mano. Leticia es otra cosa, todo lo que en Milena es dureza de corazón en ella es tibieza, lo que mi mujer rechaza la otra ama de corazón, las plantas, los animalitos, sueña con una vida en el campo y se entusiasma con que uno de estos días, cuando los hijos de ambos estén grandes, ella dejará a su marido, o a mi mujer y nos iremos a vivir a cualquier parte: Chascomús, Tandil, Trenque Lauquen, qué sé yo.
Cada vez que tomo una decisión importante, me pregunto qué haría el otro yo de mi otro yo, en Santiago del Estero. Después de plantearle el divorcio a Milena, y antes de hacer cualquier otra cosa, viajaré a buscarlo. En una de esas es alguien real, de carne y hueso. Pero también podría ser un personaje de ficción, ideado para escapar de mi vida de burócrata porteño, encerrado ocho horas de lunes a viernes, tomando el subterráneo a las disparadas para llegar a la oficina, escapándose a media mañana para ver a la mujer que realmente ama. Aguardando con terror los fines de semana, porque debo convivir con la realidad de siempre, en una chatura y un aburrimiento oscuros o solamente grises.
Mientras miro los techos de los edificios vecinos por la ventana de mi trabajo, y huelo ese rancio tufo a encierro de casi todas las oficinas, calculo que en una de esas el otro es periodista, un tipo de pasos cansinos y cielos azules pegados a su infancia. Quizás sea un fiel esposo de su señora, una tal Marcela, con dos hijos de nombres simples y comunes, una bicicleta vieja para recorrer las calles de Santiago del Estero, casa sencilla, sin auto y sin perro. Un Juan de los Palotes cualquiera.
No sé qué micro hay que tomar para ir a Santiago del Estero ni para qué lado queda, en la primaria estudié el mapa de la Argentina, pero ya no me acuerdo, ¿es en la misma terminal de los que van a Mar del Plata y Miramar?, ¿hace calor allá?, ¿se ven burritos en las calles?, ¿la gente se viste como nosotros o tengo que comprar ropa especial para pasar desapercibido?, no tengo idea.
Tampoco qué decirle, de qué conversar, qué hablar, qué preguntas hacerle si lo encuentro. Pero algo se nos va a ir ocurriendo, seguro.
©Juan Manuel Aragón
A 25 de octubre del 2023, en el Uluas. Mateando con chipaco

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares (últimos siete días)

1988 AGENDA PROVINCIAL Ávila

Eduardo Ávila, el hijo más conocido de Orlando El 12 de julio de 1988 muere Orlando Ávila, folklorista y director del conjunto “Los Ávila”, que deja una huella imborrable en la música tradicional El 12 de julio de 1988 murió Orlando Ávila, destacado folklorista santiagueño y director del conjunto “Los Ávila”, que dejó una huella imborrable en la música tradicional de la provincia. Nacido en Santiago del Estero, dedicó su vida a la difusión de las tradiciones musicales de la provincia, particularmente la chacarera, género que llevó a diversos escenarios del país. Su liderazgo al frente del conjunto familiar consolidó un estilo auténtico, profundamente arraigado en la cultura santiagueña. “Los Ávila” se formaron en el seno de una familia apasionada por el folklore. Orlando, como cabeza del grupo, guio a sus integrantes, entre ellos su hijo Eduardo Ávila, conocido como “El Santiagueño”. El conjunto se destacó por interpretar chacareras, zambas y vidalas, géneros que reflejaban la esencia ...

TUMBACABEZAS Los partidos de Patricia

Patricia Bullrich cuando era joven La ministra de Seguridad de la Nación militó en varios partidos políticos y organizaciones de izquierda, algunas que ejercían el terrorismo y nunca mostró arrepentimiento Patricia Bullrich, nacida el 11 de junio de 1956 en Buenos Aires, estuvo afiliada a diversos partidos y organizaciones. Su carrera comenzó en la década de 1970, cuando se involucró en la Juventud Peronista, específicamente en el grupo Columna Norte, vinculado a Montoneros, organización guerrillera (terrorista), peronista. Durante este período, participó en actividades políticas que la llevaron al exilio en 1977. Pero se distanció de Montoneros en 1979, marcando el inicio de su transición hacia la política institucional. Nunca mostró arrepentimiento por el sufrimiento infligido a las víctimas de su militancia terrorista, llegó a decir que había hecho una “profunda autocrítica” de la violencia como acción política, Pero jamás dijo estar arrepentida. Porque “arrepentimiento” es mala pal...

MATRIMONIO ¡Jugando a Ganar!

Familia de antes Mientras el mundo hace malabares con lo obvio, la unión de él y ella sigue siendo el as bajo la manga de la familia Lo obvio pasó a ser una categoría revolucionaria. Hace 30 años, usted decía: —Carlos está de novio. Si le preguntaban con quién, podía responder —Con una mujer, por supuesto. Era un valor sobreentendido: el noviazgo solía ser una etapa previa al matrimonio, que, a su vez, era la unión de un hombre y una mujer para formar una familia y propagar la especie. ¿De qué otra manera, uniendo espermatozoides masculinos con un óvulo femenino, se consigue crear otra persona? Además, es un trabajo divertido. En su infinita sabiduría, Dios hizo que el acto de fecundar sea placentero y mur entretenido para ambos. Por eso, buscan relacionarse de muchas maneras que ofrece la vida social. No es solo un toro olfateando una vaca y repitiendo esa acción múltiples veces. Hombres y mujeres tienen diversas formas de conocerse, pero, al carecer del olfato de los animales, intent...

RELACIONES Amor a prueba de balas

Pampita Abraza sus rarezas y las tuyas con garra: solo así forjarás un amor épico que resistirá todo Si alguien dice: “Amo a mi mujer, aunque sea gritona, hable mucho o no sepa cocinar”, tal vez no la ama de verdad. En ese caso, parece que uno se ama a sí mismo en el reflejo de ella. Porque los defectos —los de ella y los propios—siempre están ahí, son parte del combo. Hay que aceptar que, si vienen de lo más profundo, no desaparecerán por mucho esfuerzo que se haga. Lo mejor, aunque no soy experto en estos temas, es quererla precisamente por esas manías, ponele, no a pesar de ellas. Si sus caprichos te resultan insoportables y sientes que no podrás seguir a su lado, dejala. Esa mujer no es para vos. Imagina que sos un tipo sencillo, conforme con tu vida sin lujos, tranquilo en la mediocridad de un barrio cualquiera. Ella sueña con alguien que le dé una vida que no puedes ofrecer. Si ceder te hace sentir menos, es hora de decir adiós. Imaginá que Pampita te da algo de bola. No es para ...

FOTOCOPIAS El alma de Macario

Libros viejos Hojas gastadas guardan verdades únicas, salvadas por amigos de la codicia familiar Entre los papeles que dejó en su escritorio Macario Retamar, había un bosquejo de diccionario personal que los amigos rescataron casi como papel viejo, de la voracidad de los parientes supérstites. Durante muchos años anduvo de mano en mano, en viejas fotocopias de fotocopias. Ahora salen a la luz gracias a la generosidad de un conocido, que conservó una, arrugada en algunas partes y borrosa en otras, pero siempre legibles. Aquí va, como un regalo para quienes lo conocieron. Bien . Qué es bien, qué es mal. Bien es que un chico cumpla años de noviembre de un año a junio del siguiente. Julio, agosto y setiembre son mal, porque entonces irá medio atrasado a la escuela, será el más grande del grado, o el más chico si la madre consigue una cuña para inscribirlo antes. Como es sabido, el horóscopo, los signos, determinan la educación de los niños. Bolonia. San Martín pasó sus últimos años en Bol...