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622 ALMANAQUE MUNDIAL Hégira

¿Mahoma?

El 20 de septiembre del 622 es la Hégira, o migración de Mahoma de La Meca a Yatrib, punto de inflexión en la historia del islam y su consolidación

El 20 de septiembre del 622 fue la Hégira, o migración de Mahoma desde La Meca hacia Yatrib, más tarde conocida como Medina. Fue un punto de inflexión en la historia del islam y su consolidación como una religión y movimiento político. Este evento no fue simplemente una huida, como a veces se interpreta erróneamente, sino una migración estratégica para preservar las enseñanzas de Mahoma y establecer una comunidad que abrazara el islam.
Antes de la Hégira, Mahoma había comenzado a predicar sus enseñanzas monoteístas en La Meca, una ciudad que para entonces era un centro importante de comercio y culto religioso. La Meca albergaba la Kaaba, un santuario sagrado para los árabes politeístas, que atraía a peregrinos de toda la península árabe. Las enseñanzas de Mahoma desafiaban directamente el politeísmo, lo que provocó la ira de los líderes coraichitas, la tribu dominante en la ciudad. Estos caciques, preocupados tanto por el impacto religioso como por las posibles pérdidas económicas, comenzaron a perseguir a Mahoma ya sus seguidores.
La situación en La Meca se volvió insostenible para la incipiente comunidad musulmana. A medida que la hostilidad de las coraichitas aumentaba, muchos de los seguidores de Mahoma sufrieron persecuciones y castigos.
Antes de partir, Mahoma tomó medidas para despistar a los coraichitas, quienes habían decidido asesinarlo. En lugar de escapar de inmediato, dejó a su primo, Alí, durmiendo en su cama para que sus enemigos creyeran que él seguía en la ciudad. Mientras tanto, partió junto a su fiel compañero Abu Bakr en dirección a Yatrib. Durante el trayecto, ambos se refugiaron en una cueva en el Monte Thawr. Según la tradición islámica, en la entrada de la cueva apareció una telaraña y una paloma anidó cerca de allí, lo que hizo que los coraichitas que los perseguían pensaran que nadie podía haber entrado recientemente en ese lugar, salvando así a Mahoma y Abu Bakr de ser capturados.
Una vez que llegó a Yatrib, Mahoma fue recibido con los brazos abiertos por sus habitantes. La ciudad, que había estado en medio de luchas internas durante años, lo vio como un líder capaz de restaurar la paz. Se firmó un pacto, conocido como la Constitución de Medina, que establecía las bases de una comunidad, o umma, integrada por musulmanes, judíos y otros habitantes de la ciudad. Este acuerdo regulaba las relaciones entre los diferentes grupos y promovía la convivencia pacífica bajo el liderazgo de Mahoma.
La Hégira no solo significó un cambio geográfico, sino que también transformó la estructura de la comunidad islámica. La umma que se creó en Medina se convirtió en un modelo de sociedad organizada bajo las leyes y enseñanzas del islam. Los musulmanes de La Meca que emigraron con Mahoma fueron llamados Muhajirun, mientras que los habitantes locales que los recibieron y adoptaron el islam fueron conocidos como los Ansar o "ayudantes". Esta distinción entre migrantes y ayudantes refleja la importancia de la cooperación y el apoyo mutuo en los primeros años de consolidación del islam.
A partir de la Hégira, el Corán también comenzó a reflejar el cambio en las prioridades de la comunidad musulmana. Mientras que los primeros versos, conocidos como los versos Makki , revelados en La Meca, se centraban en cuestiones espirituales y de fe, los versos posteriores, llamados Mediníes , comenzaron a tratar temas legales, sociales y políticos. En Medina, el islam pasó de ser una religión centrada en la adoración personal a convertirse en un sistema integral que regulaba todos los aspectos de la vida, desde las relaciones interpersonales hasta la organización militar.
En los años siguientes a la Hégira, Mahoma y sus seguidores se vieron envueltos en varios conflictos militares con las coraichitas de La Meca. Los musulmanes, aunque en un principio eran inferiores en número, lograron una victoria significativa en la Batalla de Badr en el año 624. Este enfrentamiento, en el que los musulmanes derrotaron a un ejército coraichita mucho más grande, se convirtió en un símbolo de la protección divina sobre los creyentes. Sin embargo, al año siguiente, en la Batalla de Uhud, los musulmanes sufrieron una derrota dolorosa. A pesar de esta pérdida, la comunidad islámica continuó creciendo en fuerza y ​​número.
En el año 627, tuvo lugar la Batalla de la Trinchera, o al-Khandaq , en la que los musulmanes, siguiendo una táctica novedosa para la región, construyeron una trinchera alrededor de Medina para repeler a un ejército coraichita que intentaba sitiar la ciudad. Esta estrategia resultó exitosa y marcó un punto de inflexión en la guerra entre los musulmanes y los coraichitas. A partir de ese momento, Mahoma consolidó su posición como líder no solo religioso, sino también militar y político.
El ascenso de Mahoma en Medina también llevó al deterioro de las relaciones con las tribus judías que habitaban la ciudad. Inicialmente, las tribus judías habían aceptado el liderazgo de Mahoma bajo el pacto de la Constitución de Medina, pero con el tiempo, surgieron tensiones y acusación de traición. Los judíos fueron acusados ​​de aliarse con los enemigos de los musulmanes, lo que llevó a que fueran expulsados ​​de la ciudad o exterminados. Este proceso de expulsión y eliminación de las tribus judías consolidó aún más la autoridad de Mahoma sobre Medina.
Finalmente, en el año 630, Mahoma lideró un ejército hacia La Meca y conquistó la ciudad prácticamente sin resistencia. La Kaaba, que anteriormente había sido un centro de culto politeísta, fue purificada y convertida en el santuario principal del islam. Este evento marcó el triunfo definitivo de Mahoma sobre sus enemigos y la consolidación del islam como la religión dominante en Arabia.
La Hégira, además de su importancia histórica, se convirtió en el punto de referencia para el calendario islámico. Fue el segundo califa del islam, Úmar ibn al-Jattab, quien decidió que el calendario musulmán comenzara a contar desde la migración de Mahoma a Medina. Este calendario se basa en el ciclo lunar y tiene 354 días por año, lo que significa que los años islámicos son más cortos que los años solares. Cada 33 años lunares corresponden a aproximadamente 32 años solares, lo que provoca un desfase en las fechas entre el calendario gregoriano y el islámico.
La Hégira no solo permitió a Mahoma y sus seguidores escapar de la persecución en La Meca, sino que también marcó el comienzo de una nueva era para el islam. La migración a Medina consolidó la comunidad musulmana, permitió el establecimiento de un sistema legal y político basado en las enseñanzas del islam, y sentó las bases para la expansión de la religión por toda la península arábiga y más allá. La Hégira sigue siendo uno de los eventos más importantes en la historia del islam, recordado cada año por millones de musulmanes en todo el mundo.
Juan Manuel Aragón
Ramírez de Velasco®

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