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1874 CALENDARIO NACIONAL Mar del Plata

La playa de antaño

En esta fecha de 1874 el gobierno de la provincia de Buenos Aires, le reconoció a Patricio Peralta Ramos, un pueblo que había en sus tierras


El 10 de febrero de 1874 Patricio Peralta Ramos fundó Mar del Plata. En el sudeste de la provincia de Buenos Aires, sobre la costa del mar argentino, es la cabecera del partido de General Pueyrredón, importante puerto y balneario y el segundo destino turístico del país después de Buenos Aires.
En época de verano su población llega a engordar hasta el 301 por ciento, gracias a la gran cantidad hoteles y otros servicios. Desde Buenos Aires se llega por la ruta provincial 2, después de 404 kilómetros y queda a 368 kilómetros de La Plata.
El primer español que llegó a sus costas fue Fernando de Magallanes, quien en febrero de 1519 la bautizó como Punta de Arenas Gordas. Juan de Garay hizo la primera entrada por tierra entre 1581 y 1582, pero ninguna dejó una población permanente. El primer intento estuvo a cargo de los jesuitas Matías Strobel, Tomás Falkner y José Cardiel, que en 1747 establecieron una misión jesuítica a orillas de la Laguna "Las Cabrillas", hoy conocida como Laguna de los Padres. Los jesuitas abandonaron el lugar el 1 de septiembre de 1751.
En 1857 un consorcio brasileño-portugués adquirió tierras en la desembocadura del arroyo Las Chacras, actual playa de Punta Iglesias, e instaló un saladero. Comenzó a ser llamado “Puerto de la Laguna de los Padres” y poco a poco se concentraron algunas familias. La decadencia de la actividad saladeril, llevó a que el negocio no continuase y una parte de esas tierras fueron compradas por Patricio Peralta Ramos.
Cuando Peralta se hizo cargo de las tierras comenzó gestiones en 1873 ante el gobierno de la provincia para que se reconociera el pueblo "Puerto de la Laguna de los Padres" en sus tierras. La solicitud tuvo respuesta favorable y el 10 de febrero de 1874 el gobernador de Buenos Aires, Mariano Acosta, firmó el decreto reconociendo al nuevo pueblo dentro del partido de Balcarce, que recibe a pedido de Peralta el nombre de Mar del Plata.
El 15 de octubre de 1879, el gobierno provincial autorizó la creación del partido de General Pueyrredón, luego de dividido el Partido de Balcarce.
En 1877 llegó a Mar del Plata Pedro Luro, que se hizo cargo del saladero y la grasería, instaló un molino y construyó un nuevo muelle, dándole impulso a la agricultura de la región.
El 26 de septiembre de 1886 llegó el ferrocarril, conectándola con la capital del país, con lo que comenzó una lenta transformación. El tren ayudó a mover a la gente que elegía este lugar para trabajar y habitar todo el año.
Hasta la década de 1930, Mar del Plata fue convirtiéndose en un balneario de gente pudiente. Las familias adineradas tomaban sus vacaciones en la ciudad de noviembre a Semana Santa. Convivían los que vecinos permanentes y los residentes de carácter temporario.
Luego aparecieron los hoteles sobre la costa, los chalets y mansiones, que fueron poblando la loma recostada sobre el mar entre la Playa Bristol y el Torreón del Monje, que todavía hoy son admiradas por los visitantes. Algunas casas sobrevivieron, como el chalet de Ana Elía Ortiz Basualdo, de Colón y Alvear (ahora museo de arte Juan Carlos Castagnino), la casa de Victoria Ocampo y la quinta de Emilio Mitre, actualmente Archivo Histórico Municipal.
Desde el año 30 el gobierno de la provincia de Buenos Aires, llevó adelante varias obras públicas. En 1938 pavimentó la ruta 2, y en 1941 construyó el balneario en Playa Grande tirando abajo la Rambla Bristol y levantando allí dos edificios gemelos, el Casino y el Hotel Provincial.
En las décadas de 1950 y 1960 “La feliz” fue creciendo, y pasó de ser un destino veraniego de las clases pudientes a ser la capital del turismo popular: aparecieron turistas de los sectores sociales de clases medias, que también querían un lugar en Mar del Plata. Aparecieron los rascacielos y los hoteles sindicales.
Con más de mil hoteles, noventa balnearios, cientos de departamentos en alquiler y millones de visitantes por temporada, la ciudad llegó a su apogeo en la década de 1960 y continúa siendo el destino favorito de los turistas que eligen esta ciudad a la hora de veranear.
©Juan Manuel Aragón

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