Ir al contenido principal

1887 ALMANAQUE MUNDIAL Karloff

Boris Karlof

El 23 de noviembre de 1887 nace Boris Karloff, actor que se hizo famoso internacionalmente por su interpretación de Frankenstein


El 23 de noviembre de 1887 nació William Henry Pratt, más conocido como Boris Karloff, en Londres, Inglaterra y muerto el 2 de febrero de 1969 en Midhurst, West Sussex. Fue un actor que se hizo famoso internacionalmente por su simpática y escalofriante interpretación del monstruo en el clásico film de terror Frankenstein, rodado en 1931.
Era el menor de nueve hijos de Edward y Eliza Pratt, reprobó deliberadamente un examen del servicio consular para seguir una carrera en la actuación. Navegó a Canadá en 1909 y al año siguiente se unió a una compañía de teatro itinerante.
Extra de cine y actor de teatro desde 1918, interpretó papeles menores en películas mudas hasta que obtuvo reconocimiento por su interpretación de un convicto convertido en asesino (un papel que había interpretado en Broadway en 1930, en la película sonora El Código Penal, de 1931.
Cuando Bela Lugosi rechazó el papel del monstruo en la adaptación de Universal Pictures de Frankenstein, de Mary Shelley, una de las primeras películas de terror importantes de Hollywood, contrataron a Karloff para el papel. La película fue una sensación, y la tierna y comprensiva actuación de Karloff recibió tantos elogios de la crítica que se convirtió en una sensación de la noche a la mañana.
Luego protagonizó una sucesión de películas aterradoras como La vieja casa oscura y La momia y el nombre “Karloff” se convirtió en sinónimo de terror y lo macabro; para algunas películas de Universal de la época, se lo tomó únicamente por su apellido.
Repitió el papel del monstruo de Frankenstein dos veces, en las secuelas de gran prestigio La novia de Frankenstein de 1935 y El hijo de Frankenstein de 1939, y formó equipo con su colega estrella de terror Lugosi en varias películas, entre ellas El gato negro, El cuervo y El ladrón de cadáveres.
Karloff también obtuvo un gran éxito en Broadway con la comedia Arsénico y encaje viejo y actuó con frecuencia en la radio en la década de 1940 en programas escalofriantes como Luces apagadas y santuario interior.
Siguió actuando en el género de terror durante el resto de su carrera, aunque asumió otros papeles, incluido el del señor Wong en una serie de detectives de Monogram Studios de las décadas de 1930 y 1940 y el de un jefe indio en Invicto de cecil B. DeMille.
Más típicamente, interpretó a médicos y científicos locos, como en Viernes Negro y La Casa de Frankenstein. También tuvo otro éxito teatral en 1950, como el Capitán Garfio en la reposición de Peter Pan en Broadway.
La popularidad de las películas de terror disminuyó en la década de 1940, y Karloff comenzó a trabajar en televisión ya en 1949. Fue estrella invitada en muchos programas de antología y presentó varios programas propios, incluido el popular Thriller, entre 1960 y 1962. Su actuación televisiva más famosa fue en el especial animado Cómo el Grinch robó la Navidad, para el que proporcionó las voces tanto del Grinch como del narrador. Más tarde ganó un premio Grammy por su grabación de audio de la historia del Dr. Seuss.
Cuando el género de terror comenzó a resurgir en la década de 1960, la carrera de Karloff floreció una vez más. Películas como El cuervo, La comedia de los terrores y ¡Muere, monstruo, muere! presentó al septuagenario Karloff a una nueva generación de cinéfilos.
Aunque estaba enfermo y con un dolor constante, hizo una aparición memorable y digna como una estrella de terror envejecida en la primera película de Peter Bogdanovich, Targets de 1968. En ésta, como en la mayoría de sus películas, Karloff, con su voz suave y su comportamiento amable, demostró que el horror se transmite más eficazmente a través de la subestimación y la tranquila dignidad.
©Juan Manuel Aragón

Comentarios

Entradas populares (últimos siete días)

STEINER El periodista que narró la guerra con precisión y sin concesiones

Natalio Steiner Una voz mostró la crudeza del conflicto desde el primer día, en medio de un escenario confuso, polarizado y sangriento Pocos días después del 7 de octubre de 2023, cuando los terroristas de Hamás perpetraron una incursión feroz y despiadada en territorio israelí, una voz periodística en español —la del argentino israelí Natalio Steiner— comenzó a mostrar con crudeza sin precedentes lo que se avecinaba en la región. Lo hizo con la precisión de quien entiende que la información, en medio de una guerra, puede ser decisiva. El mundo hispanohablante conoció hora a hora lo que ocurría en Israel a través de su grupo de difusión de WhatsApp. Su trabajo no conoció pausas ni descansos. Antes de las seis de la mañana, los teléfonos de sus seguidores ya tenían al menos una noticia suya. Tal vez porque en Medio Oriente el día comienza varias horas antes, tal vez porque la urgencia de informar no admite demoras. Algunas veces incluso envió sus informaciones en sábado, si la gravedad ...

MILITANCIA Voten al abecedario

Los que no tranzan La consigna escrita con rebeldía gramatical expone que, antes de levantar banderas, convendría aprender a escribirlas sin tropezar El diccionario de la Real Academia Española de Letras define “transar”: dice que es transigir, ceder, llegar a una transacción o acuerdo. Por las dudas, dice cuáles son sus sinónimos: ceder, transigir, cejar, claudicar, conceder, acceder, consentir, condescender, permitir, tolerar.  También dice qué significa “tranzar”, es cortar, tronchar o también entretejer tres o más ramales cruzándolos alternativamente para formar un solo cuerpo alargado. Un panfleto que pasó el Movimiento Socialista de los Trabajadores por debajo de la puerta de casa, es confuso o tiene mala ortografía.  Si se piensa bien de quienes lo lanzaron: “Vota a quienes defienden tus derechos y no ´tranzan´”, lo que quisieron decir es que ellos no van tejer entre los derechos, cortándolos para formar una cosa alargada… o algo así, medio confuso, ¿no? Ahora, si se pi...

PERLITAS Cómo parecer más léido (un poquito nomás)

Perón y su esposa Potota Novias, hijos, amores, nombres, lugares, cambios y muchos otros datos para pasar por culto en un sarao importante Así como en otras publicaciones se entregan claves para parecer más joven, más lindo, más exitoso, aquí van algunas perlitas para darse dique de culto. San Martín era José Francisco de San Martín y Matorras. El nombre de Belgrano era Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús. Y fue padre de Pedro Rosas y Belgrano y de Manuela Mónica Belgrano, ambos nacidos fuera del matrimonio. No se casó nunca. Rivadavia, el de la avenida, era Francisco Bernardino Rivadavia y Rodríguez de Rivadavia. ¿Yrigoyen, pregunta?: Juan Hipólito del Corazón de Jesús y el de su tío, Alem, no era Leandro Nicéforo como repiten quienes se dan de eruditos radicales sino Leandro Antonio. Juan Bautista Alberdi dijo “gobernar es poblar” y se quedó soltero. Es el prócer máximo de los abogados y le regalaron el título en la Universidad de Córdoba, en la que no cursó ni una materia. Corn...

El abecedario secreto de los santiagueños (historia juarista)

Juárez asume la gobernación Cómo fue que mucha gente de esta provincia llegó a intervenir en el propio lenguaje y cambiar una letra por otra, en esta nota de nuestro director, que hoy publica Info del Estero . El giro que da esta historia lo sorprenderá amigo. Lea aquí cómo se gestó este particular suceso. Ramírez de Velasco® https://infodelestero.com/2025/10/22/el-abecedario-secreto-de-los-santiaguenos-historia-juarista/

DESCARTE La fragilidad es una condena

Eutanasia En el Canadá, la eutanasia se lleva miles de vidas al año en nombre de la compasión y la autonomía, pero esconde una peligrosa lógica En el Canadá de hoy, morir por eutanasia no es una excepción: es una práctica en expansión. Desde que se legalizó, se ha cobrado más de 90.000 vidas. Solo en el 2024, el 5 por ciento de las muertes en el país fueron por esta vía. Las cifras crecen de año en año, y con ellas también crece un modo de pensar que se disfraza de compasión, pero que responde a una lógica inquietante: la cultura del descarte. Esa cultura considera “desechables” a los sectores más débiles: los ancianos, los enfermos crónicos, los que no se valen por sí mismos. En la legislación canadiense, se incorporó la “fragilidad” como uno de los criterios para acceder a la eutanasia. No se trata de una enfermedad terminal ni de un dolor insoportable, sino de una condición relacionada con la edad o con la salud deteriorada. Es decir, con el solo hecho de ser vulnerables. Según cifr...