Ir al contenido principal

LEYENDA La paloma de los campesinos

"Esquivando las gotas de lluvia", de Jorge Llugdar

Habita en lo más profundo de los saladillos y es conocida por sus dudas e indecisiones: aquí una breve descripción de su vida y su obra


La “quequé” es una paloma santiagueña que hace casa —según los ornitólogos más acreditados —en lo profundo de los saladillos de la provincia. Es conocida porque siempre duda de lo que hizo, de lo que debe hacer, de su vida, de la muerte, del andar andando o el estar siendo. Cuando se posa, salta de rama en rama, irresoluta entre quedarse en la que está o mandarse a mudar a la vecina. Sabido es que algunos días se alimenta de pequeños insectos, otras veces prefiere las semillas de las plantas y casi siempre hace ayuno absoluto, quizás porque le cuesta decidirse entre una dieta puramente vegetariana o darle nomás para adelante con las carnes rojas, blancas o negras, porque también se la suele ver, vacilando, alrededor de las osamentas.
Cuando Dios andaba creando el mundo, a cada pájaro que andaba por los montes santiagueños le daba una forma particular de ser o una habilidad propia. Así hizo los negros cuervos para que coman toda osamenta que hiede sobre los campos, la garza es un copo de algodón vistiendo las lagunas, el hornero es el albañil de los montes y el pájaro carpintero, como su nombre lo indica, se encarga de construir sillas y mesas para todos los demás.
Antes la paloma era más conocida por los campesinos, sobre todo cuando existían esos intrépidos cazadores que salían en busca de provisiones o en el invierno se aventuraban por las soledosas y blancas llanuras santiagueñas, pillando pichis, quirquinchos, peludos, mulitas y otros cascarudos. Con el advenimiento de la comida en bolsas de plástico, los hombres de campo dejaron de cazar, prefirieron quedarse en sus casas y ahora optan por meditar a la orilla del brasero, cacheteando sapos, mirando los Pitufos en la tele, antes que andar por esos campos, sabiéndose los reyes de la creación.
Cuando le llegó el turno a la paloma quequé, justo vinieron a distraerlo los otros animales con un problema que tenían. Dios después tuvo que irse a otros pagos a seguir con su trabajo y se olvidó de la amiga. Y cuando vio que todo estaba bien y quiso corregir lo que había hecho, ya era tarde para volverse atrás y la dejó como estaba.
Aunque nadie repare en ella, la paloma siempre perpleja y dudosa, va un rato para el norte, otro para el sur, volando o se posa en alguna rama del siempre verde jume, del triste churqui o del escaso y enhiesto quebracho colorado. Un rato está alegre y dicharachera, otro rato está triste y pensativa, un día amanece cantando y al siguiente, llora desconsolada. Y así anda todo el tiempo.
De ella extraía parte de su sabiduría el antiguo hombre de campo, que nunca expresaba qué pensaba y escondía sus pensamientos tras otra pregunta o evasivas que nunca dejaban ver qué pensaba, porque unos días era una cosa, otros otra. No era timidez, sino que su mente andaba de una rama en otra, cavilando sobre posibles respuestas. De tal manera que en ocasiones estaba varios años pensando en asuntos de la vida, la muerte, el amor o el alambre San Martín como una solución para evitar los portillos en el cerco de los terneros.
En su infinita sabiduría Dios no quiso mandar que se extinguiera, la dejó como una enseñanza de lo que debe ser el campesino, un hombre al que, de primera vista, nadie le conozca el pensamiento, así puede dedicarse a trabajar, a la familia, a los hijos, a la casa, antes que andar politiqueando por los caminos.
Mientras usted lee esta nota, en el fondo de un saladillo del departamento Loreto, en la lejanía de las Salinas Grandes o tal vez perdida en un viejo camino de carros del departamento Jiménez, la confusa paloma lanzará su canto, preguntándole a la vida sobre la esencia misma de su ser.
Y Dios está contento, porque cada grano de arena, cada piedra, cada montaña, los animales, los hombres y sus quereres y desamores tienen una razón de ser que él conoce, aunque al hombre le parezcan extrañas. Incluso para quienes no creen en él, lo odian o lo escupen.
Juan Manuel Aragón
A 29 de abril del 2024, en Abra Grande. Esperando el feriado.
©Ramírez de Velasco

Comentarios

  1. Bueeeenásss soy Pilpinto Santos y vengo pechando despaciiito. No se si Dios se pone contento cuando los crestianos se comparan con los animale . Hoy les dejo este cuento de una pareja de enamorados.
    El chango la hace aflojar a la chica y van a los hechos , ella le ve el comosellama y le dice: mmm habias tenido como caballo , el ganador responde : ¿vos decis, grande que no ? la chica le dice: no mi amor CASCARUDO ja ja ja . Feliz día del animal.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares (últimos siete días)

EFEMÉRIDES SANTIAGUEÑAS Del 8 de julio

¿Mengele o Ascher? En 1985, el juez del crimen de La Banda empieza un expediente para dilucidar si un criminal nazi había vivido en esa ciudad El 8 de julio de 1985, el juez del crimen de La Banda Andrés Francisco Miotti inicia una investigación para saber si Gualterio o Walter Ascher era el criminal de guerra nazi José Mengele. Unos días antes, el diario El Liberal había publicado una sensacional historia, casi una confirmación de la leyenda urbana que sostenía que un criminal de guerra nazi, había vivido en La Banda con un nombre supuesto. Walter o Gualterio Ascher había vivido en La Banda entre fines de la década del 40 y principios del 50 y se sospechaba que podría haber sido un nazi prófugo de los tribunales de Núremberg. Para iniciar su investigación, el fotoperiodista Jesús del Carmen Martínez, conocido como “Chito”, amplió una fotografía de Mengele, tomada de un libro sobre la II Guerra Mundial y la mostró a quienes decían haber conocido a Ascher. Les preguntaba si sabían ...

TRENES Voces de madrugada

Johny Barrionuevo canta en el Urquiza Un cantor santiagueño recorre el Roca llevando canciones del alma, recuerdos del pago y la memoria de los amigos que quedaron atrás Todos los días salgo de mi casa, Pellegrini 1458, Burzaco, bien de madrugada. Trabajo en el tren Roca, pero no soy ferroviario. Soy el que ameniza el viaje de los pasajeros, cantando canciones que quizás les quedaron prendidas en el alma como abrojo en la tira de las zapatillas, y les recuerdo su infancia, su juventud, allá lejos, algún bosque norteño, con los parientes que se quedaron para siempre jóvenes en sus pensamientos. También voy a fiestas; me llaman para amenizar asados, celebraciones, esas cosas. Fue mucho mi penar andando lejos del pago Tanto correr pa' llegar a ningún lado Y estaba donde nací lo que buscaba por ahí. Me despierto a las cinco de la mañana y a las seis y media ya estoy en el tren, siempre cantando lo mismo. "La del Puente Carretero" y "Añoranzas" no pueden faltar; cuan...

ÉPOCA Viejos son los viejos

Un viejo Uno tiene solamente la edad que marca el almanaque: porque la juventud no es una cuestión de voluntad sino del reloj ¿De qué tiempo sos?, me preguntan a veces mis hijos. No sé, no tengo idea, respondo; de este, creo, y seguirá siendo mi tiempo hasta que me muera. Bueno, de qué tiempo vienes, aclaran, porque ahora son todos de la “generación X”, la “generación Y” o la “generación Z”. No, les digo. Vengo de una época en que a veces los hombres tomaban hasta emborracharse deltodamente y caer desmayados, pero una dama, una señorita, una mujer, a lo sumo sorbía una copita y se alegraba un poco, nada más. No como ahora, que los domingos a la mañana andan tiradas por las calles, y el lunes no sabrán qué hicieron, con quién o con cuántos ni dónde ni —peor todavía— cómo. En esos tiempos una mujer era más bella cuando más mujer era, no cuando se parecía a los hombres; a esas les decíamos “marimachos”, así, redondamente. Vengo del tiempo en que la gente se miraba cara a cara para hablar,...

1927 ALMANAQUE MUNDIAL Bernardini

Micheline Bernardini El 1 de diciembre de 1927 nace Micheline Bernardini, estríper, desnudista, primera mujer que se anima a lucir una bikini en público El 1 de diciembre de 1927 nació Micheline Bernardini en Colmar, departamento de Haut-Rhin, Francia. Fue una estriper, desnudista, de origen italiano, famosa por haber sido la primera mujer que se animó a lucir una bikini en público. Su familia emigró de Italia a Francia en una época en la que los movimientos migratorios entre ambos países eran comunes, especialmente en regiones fronterizas como Alsacia. Desde joven, mostró un carácter audaz y poco convencional, lo que la llevó a trabajar como bailarina exótica en el célebre Casino de París, prestigioso cabaret del número 16 de la Rue de Clichy, en París. Este lugar, fundado en 1890, era conocido por sus espectáculos de variedades y su ambiente atrevido, en el que actuaban artistas que desafiaban las normas sociales de la época con sus actuaciones cargadas de sensualidad y glamour. En 1...

BICHOS Me presento, soy la juanita

Hedionda juanita Breve historia de un molesto bicho que todos los veranos vuelve a los pueblos con su historia a cuestas Yo soy la juanita, así nomás, con minúsculas, porque soy nombre genérico, como león, torcaza, omeprazol. Nada de delicadezas ortográficas para mí. Las únicas que llevan mayúscula son Juanita Simón, Juanita Viale, Juanita Tinelli, Juanita Repetto, sor Juana Inés de la Cruz. A nosotras nadie nos invita a una foto ni a una alfombra roja; con suerte ligamos un chancletazo bien aplicado. En las tradiciones argentinas, al menos, no figuramos como protagonistas de ninguna leyenda, cuento, mito, fábula, novela o quimera. Ni siquiera se dignaron a inventarnos una superstición digna, de esas que asustan changuitos. Y eso que nuestra pestilente presencia, si algo tiene, es potencial narrativo. Sin embargo, apenas ocupamos un rincón mínimo del acervo pop-folklórico del país. En la Sociedad Argentina de Autores y Compositores hay contadas canciones que llevan mi nombre —con o sin...