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HISTORIA Maniqueos sí, maniqueos no

Versión actual del maniqueísmo

De dónde viene una forma de pensar que ha infectado el mundo con sus propuestas duales y siempre mentirosas

Los gnósticos fueron en su tiempo, una forma mucho más elaborada del maniqueísmo, si se entiende esta doctrina como algo más que la idea de oposición entre el bien y el mal, sin grises en el medio, tal como es planteado por el moderno analfabetismo funcional, tan en boga al menos en la Argentina. Viene de Zaratustra (o Zoroastro), el profeta iranio que recibió la iniciación del Verbo Solar, hasta Ahura-Mazda, pasando por Manes, el que dicen que fue el perseguido fundador de una religión de principios grandiosos, pero siempre en contradicción con el cristianismo.
A pesar de su refutación del orbe cristiano, logra insertarse en él y pretende trascenderlo. Ofrece a sus adeptos una cosmogonía, es decir una concepción distinta y una idea del Universo, tanto material como espiritual, que pretende ser mejor que el cristianismo.
Cualquiera sabe, y si lo ignora San Google lo avivará, que cuando Manes, el continuador de la Gnosis, fue encadenado y ejecutado, sus escritos ya se habían dispersado a los cuatro vientos. Cuando los obispos persiguieron a los maniqueos, el maniqueísmo fue extirpado de lo que en aquellos tiempos se conocía como el Asia Menor. Pero halló asilo en el Imperio Bizantino en las comunidades búlgaras del siglo VII, que lo introdujeron en lo que hoy es Italia tres siglos después. De ahí se propagó a la Europa medieval como reguero de pólvora: Alemania, Francia, Hungría.
Y en el Mediodía provenzal y languedociano halla una acogida muy favorable. El país occitano florecía bajo el influjo de la nobleza visigótica, una civilización refinada, muy avanzada. Esos nobles recogen los temas maniqueos, los afinan, se apoyan en el Evangelio de San Juan y en el Apocalipsis, y esta versión le aporta a su fe el sostén de una visión sagrada.
Por entonces ya eran los cátaros, es decir los puros, pues sostenían que tenían costumbres irreprochables, denunciaban la corrupción y la bajeza de la clerecía de su tiempo, según decían, entregada a la lujuria y a la corrupción, hundida en las riquezas materiales y prisionera del Príncipe de este mundo.
Bueno, perseguidos casi hasta su total desaparición, lo que se sabe de los gnósticos, maniqueos, cátaros o albigenses, como los llamaron a lo largo del tiempo, es lo que la Iglesia Católica dijo después que eran, pues todos sus escritos fueron quemados. De esos registros mal recordados se tomaron luego, entre otros, los francmasones, que eran (y son, si existieran, pobres tipos), la imagen degradada de una ciencia esotérica que originalmente creyó ser pura y era sólo oposición a Nuestro Señor Jesucristo.
Luego del cisma de la Iglesia Católica y hasta el siglo XVII, las tradiciones gnósticas estaban mezcladas con elementos extraños, lo que acarreó la confusión de las sectas a partir del Renacimiento. Todas pretenden tener una verdad y se proclaman portadoras de la tradición gnóstica, desde los ortodoxos griegos y rusos, hasta los anglicanos, pasando por los presbiterianos norteamericanos, los Iluminados, los despreciables rosacruces y la miríada de evangelistas de todo tipo, tributarios de la versión liberal y democrática que domina actualmente el mundo.
El iluminismo, una de las vertientes de esta religión antigua, pagana y falaz, presente en la civilización actual, todo lo contamina con una ilusión de pureza, honestidad, libertad (igualdad, fraternidad), que busca imponer el reino zoroástrico. De esa manera quiere estar presente en el enfrentamiento final que, según ellos, se dará inexorablemente entre el bien y el mal.
Se creen soldados de las huestes de la bondad, pero como concluirá usted, si ha seguido este escrito con un mínimo de atención y recordando el lejano catecismo, están equivocados, pues lo único que debieron buscar, es la Verdad, que no es un atributo del Dios de los católicos, sino su vero nombre, su esencia más intrínseca.
Podríamos seguir hablando de esta gente, pero por hoy, suficiente. 
Esto es, por supuesto una apretada síntesis, de síntesis, de síntesis, obviamente, si quieres saber más, ya sabe, vé a una buena biblioteca popular y entérate, amigo. 
Juan Manuel Aragón
A 14 de junio del 2024, en Vuelta de la Barranca. Preparando chupín de bagre.
Ramírez de Velasco®

Comentarios

  1. Interesante escrito...aunque muy sesgado. "Despreciables rosacruces", ..."Religión pagana y falaz"... Pero bien escrito. Llamativo. Zurdos de mierda...declara el presidente...que parece no conocer los grises o tiene lo gris en falta...

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