![]() |
Niní Marshall |
El 18 de marzo de 1996, muere Niní Marshall, una humorista, actriz de comedia y guionista, apodada "El Chaplin con pollera" y "La Dama del Humor"
El 18 de marzo de 1996, murió Marina Esther Traveso, conocida por su nombre artístico Niní Marshall. Había nacido el 1 de junio de 1903 en Buenos Aires, y fue una humorista, actriz de comedia y guionista, apodada "El Chaplin con pollera" y "La Dama del Humor".Era hija de Pedro y María Ángela Traveso, una familia acomodada. La pérdida de su padre a los dos meses de edad la dejó al cuidado de su madre, quien la llamaba cariñosamente "Niní". Durante su adolescencia, se mudaron al barrio de Caballito en Buenos Aires, donde comenzó su carrera en publicidad. En su último año de secundaria, conoció a Felipe Edelman, un ingeniero, con quien se casó en 1922, poco después del nacimiento de su única hija, Ángeles. La alegría de la ocasión se vio empañada por la prematura muerte de su madre y las dificultades económicas derivadas del juego compulsivo de su marido. Ante la ruina financiera, la pareja se separó poco después, y Niní volvió a casarse.Utilizando su experiencia en publicidad y su ingenio, consiguió trabajo en La Novela Semanal, una reconocida revista femenina, en 1933. También contribuyó al programa de variedades radial "Sintonía" como crítica de entretenimiento y publicista hasta 1934, y participó en numerosos programas de radio. Como escritora políglota y prolífica, comenzó a firmar sus variados artículos como "Mitzi". Debutó como cantante en Radio Municipal en 1936, cuando conoció a su segundo esposo, el empresario paraguayo Marcelo Salcedo. Pronto comenzó a actuar en el vibrante teatro de Buenos Aires, donde desarrolló dos personajes satíricos, Cándida y Catita; para entonces, ya había adoptado otro seudónimo: "Niní Marshall".
Estos papeles le valieron el prestigioso premio Sensación Radiofónica en 1937 por su trabajo en "Sintonía" y un contrato cinematográfico con Lumiton Studios en 1938. Interpretando a su personaje "Catita" (una cocinera italoargentina), junto a Mecha Ortiz y Tito Lusiardo (los meticulosos empleadores de Catita), en "Mujeres que trabajan", el éxito de la comedia llevó a una oferta el año siguiente para interpretar a Cándida (una anticuada criada gallega), para la cual también escribió el guion.
Sin embargo, sus personajes con fuerte acento y el uso de humor étnico no estuvieron exentos de críticas. El gobierno de ese momento la prohibió en la radio en 1940 y, en 1943, el recién instalado Pedro Ramírez, la prohibió en el cine por "deformar el lenguaje", lo que la llevó a su exilio en Méjico. Como una de las principales atracciones de taquilla, interpretó a Catita o Cándida en numerosas películas más, destacando también en otros papeles cómicos notables, como la adaptación de Conrado Nalé Roxlo de "Madame Sans Gêne" de Victorien Sardou en 1945.
Después del derrocamiento del presidente Juan Perón en 1955, regresó a la Argentina y retomó su personaje cómico en su primer papel después del exilio en "Catita es una dama" en 1956, dirigida por Julio Saraceni. Continuó actuando en la radio y el teatro, creando numerosos personajes cómicos, entre ellos Cosme, Doña Catalina, Doña Pola, Mingo, la aristocrática Mónica Bedoya Hueyo de Picos Pardo Unzué Crostón, Niña Jovita, Pedantina, Sabelotodo y Ursilina (todas sátiras de estereotipos argentinos y algunos masculinos).
Su trabajo en el teatro contribuyó al reconocimiento de jóvenes colegas como Zully Moreno, Enrique Pinti, Antonio Gasalla y Juan Carlos Altavista, así como al éxito de obras teatrales como "Coqueluche" (con Thelma Biral) y un monólogo de 1972, "Y se nos fue de repente".
Su último papel cinematográfico fue junto al veterano cómico Luis Sandrini en "¡Qué linda es mi familia!" de 1980, una historia sobre el encuentro de una pareja anciana con la fama, que también sería la última película de Sandrini.
En 1981, recibió un Premio Konex y se retiró de la industria del entretenimiento al año siguiente. Escribió sus memorias en 1985 y regresó brevemente al teatro en 1988 para su amigo, el dramaturgo Antonio Gasalla, ganando reconocimiento como Ciudadana Ilustre de Buenos Aires en 1989. En 1992, las luminarias del cine argentino Norma Aleandro y Alfredo Alcón le entregaron un Premio a la Trayectoria, y se realizaron revivales de sus obras teatrales localmente y en París desde 1992 hasta 1995, incluyendo dos obras escritas en su honor.
Considerada la gran dama del humor argentino por tres generaciones, Niní Marshall falleció en Buenos Aires en 1996 a la edad de 92 años.
©Juan Manuel Aragón
Una grande del espectáculo que en su tiempo, ni ella, ni Sandrini, ni Pepe Biondi, ni la Lamarque recurrían a vulgaridades para ganancias de imágenes forjadas en el buen criterio de hacer reír y llorar por sus actuaciones
ResponderEliminar