Ir al contenido principal

ANIVERSARIO Hace 25 años inauguraron la Casa de Gobierno

Placa recordartoria de la segunda inauguración

Aunque muchos crean que es más vieja, en 1999 el edificio más emblemático de la provincia fue inaugurado por segunda vez, aquí se explica por qué


En febrero de este año se cumplieron 25 años de la inauguración de la Casa de Gobierno de Santiago del Estero. ¿Cómo?, la hacía mucho más vieja, dirá usted. Y sí, pensándolo bien también tendrá razón. Para entender el por qué de la segunda vida de uno de los edificios más emblemáticos de la provincia, se debe recorrer parte de su historia.
En 1999 el entonces gobernador Carlos Arturo Juárez inauguró la remodelación del edificio, arrasado por el fuego desde el mediodía del 16 de diciembre de 1993, hasta bien entrada la madrugada del día siguiente, cuando el incendio fue apagado definitivamente.
Imagine lector, era un lugar repleto de papeles, muebles de madera, alfombras, todos sumamente combustibles. Se temía que las estructuras no resistieran y muchos pensaron que se haría un edificio nuevo sobre las ruinas del anterior.
Pero durante el gobierno del cordobés Juan Schiaretti comenzaron las obras de remodelación, luego de comprobarse que las estructuras de la vieja casona habían quedado firmes. A la estructura original solamente se le agregó un subsuelo, en la vereda de la calle Absalón Rojas, para uso exclusivo de las máximas autoridades de la provincia. El resto permaneció más o menos igual, con los lógicos cambios de sitio de algunas oficinas que se mudaron de piso o se fueron a otro lado, como los ministerios de Educación y Economía, que ocupan hoy las torres del complejo Juan Felipe Ibarra, en pleno centro de la capital.


Se debe recordar que antiguamente la “Casa de Gobierno” era la propia casa de cada gobernador y fue así hasta el tiempo de Juan Felipe Ibarra y su sobrino, Manuel Taboada, que decidió construir una sede gubernamental frente a la Plaza Libertad, habilitada en 1868, en el mismo lugar en que después sería la Jefatura de la Policía y ahora es el Centro Cultural del Bicentenario.


Hasta un poco antes de mediados del siglo pasado, frente a lo que hoy son los Tribunales, funcionaba la terminal de colectivos. En las cercanías se comenzó a edificar, en 1948, un edificio para que fuera sede de la Municipalidad de la Capital. Pero estaba quedando tan bonito que, en un tiempo antes de su primera inauguración, que ocurrió en 1952, la provincia lo expropió para que fuese la sede del Poder Ejecutivo de la provincia, con la promesa de que más adelante construiría otra sede para el Municipio de los capitalinos.


Si usted lo mira bien, el estilo de la Casa de Gobierno es neocolonial, que estuvo de moda a mediados del siglo pasado, parecido al de la pequeña y bellísima capilla de La Montonera y el desaparecido Instituto del Lisiado, de calle 24 de Septiembre (del que se conserva una muestra, usada como capilla), todos obra del arquitecto Aníbal Oberlander. Los ornamentos y balcones de la Casa de Gobierno fueron diseñados y ejecutados por el escultor Roberto Delgado.
Como se dijo, en 1993, una pueblada que reclamaba al gobierno sueldos impagos desde hacía varios meses, arrasó, saqueó e incendió la Casa de Gobierno, el Palacio de Tribunales, la Legislatura, que entonces funcionaba en dependencias del teatro 25 de Mayo, la casa de César Eusebio Iturre, que había sido gobernador, de Carlos Arturo Juárez, que volvería a la gobernación tiempo después, sus principales ministros y algunos colaboradores. No se metieron con la casa del entonces gobernador Fernando Martín Lobo, sólo porque la policía alcanzó a defenderla.
Sólo para completar la nota, para escribir a la Casa de Gobierno se debe poner en el sobre Rivadavia oeste 550, ((4200), Santiago del Estero. Si quiere hablar por teléfono, marque el 0385 450-5000. Está ubicada geográficamente en la capital de los santiagueños que, como lo saben todos es la cabecera del departamento Juan Francisco Borges.
Juan Manuel Aragón
A 16 de agosto del 2024, en la Cruz Roja. Haciéndome poner una inyección.
Ramírez de Velasco®

Comentarios

  1. Cristian Ramón Verduc16 de agosto de 2024, 8:05

    Todo eso lo ha pagado Juan Pueblo, como ocurre siempre con las fantasías de Su Majestad de cada momento.

    ResponderEliminar
  2. tampoco van a atender en la vereda, Joaquin M. Romero

    ResponderEliminar
  3. Y quién lo va a pagar si no es el pueblo ?? La embajada norteamericana ? La estupidez de algunos es sorprendente...el problema consiste en que algunos no pagan en relación a su real capacidad contributiva, y fugan dólares , al exterior.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

HISTORIA La Casa de los Taboada

La Casa de los Taboada, recordada en El Liberal del cincuentenario Por qué pasó de manos de una familia de Santiago al gobierno de la provincia y los avatares que sucedieron en la vieja propiedad Los viejos santiagueños recuerdan que a principios de 1974 se inundó Santiago. El gobernador Carlos Arturo Juárez bautizó aquellas tormentas como “Meteoro”, nombre con el que todavía hoy algunos las recuerdan. Entre los destrozos que causó el agua, volteó una pared del inmueble de la calle Buenos Aires, que ya se conocía como “Casa de los Taboada”. Y una mujer que había trabajado toda la vida de señora culta, corrió a avisarle a Juárez que se estaba viniendo abajo el solar histórico que fuera de la familia más famosa en la provincia durante el siglo XIX. No era nada que no pudiera arreglarse, aunque ya era una casa vieja. Venía del tiempo de los Taboada, sí, pero había tenido algunas modernizaciones que la hacían habitable. Pero Juárez ordenó a la Cámara de Diputados que dictara una ley exprop

RECUERDOS Pocho García, el de la entrada

Pocho García El autor sigue desgranando sus añoranzas el diario El Liberal, cómo él lo conoció y otros muchos siguen añorando Por Alfredo Peláez Pocho GarcÍa vivió años entre rejas. Después de trasponer la entrada principal de El Liberal, de hierro forjado y vidrio, había dos especies de boxes con rejas. El de la izquierda se abría solo de tarde. Allí estaba Juanito Elli, el encargado de sociales; se recibían los avisos fúnebres, misas, cumpleaños. Cuando Juanito estaba de franco su reemplazante era, el profesor Juan Gómez. A la derecha, el reducto de Pocho García, durante años el encargado de los avisos clasificados, con su ayudante Carlitos Poncio. Pocho era un personaje. Buen tipo amantes de las picadas y el vino. Suegro de "Chula" Álvarez, de fotomecánica, hijo de "Pilili" Álvarez, dos familias de Liberales puros. A García cuando salía del diario en la pausa del mediodía lo esperaba en la esquina de la avenida Belgrano y Pedro León Gallo su íntimo amigo Orlando

HOMBRE San José sigue siendo ejemplo

San José dormido, sueña Un texto escrito al calor de uno de los tantos días que el mundo secularizado ideó para gambetear a los santos Todos los días es día de algo, del perro, del gato, del niño, del padre, de la madre, del mono, del arquero, de la yerba mate, del bombo, del pasto hachado, de la madrastra, del piano de cola, de la Pachamama, del ropero, de la guitarra, del guiso carrero, de la enfermera, del abogado, del pañuelo usado. Todo lo que camina sobre la tierra, vuela en el cielo, nada en el agua, trepa las montañas, nada en las lagunas, patina en el hielo, surfea en las olas o esquiva a los acreedores, tiene su día. Nada como un día sin connotaciones religiosas, sólo nuestro, bien masón y ateo, para recordar a los panaderos, a las mucamas, a los canillitas, a los aceiteros, a los carpinteros, a los periodistas a los lustrines, a los soderos, a los mozos, a los vendedores, a los empleados públicos, a los policías, a los ladrones, a los jugadores, a los abstemios y a los tomad