Directivos y personal de El Liberal sobre calle Libertad, en noviembre de 1998, para el 90 aniversario |
Una expresión que se hizo popular en el habla popular santiagueña es recordada por el autor, en una nota con perfume a final
Por Alfredo Peláez, “Fredi”
Alguien tiene que haber pronunciado la frase que ya es historia. Fue alguno de sus dueños; algún escriba bohemio, o tal vez un canillita cuando la noche se hacía día con el tibio sol de la madrugada. Aquello de "creele al Liberal", viene desde el fondo de la historia. Todos lo repiten como un latiguillo. Su autor es desconocido. Hasta el ingeniero Juan Manuel Aragón, padre, tenía en el centenario diario una columna con una viñeta que rezaba "Creele al Liberal".Aragón nació en Tucumán allá por el 30. Trabajó en el campo, como obrajero, a la muerte de su padre para mantener a sus hermanas. En el 57 se casó con Delia Hernandez, con la que tuvieron seis hijos, entre ellos Juan Manuel, el editor de este blog, inquieto y buen escritor como su tata.En el 63 se vino a Santiago convocado por el gobernador Benjamín Zavalía. Supo trabajar en Vialidad y luego de un paso de algo más de cinco años en el ingenio Ledesma, en Jujuy, fue ministro de Obras Publicas en el gobierno de Carlos Alberto Jensen. Era un hombre culto. Leyó todos los libros que había sobre Santiago, desde Di Lullo, Domingo Bravo y Bernardo Canal Feijóo, hasta el suplemento del cincuentenario de El Liberal. Sabía historia griega, latina, argentina; entendía bastante bien el latín y el griego y tocaba en la guitarra, como aficionado, piezas de Sors, Tárrega, Atahualpa y del acervo musical argentino.
Su enorme vena literaria lo llevó a escribir en El Liberal y en el Nuevo Diario. Su pluma dio vida a varios seudónimos, Absalón Alomo, Néstor Núñez y Silvestre Aquino, personaje de la novela Hijo de Hombre de Augusto Roa Bastos. Tuvo a su cargo las efemérides de El Liberal, las que llevó al Nuevo Diario. Allí dejaron de ser padre de su hijo, para ser compañeros de trabajo.
Pero, volvamos a El Liberal. Los hermanos José y Antonio compran el diario en febrero de 1929. Don Juan Figueroa, fundador del matutino, estuvo desde 1898 a 1929, es decir 38 años (una sola generación). Los Castiglione, estuvieron durante tres generaciones, José y Antonio de 1929 hasta 1972; Aldo y Julio César—hijos —desde el 72 y José Luis —nieto —desde 1995 hasta el 2002. Enrique Castiglione, hijo del Pocho, tuvo un breve paso por la dirección del diario.
El doctor Aldo decidió retirarse en 1995, al cumplir los 70 años y fue nombrado director honorario. Julio César ocupaba el cargo de director editorial y José Luis el de director ejecutivo.
Estos escritos despertaron internas. Posiciones encontradas. En lo personal le debo mucho a la familia Castiglione. Por ellos conocí el país y el mundo. El doctor Antonio me trató como un hijo, al igual que los doctores Aldo y Julio César. A mi modo de ver hubo cinco integrantes de la familia, que trabajaron por y para El Liberal, José y Antonio, Aldo, Julio César y José Luis.
Muchos se preguntarán que pasó con El Liberal. Digamos que hubo cuestiones de familia. Yo las sé. Pero mi eterna gratitud con la familia y mi amistad con José Luis e Ignacio Castiglione me impiden revelarlas. No tiene sentido: "Creele a El Liberal".
Ramírez de Velasco®
Es muy interesante y valioso. Me ha gustado. Lástima que viene de un periodista de El Liberal (Je je je, diría un amigo).
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